Esperpento de Barça

BARCELONA , ESPAÑA (02/MAY/2013).- Adiós Europa... y vaya de qué manera. La Champions de Wembley se la jugarán dos equipos alemanes, el Borussia y el Bayern, como quedó escrito desde los juegos de ida en Dortmund y Munich.

La despedida europea del Barcelona fue tan humillante que costará levantar el ánimo para cantar el “alirón” como campeón de Liga. Dimitió de mala manera de Europa. Nunca compitió desde la alineación y menos a partir de los cambios. El escarnio ha sido mayúsculo de principio a fin, en la ida y en la vuelta, con y sin Messi... ¿Fue el fin de una era?... en poco tiempo se sabrá.

El barcelonismo acompañó en masa a su equipo hasta que llegó a las puertas del Camp Nou y se enteró de que no jugaba Messi. A algún socio le dieron ganas de darse media vuelta por sentirse sorprendido, estafado o desengañado. Nadie reparó entonces en el partido ni en la remontada, en el Barça ni en el Bayern, aturdida la afición por la suplencia del “10”, cuyas lesiones son tan indescifrables para la crítica como su juego para los defensas: solo se sabía hasta ahora que jamás se borraba y era capaz de jugar a la pata coja. El impacto por la ausencia del argentino fue decisivo porque ningún aficionado había urdido un plan sin contar con él.

No estaba Messi, seguramente porque sus sensaciones eran malas, y su dolor fue contagioso. Tampoco jugaban Busquets, Puyol, Mascherano y Alba, ya sea por una mala gestión del plantel, por un rosario de calamidades o por la fatalidad, la alineación denunció el desguace del Barcelona. Los azulgrana llegaron descuartizados a la cita más exigente de la temporada. No les quedaba más remedio que enfrentarse al Bayern desde la inferioridad y también desde la rebeldía. La montonera azulgrana aguantó medio tiempo y para el segundo, Bayern salió enchudado, no tuvo clemencia.

Robben sorprendió a todos al anotar el primero (5-0 global) y provocó una reacción esperpéntica en el Barça. Vilanova retiró a Xavi e Iniesta como si el partido le importara un rábano, y dejo el equipo a la intemperie, sometido al vendaval del Bayern, que dejó dos tantos más de propina, uno en propia puerta de Piqué, después de un centro de Ribéry, y el tercero de Müller.

Ya no hubo ronda ni contienda ni siquiera un acto de fe o de orgullo barcelonista, de manera que los aficionados se fueron largando poco a poco del estadio, ruborizados por el presente y espantados por el futuro.

Dolorosa

Hacía mucho tiempo que no se vivía una eliminación tan decepcionante y vergonzosa en el Camp Nou, nada que ver con las dolorosas caídas ante el Inter o el Chelsea, aceptadas y aplaudidas por la afición. Ausente desde hace tiempo el juego, perdido el ingenio y la creatividad, ayer ni siquiera se apeló al valor. No hubo ni héroes ni villanos, ni locura ni sensatez, ni alivio ni honor, ni actuaron como niños ni como adultos, ni en broma ni en serio, sino que el Barça asumió un marcador final de 7-0 con el Bayern como si fuera un bolo de pretemporada, camino no se sabe muy bien hacia donde, dejados de la mano de Dios.

EL PAÍS

ALINEACIONES

Así jugaron

Barcelona: Valdés; Alves, Piqué, Bartra (Montoya, 86’), Adriano; Song, Xavi (Alexis, 55’), Iniesta (Thiago, 65’); Pedro, Cesc y Villa.

Bayern: Neuer; Lahm (Rafinha, 76’), Boateng, Van Buyten, Alaba; Javi Martínez (Tymoshchuk, 74’), Schweinsteiger (Luiz Gustavo, 66’), Müller; Robben, Ribery y Mandzukic.

CLAVES

La derrota

1. Imposible sin Messi. Si ya era complicada la idea de remontar cuatro goles al Bayern, la baja de Messi redujo a cenizas cualquier atisbo de milagro. El equipo lo entendió así desde el minuto uno.

2. Imposible sin físico. Barcelona aguantó la primera parte pero con el paso de los minutos se notaron sus carencias físicas frente a un rival portentoso.

3. Imposible sin brújula. Tito Vilanova queda marcado por esta debacle, más que nada porque nunca tuvo respuestas para las amenazas bávaras. Movió el banquillo tarde y mal, en la ida y en la vuelta.

FRASES

''Para la temporada que viene habrá que tomar alguna decisión''.

Gerard Piqué, defensa del Barcelona.

''No sé a qué se refiere Piqué, habrá que preguntarle''

Sandro Rosell, presidente del Barcelona.

''Si Messi jugaba podía romperse y así no podía ayudar al equipo''.

Tito Vilanova, estratega del Barcelona.

LO QUE SIGUE

La final de Wembley será 100% alemana, con el Borussia Dortmund y Bayern Munich, que este fin de semana,como coindicencia se enfrentan en la Bundesliga.