América cierra el 2015 con dificultades

CIUDAD DE MÉXICO (26/DIC/2015).- Lo que pudo haber sido un año de ensueño para el América, al final se convirtió en una completa pesadilla, luego de fracasar en los Torneos Clausura y Apertura 2015, así como en el Mundial de Clubes 2015.
 
Antes que comenzara el Clausura 2015, el cuadro "azulcrema" era marcado favorito para llevarse el título. Los argumentos eran muchos, desde la llegada del técnico del momento, el uruguayo Gustavo Matosas, así como los jugadores que arribaron.
 
El argentino Christian Pellerano, el paraguayo Miguel Samudio, el colombiano Carlos Quintero y el argentino Darío Benedetto fueron los refuerzos, los cuales se sumaban al plantel en el que ya se encontraba ecuatoriano Michael Arroyo, Oribe Peralta y Rubens Sambueza.
 
Se esperaba que el equipo arrasara, sin embargo, la realidad fue completamente diferente, al grado que tras la goleada de 4-0 que sufrió ante Veracruz en la fecha 11, Matosas presentó su renuncia, la cual no fue aceptada por el presidente deportivo Ricardo Peláez.
 
Con algunos tumbos, logró llegar a la liguilla, sin embargo, fue eliminado en las primeras de cambio, por el cuadro de Pachuca, que los derrotó en ambos partidos.
 
En el plano internacional, dentro de la Liga de Campeones de la Concacaf, fueron capaces de levantarse de una goleada en la ida de semifinales por 3-0 ante el Herediano, y darle la vuelta en el segundo juego con una victoria de 6-0.
 
Ya en la final, apenas sacaron en casa el empate a un gol con el Impact de Montreal, al cual fueron a derrotar a su casa 4-2, para así convertirse en el mejor equipo de la Concacaf.
 
En los días posterior a quedar fuera del Clausura 2015, se dio a conocer "por mutuo acuerdo" la salida de Matosas y la llegada de Ignacio Ambriz, algo que generó muchas críticas por el corto curriculum del estratega.
 
Para el Apertura 2015 se mantuvo la base y sólo llegó gente como el mediocampista Javier Güemez y regresó el volante colombiano Andrés Andrade.
 
Cinco victorias en fila, de la fecha tres a la siete generaron una gran expectativa, sin embargo, derrotas en el "clásico nacional" ante Guadalajara generaron muchas dudas, sobre todo por la indisciplina de sus jugadores, que muy fácil se ganaban las tarjetas rojas.
 
Como sexto clasificado, tuvo que verse las caras con el León, serie que definió en la ida al ganar 4-1, y aunque perdió en el segundo duelo, logró su pase a semifinales.
 
En la antesala de la final, su rival fue Pumas de la UNAM, equipo al que superó de manera clara cuando estaban 11 contra 11, pero nuevamente la indisciplina de sus jugadores y la poca personalidad de su técnico, provocaron que se quedaran con nueve hombres, algo que aprovechó el rival para vencerlo 3-0.
 
Durante los segundos 90 minutos estuvieron cerca de la proeza, pero nuevamente sus jugadores fueron incapaces de contener su ímpetu y se quedaron a un gol de llegar a la final.
 
Motivado por esta demostración, el equipo viajó a Japón para disputar el Mundial de Clubes, donde sus sueños se terminaron en el primer duelo ante el Guangzhou de China, que vino de atrás para vencerlos 2-1.
 
En ese encuentro nuevamente la indisciplina se hizo presente, luego que Quintero le propinó un cabezazo a Sambueza, ejemplo claro de la falta de autoridad que existe en el equipo, que cerró el año sumando un fracaso más.