Roberto Sosa entra al mundo de Juan Orol

CIUDAD DE MÉXICO (07/DIC/2011).- Más que definirlo como algo despreciado u olvidado, el actor Roberto Sosa prefiere denominar al arte fílmico de Juan Orol (1897-1988) como algo desconocido para el público, pero que fue un parteaguas en la historia cinematográfica de México.  

“Es un cine desconocido, se ha visto poco y la historia fílmica nacional le ha hecho poca justicia, pues más que un cine de ficheras, es el parteaguas entre el cine de rancho, el de haciendas donde estaba Gabriel Figueroa con sus hermosos paisajes y el de la ciudad. Lo que hizo Juan Orol fue una escuela y yo espero que El mundo fantástico de Juan Orol (el filme que protagoniza) sirva para que los chavos conozcan de su trayectoria y propuesta, ya que quienes tienen 20 ó 35 años la ignoran”, comentó Sosa.  

Destacó que Orol, a quien se le conoce como “El Gran Surrealista Involuntario”, realizador de películas como Historia de un gángster (1968) y Amor salvaje (1949), entre otras, no sólo se ocupaba de dirigir, sino también de producir, escribir, musicalizar e incluso actuar. “Era como un hombre orquesta y debido a que hacía sus películas con pocos recursos económicos, parecía que eran malas, pero yo creo que conformó un género y viene siendo como el abuelo del cine de las ficheras, pero antes llegó el de las rumberas”.  

Sosa recordó que debido a que su familia siempre fue muy cinéfila, él creció viendo películas “de rancho, de los años cuarenta, de gángsters, rumberas, Pedro Infante, ‘El Indio’ Fernández o Roberto Gavaldón. “Mientras comíamos, mi padre nos ponía las del canal cuatro y recuerdo que vi muchas de Orol”. 

Un trabajo artesanal

Ahora que estelarizó El fantástico mundo de Juan Orol, bajo la dirección de Sebastián del Amo, admitió que se sumergió por completo en la propuesta, tanto que se dio la oportunidad de ver las 58 producciones de su filmografía. “Sólo había visto como 10, así que debí estudiarlo perfectamente para hacer un buen trabajo. Orol es un personaje maravilloso y entrañable, disfruté mucho este proyecto. Además, trabajé con un reparto maravilloso, hubo mucho entusiasmo y amor”.  

Caracterizarlo no fue complicado para Sosa, pero sí cansado debido al diapasón de 60 años, pues interpreta al cineasta en su etapa joven, adulta y en sus últimos días de vida. “Fueron seis horas de maquillaje, había que esperar a que me pusieran y quitaran cosas. Trabajar con la voz y el cuerpo, fue un tanto complicado, pero a la vez gozoso. Yo definiría todo como un gran reto”.  

Cuando la producción logre conseguir un distribuidor, adelantó que el público será testigo de la parte humana de Juan Orol: “Verán aquel padre queriendo encontrar un lugar en la vida. Intentó ser torero, boxeador, correr coches e ingresar a la policía secreta. Por todo esto, así resultaban sus películas. Descubrió el cine ya un poco tarde, cuando tenía más de 30 años, pero hizo más de 50 filmes en un periodo de 25 años y hoy en día no existen directores así”. 

PARA SABER
Busca distribuidor

El director Sebastián del Amo confía en que su opera prima se proyecte en el próximo Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG) y consiga un distribuidor.  

En la producción también actúan Ximena González-Rubio, Gabriela de la Garza, Fernanda Romero, Jesús Ochoa, Roger Cudney, Karin Burnett, Plutarco Haza, Alfonso Barbolla, Rodrigo Murray y Julio Bracho.