Juan Gil Preciado, a un siglo de su nacimiento

GUADALAJARA, JALISCO.- Numerosos personajes de la vida política, empresarial y cultural del Estado se dieron cita anoche en la Fundación J. Álvarez del Castillo, escenario de la presentación del libro de Mario Aldana Rendón, La vida sobresaliente de un jalisciense distinguido, dedicado a Juan Gil Preciado (1909-1999).

Elogiado tanto por su desempeño como maestro normalista como por su labor en el campo político (fue gobernador de Jalisco del 1 de marzo de 1959 al 20 de noviembre de 1964), Gil Preciado fue señalado durante el acto por su hijo, Arturo Gil Elizondo, como “un ejemplo de servidor público”.

En el transcurso de la velada literaria, organizada en el marco del centenario del nacimiento de Gil Preciado, Guillermo Cosío Vidaurri, también ex gobernador del Estado, se refirió al homenajeado como “un hombre que jamás engañó”.
Otro en elogiar la vida y otra de quien fuera también secretario de Agricultura y Ganadería del país durante la presidencia de Gustavo Díaz Ordaz, fue su alumno Adalberto Gómez Rodríguez, quien le recordó como “un lector de novelas históricas y biografías”, además de ser “un hombre supersticioso al que no le gustaba el color café”.

Personaje de convicciones firmes, Juan Gil Preciado presumió durante su vida un carácter fuerte e indomable. Y es que “la política, después de todo, no es actividad para los pusilánimes”, como señala el presidente de El Colegio de Jalisco, José Luis Leal Sanabria, en el prólogo de La vida sobresaliente de un jalisciense distinguido.