Igor Lozada continúa al frente de cultura

GUADALAJARA, JALISCO.- “Es un momento de suma, más que de resta”, dice Igor Lozada con respecto a la creación de la Secretaría de Vinculación y Difusión Cultural, adscrita al Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) de la Universidad de Guadalajara, organismo que encabeza como solía hacerlo con la desaparecida Dirección General de Difusión Cultural (DGDC).

Tras la dictaminación del Consejo General Universitario (CGU) el pasado 29 de agosto, el momento por el que atraviesa la nueva Secretaría es de entrega recepción de lo que se trabajó anteriormente, esto como parte de un proceso obligado y necesario para el rector del CUAAD, Mario Alberto Orozco Abundis.

“No se ha dado la oportunidad de poder concluir el trámite, no obstante estoy acatando la decisión del dictamen, que dice que al día siguiente de la aprobación ya se convierte en Secretaría de Vinculación y Difusión Cultural. Hemos trabajando en una evaluación, con Mario Alberto Orozco Abundis, tenemos que ver cómo funcionamos hasta lo más profundo”, explica Lozada.

En sintonía con lo que ya había dicho antes Orozco Abundis (EL INFORMADOR, 03/09/2008), el proyecto con el que ha operado la DGDC se mantiene, lo que tiene que ver con los apoyos a creadores, pero se enriquecerá con la vinculación con la comunidad universitaria.

“El proyecto se mantiene -precisa Igor Lozada-, pero ahora tenemos más atribuciones y comunicación más directa con la comunidad universitaria. Todo el trabajo que estamos haciendo con la comunidad artística se fortalece para vincularse con la comunidad universitaria. Es algo que no habíamos podido hacer, aunque ya habíamos iniciado las labores de trabajo con la universidad”.

El nuevo secretario de Vinculación y Difusión Cultural precisa que el personal que laboraba en la antigua Dirección se mantiene tal y como estaba.

Raúl Padilla también se muestra optimista con los resultados que podrá rendir la nueva Secretaría: “Yo creo que va a ser para bien, porque ahora son áreas de difusión cultural, básicamente de difusión de las bellas artes, que van a estar más en contacto, más imbricadas precisamente con las áreas académicas, las que se forman profesionales del arte y donde se llevan a cabo investigaciones sobre otros ámbitos, lo que permitirá más imbricación. Y, para muchos efectos, permitirá que estas áreas sean una especie de campos clínicos para ellos”.