Kurt Rosenwinkel hechiza a los tapatíos con su guitarra

GUADALAJARA, JALISCO (27/OCT/2013).- No se equivocan los que señalan que Kurt Rosenwinkel es uno de los guitarristas más emotivos y una de las voces más singulares en el jazz moderno. Esa observación quedó más que clara durante el concierto que el músico estadounidense ofreció en el Teatro Degollado y que comenzó a las 18:00 horas.

En esta tocada lo acompañó una atenta concurrencia, cuya participación tuvo relevancia en el ambiente de relajación que se creó en el recinto tapatío.

En la parte inferior del teatro, con los ojos cerrados, y acomodadas sobre las lunetas, que no lucieron agolpadas, algunas personas escucharon el concierto. El apaciguamiento sólo se rompió cuando, obligados por el silencio en la sala, los asistentes generaban un breve estallido de aplausos.

Echando mano de su guitarra y otras veces de un teclado que tenía frente a él, Rosenwinkel presentó un recital relajante y multicolor. Destacaron los sonidos generados por el entreveramiento de su voz y su guitarra. El estadounidense lograba esta mezcla al conectar un micrófono al amplificador del instrumento.

El músico aprovechó una pausa en el concierto para agradecer la asistencia de los melómanos y para destacar la belleza del Teatro Degollado. Después alejó el micrófono e improvisó una pieza con su guitarra.

Kurt Rosenwinkel nació en 1970, en Philadelphia, Pennsylvania. Actualmente radica en la ciudad de Berlín, Alemania. Estudió en la escuela de música Berklee y después se unió a la gira de Gary Burton. Ha colaborado con agrupaciones como  Brian Blade Fellowship, Electric Bebop Band, de Paul Motian, el grupo de Joe Henderson, Human Feel, y con músicos como Mark Turner, Brad Mehldau y Q-Tip. En 1995 obtuvo el premio de compositores de la National  Endownment For The Arts.