Jesús Guerrero Santos, orgullo de artesano

GUADALAJARA, JALISCO.- A Jesús Guerrero Santos no paran de lloverle los premios desde que un buen día, hace 20 años, tomó la decisión de dar una vuelta de timón para cambiar su rumbo profesional como empresario de cine para dedicarse a la artesanía. Ahora es la organización del Festival Cultural de las Fiestas de Octubre la que reconoce la trayectoria y el compromiso a lo largo de dos décadas ya con la cultura jalisciense de este artesano nacido hace 70 años en San Martín de Hidalgo, haciéndole entrega esta noche en el Museo Regional de Guadalajara la Presea Ave de Plata.

Una distinción que le llena de satisfacción, en parte porque le gusta recibir reconocimientos. “No lo niego. Yo creo que la gente no se equivoca cuando reconoce a alguien y, en mi caso, estoy muy agradecido con las Fiestas de Octubre por otorgarme la Presea Ave de Plata. Es como confirmar que uno está trabajando bien y que para todos es vital el reconocimiento”.

Trabajo en equipo

A Guerrero Santos le llena especialmente de orgullo haber podido sostener “durante estos tiempos tan difíciles” el taller que abrió en Tonalá tras descubrir allá por 1988 su pasión por la cerámica, empresa que no habría sido posible sin la ayuda del grupo de artesanos que trabaja con él. “Ellos ponen el oficio -señala- y mi intención del rescate o de la recreación se hace posible por esa comunión que hay entre las manos de los artesanos y un servidor”.

Pero si hay un acontecimiento que, como él mismo reconoce, le ha marcado profundamente en su trayectoria personal y profesional es cuando visitó el Vaticano en diciembre de 2007 para presentarle al Papa Benedicto XVI el árbol de Navidad decorado con piezas de cerámica pintadas a mano por él que decoró el Aula Pablo VI y obsequiarle un retablo de plata de tres piezas con una imagen de la Virgen de Guadalupe en el centro también de su autoría.

Al hilo de este importante capítulo de su vida, Guerrero Santos recuerda que “estábamos en la ceremonia final y mi esposa me dice: ‘¿Y después de esto qué sigue?’. Yo, bromeando, le contesté: ‘La vida nos depara más cosas’. Creo que es también un reconocimiento seguir trabajando a pesar de lo que está pasando con todo esto de la influenza y tener un equipo de artesanos formado, porque yo pertenezco a sus manos, al oficio… Es un privilegio desde el día que tomé la decisión de cambiar mi trabajo relacionado con el cine”.

No obstante, el séptimo arte ha sido para este artesano su canal de cultura. “Ahí encuentro filosofía, teología, diversión, hasta vouyerismo, esa ventana para meterte a lo privado, pero para aprender. Hay una imagen cinematográfica que conduce a uno a la reflexión y con eso me doy el gusto por el cine, el gusto por lo mío o por el arte popular”.

Gusto por lo propio

Guerrero Santos se enorgullece de haber nacido entre sábanas bordadas -“se me grababa en el cachete el deshilado”, asegura-, de calzar huaraches y de tener cobija en lugar de suéter. “Tuve la oportunidad de ser hijo de una madre que nos rodeó con cazuela, con jarro, con el cubrecama tejido a mano, con el gusto por lo nuestro; y de un padre que nos dio absoluta libertad para desarrollarnos y que me recordaba a veces que Vasconcelos tenía razón.

Soy resultado de una generación que tuvo la oportunidad de pensar que el bistec no es industrial, que los huevos los dan las gallinas y, gracias a eso, disfrutar ahora de la textura y del color del barro, y enorgullecernos de que en los museos europeos más importantes esté presente la artesanía del siglo XIX de Tonalá, de que por ahí anden mantos de pluma y platería mexicana. Se necesitan ahora estas cosas no para reinventar el arte popular, porque ya está hecho, pero sí para darle luz al artesano, saberle aplaudir y para que nosotros mismos apreciemos y valoremos lo que hacemos”.

Ante este panorama, tiene claro que sus esfuerzos deben ir encaminados a “ayudar a los artesanos a su transformación, a seguir peleando para estar en lugares en los que debemos estar, a que llegue la comunicación de que la gente se sienta honrada de que en una galería extraordinaria de Nueva York puede estar una obra mexicana”.

Ése es su sueño. Y para lograrlo, Jesús Guerrero Santos tiene claro que debe “seguir trabajando y luchando para que el arte popular o la artesanía sea renocida por el mundo. Además, dondequiera que vamos y nos ponemos hemos recibido el aplauso, la gente nos reconoce, la artesanía jalisciense es un buen mostrador”.


RECUADRO

En síntesis

QUÉ. Entrega de la Presea Ave de Plata
QUIÉN. Jesús Guerrero Santos
CUÁNDO. Jueves 15 de octubre de 2009, 20:30 horas
DÓNDE. Museo Regional de Guadalajara (Liceo 60)


FRASE A DESTACAR

“Tuve la oportunidad de ser hijo de una madre que nos rodeó con cazuela, con jarro, con el cubrecama tejido a mano, con el gusto por lo nuestro”

Jesús Guerrero Santos, artesano