Una joven escuela con una gran tarea

Aunque aún no llega a sus 10 años de vida y todavía se considera joven, la Escuela de Conservación y Restauración de Occidente (ECRO) ha contribuido en la protección del patrimonio cultural que existe en Jalisco y algunos de sus estados colindantes, con el trabajo de sus docentes especialistas y estudiantes.

Alejandro Canales, director de la ECRO, asegura que el nacimiento de esta joven escuela se dio en un momento oportuno, coincidiendo con la existencia de una mayor conciencia por parte de la sociedad para proteger el patrimonio.

“Creo que ha sido muy pertinente la apertura de esta escuela. Por un lado, porque hay un patrimonio interesante qué rescatar; la sociedad cada día lo está asumiendo más como tal, es importante conservar en buenas condiciones el patrimonio cultural. Entonces, lo que se está logrando con esto, concientizar, pero también ya hay algo que es importante mencionar y es que la escuela surge en un momento en que ya la sociedad está consciente de esto… que también para la escuela esto es benéfico”, advierte Canales.

El director sabe que todavía es pronto para hablar del impacto que ha tenido la ECRO: “Los centros educativos con este grado son proyectos de mediano y largo plazo, no son resultados que se puedan ver de inmediato, creemos que todavía falta mucho por hacer, aunque podemos afirmar que los egresados están teniendo participación en varios estados y ése era uno de los propósitos de la escuela”.

Un claro perfil

Por lo pronto, ya está abierto un nuevo ciclo de la Licenciatura en Restauración de Bienes Muebles -carrera de cinco años de duración-, para iniciar el semestre a partir de septiembre.

Canales informa que normalmente ingresan en cada ciclo pocos alumnos, pues el perfil de los estudiantes de la carrera es muy claro y la ECRO ofrece una guía para evitar confusiones en algunos jóvenes, aclarando cuáles son las posibilidades y alcances de esta profesión.

“Los aspirantes deben tener claro que es algo que tiene que ver con el arte, pero también con la química, la biología, la historia, sobre el patrimonio cultural, las teorías sobre la restauración. Entonces, se aplica un examen, se aceptan pocos alumnos, porque obviamente hay alguno que no tiene el perfil o la aptitud en ese momento; aún así se presentan algunas excepciones, pero sí están más enfocados”.

De esta forma, la ECRO recibe entre 18 y 22 alumnos en cada ciclo, quienes se desarrollan en diversos talleres (papel, madera, pintura), de tal suerte que al final de la carrera tengan conocimiento de todas las áreas, aunque hayan decidido especializarse solo en una.

“Cuando salen son restauradores, saben sus alcances y en todo caso saben con quién apoyarse ante una problemática determinada”, advierte Canales.

Uno de los requisitos para ingresar a la carrera es tener disponibilidad de tiempo completo, pues habrá ocasiones en que sea necesario salir de la ciudad para hacer prácticas que a veces duran hasta una semana.

Por lo pronto, ya está abierta la convocatoria para asistir a la Escuela de Conservación y Restauración de Occidente. La inscripción tiene un costo de 850 pesos y el semestre cuesta tres mil 500 pesos. Más informes se pueden obtener en el sitio de internet www.ecro.edu.mx o directamente en la ECRO (Analco 285, Barrio de Analco), de 8:00 a 16:00 horas. Los teléfonos son el 36 17 14 09, 36 17 28 19 y 36 17 27 41.