Entretenimiento | El escritor cubano demuestra su capacidad para “hacer poesía en la prosa” La ninfa inconstante, el regalo póstumo de Cabrera Infante Su esposa rescató una novela que está “a la altura de las obras maestras” del autor Por: EL INFORMADOR 3 de octubre de 2008 - 18:14 hs GUADALAJARA, JALISCO.- Guillermo Cabrera Infante (Cuba, 1929-Londres, 2005) no cesó de escribir hasta casi el final de su vida y de los inéditos que dejó se rescata ahora La ninfa inconstante, una novela que está "a la altura de las obras maestras" de este autor y que vuelve a demostrar su capacidad para "hacer poesía en la prosa". "Éste es el Guillermo más sincero, más puro". Así describe el nuevo libro de Cabrera Infante quien mejor lo conoció: Miriam Gómez, su compañera de tantos años. El escritor cubano dejó la obra acabada, pero no ordenada. Como línea orientadora para su publicación, Cabrera Infante había dado solo una frase: "El libro ha de tener la intensidad de un bolero". A partir de entonces, su esposa inició la laboriosa tarea de organizar todas las hojas escritas a mano, intentando que el libro saliera como el propio autor hubiera querido. Lo hizo como una montadora de cine, respetando cada línea y seleccionando cada escena como si se tratara del montaje de una película: "Yo no soy escritora, tenía que hacer esto organizando sus memorias, intentando visualizar las escenas y sin tocar lo que él había escrito". El resultado es una obra con muchas pinceladas autobiográficas, un libro melancólico como las historias de amor y un repaso a la vida de Cabrera Infante cuando aún era crítico de cine y firmaba con el seudónimo de G. Caín. La ninfa inconstante toma su título de La ninfa constante, una película de 1943 protagonizada por Charles Boyer y Joan Fontaine. Ahí termina el paralelismo con una cinta a la que Cabrera Infante consideraba "ñoña, de niñas". En el fondo -humor, sexo y muertes aparte-, el suyo es un libro sobre la nostalgia. Miriam Gómez insiste en ello a la vez que subraya que su marido era un escritor de ideas, "no un cuentacuentos". Tampoco era un nostálgico, insiste. La nostalgia salía de la máquina de escribir. Nostalgia de un pasado que "solo se hace visible a través de un presente ficticio", como dice al narrador, para el que La Habana es "una isla encantada" de la que era a la vez "explorador y guía". Es la Cuba anterior a 1959, el año de la victoria de Fidel Castro. De ese tiempo habla también Cuerpos divinos, otro de los inéditos en cuya organización trabaja Miriam Gómez: "Es su libro más autobiográfico". Aunque queda otro aún más abiertamente pegado a la vida de Cabrera Infante, Mapa dibujado por un espía, que una vez se llamó Ítaca vuelta a visitar y que narra su último viaje a Cuba. Fue en 1965. Su madre había muerto y el escritor, que ejercía como diplomático en Bélgica, volvió decepcionado con la revolución. Y hasta nunca. Cabrera Infante terminó ese Mapa hace 20 años, pero nunca volvió sobre el original. Demasiado doloroso. Lo fue aplazando y, como dice su mujer, "cuando vienes a ver, ya es demasiado tarde". Y hay más inéditos. Miriam Gómez se refiere a ellos como las "paginitas": varios miles de notas, comentarios y reflexiones que su marido iba almacenando en libretas y blocs. Le gustaría hacer una edición facsímil después de separar el trigo de la paja. No obstante, tardarán en salir. Como el resto de la obra, el material pasará ahora por las manos de un nuevo agente, Andrew Wylie, encargado de colocar al narrador cubano en el mercado anglosajón. Temas Literatura Artes Poesía Lee También Álvaro Pombo recibe el Premio Cervantes en Día Internacional del Libro Rosario Castellanos: la mujer clave de la literatura mexicana De la literatura al liberalismo: Mario Vargas Llosa La ciencia revela los secretos ocultos en Los Teules de José Clemente Orozco Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones