Quvenzhané Wallis, la niña maravillosa del cine

CIUDAD DE MÉXICO (13/FEB/2013).- Quvenzhané Wallis derrocha simpatía y bienestar. Sabe cómo moverse en el siempre muy aceitado mundo del entretenimiento y,  con sólo nueve años, es la actriz más joven en ser candidata a un Oscar.

Ahora, como es lógico, el éxito y la fama la persiguen, al punto de que en estos días ha sido noticia porque podría interpretar a “Annie” en la adaptación cinematográfica del famoso musical de Broadway, en un proyecto de la empresa de Will Smith, asociado con la productora de Jay-Z, el esposo de Beyoncé Knowles.

Will Gluck, director de ''Amigos con beneficios'', protagonizada por Justin Timberlake y Mila Kunis, estará a cargo de volver a traer a la pantalla grande la historia que en 1977 ya fuera llevada al cine.

Quvenzhané Wallis es la protagonista de ''Beasts of The Southern Wild'' (que en nuestro país se llamará Una niña maravillosa), el filme que este 14 de febrero llega a las salas mexicanas, precedido de varios premios, entre ellos el AFI Awards en la categoría de película del año.

En Cannes, la película ganó el FIPRESCI en la categoría Una cierta mirada, para el director Benh Zeitlin.

El realismo mágico revive en Nueva Orleans
En una olvidada, pero hermosa comunidad, que se rehúsa a ser vencida por la muerte, pero en donde sobrevivir es una lucha constante, vive Hushpuppy, una pequeña niña de seis años, junto con su padre Wink, un alcohólico que busca prepararla y protegerla del mundo para cuando él ya no esté.

Llena de optimismo y con una extraordinaria imaginación, Hushpuppy cree que el universo se encuentra en un balance perfecto, hasta que una terrible tormenta cambia su realidad.

Desesperada por salvar su mundo, la pequeña debe aprender a sobrevivir enfrentándose a terribles catástrofes, venciendo a la tragedia y superándola con un espíritu joven e intrépido que se niega a ser aplastado.

Mientras su padre está muriendo y el mundo está llegando a su fin, ella emprenderá una búsqueda que cambiará su vida.

Una niña maravillosa es una historia acerca de perder las cosas que te hicieron ser quien eres y cómo sobrevives no sólo física, sino emocionalmente, cuando llega una amenaza a tu vida. Una historia de amor y coraje, dice el boletín de prensa distribuido para la ocasión.

“Quiero llenar mi vida y mis películas de personas aventureras, valientes y con buen corazón. No importa si es un caos y todo se descontrola porque lo pasas con personas a las que quieres y, al final, la película acaba siendo aventurera, valiente y con buen corazón, lo cual me parece más importante que un movimiento de cámara impecable.

Este concepto está presente en todo el proceso de realización de Beasts of the southern Wild. Mi idea de hacer cine es fabricar una energía, un sentimiento, una forma de ser que se acople a las personas que hacen la película conmigo. Se trata de inventar una realidad y poblarla con las mejores personas que conozco”, dice el director neoyorquino Benh Zeitlin, de 30 años y quien también aspira a un Oscar en su categoría.

“Y esto es lo que pasó cuando escogimos a Dwight Henry, el dueño de la panadería y pastelería que está enfrente de mi casa, y a Quvenzhané Wallis, del Colegio Elemental Honduras, para hacerse cargo de los papeles protagonistas, Wink y Hushpuppy.

Ninguno había actuado antes, pero bastaba con mirarlos a los ojos para descubrir a unos guerreros intrépidos y saber que eran capaces de cualquier cosa. Y aunque hubo que reescribir el guión de principio a fin y cambiarlo todo, daba igual, porque se trataba de elementos superficiales comparados a la posibilidad de captar el espíritu indomable necesario para articular la película.

Aplicamos este principio a todas nuestras decisiones. ¿Creamos un escenario que simule el mar en un estudio o bien rodamos en el mar? ¿Adaptamos una locación accesible para que se parezca al fin del mundo o rodamos en el fin del mundo? ¿Convertimos a una niña de 11 años para que interprete a una de 6 o trabajamos con una niña de 6 años?”, explica el joven cineasta.

Su filme construye una poética enraizada en un realismo mágico afincado en la sufrida Nueva Orleans posterior al huracán Katrina.

“El sur de Luisiana me conquistó porque esa mentalidad está por todas partes. Llegué hace seis años para quedarme dos meses y todavía sigo aquí. Es el hogar de la gente más tenaz de Estados Unidos, una especie en peligro de extinción. Y es lo que quería plasmar en esta historia”, afirma Zeitlin.

“Los huracanes, la tierra que se pudre debajo de los pies, confiere la sensación de que, inevitablemente, un día de estos desapareceremos del mapa. Quise hacer una película que explorara cómo se puede responder a esa condena de muerte”, precisa.

Una niña entre las barcas y los pantanos
El éxito de la película dependía de encontrar a alguien capaz de calzarse los diminutos zapatos del enorme personaje de Hushpuppy.

Quvenzanhé Wallis fue hallada en Houma, donde se rodaría la película, entre las barcas y los pantanos que le sirven de telón de fondo. No tenía entre 6 y 9 años, sino 5 la primera vez que hizo una prueba y “ya era una fuerza de la naturaleza capaz de una enorme concentración, con una poderosa imaginación e inteligencia emocional. Un auténtico huracán de humor y carisma natural”, dice el director.

Nació el 28 de agosto de 2003 en Houma, Louisiana y ha dicho en diversas entrevistas que durante la ceremonia del Oscar, a llevarse a cabo el próximo 24 de febrero, no usará un vestido largo “por miedo a tropezar”.

Estudia tercer grado en la escuela Primaria Honduras, en Houma. Su padre, Venjie Wallis, es camionero y su madre, Qulyndreia, profesora de escuela.

El nombre de la niña es una combinación de las primeras letras de los nombres de ambos y de una palabra en suajili, ‘hané’, que significa ‘hada’.

Después de este laureado debut, Wallis ha rodado Twelve Years a Slave, bajo las órdenes de Steve McQueen junto a Brad Pitt, Benedict Cumberbatch y Michael Fassbender.

Sinembargo.mx