Con pancartas que rezaban "Ni una menos, vivas nos queremos", "Nos queremos libres, vivas y sin miedo", jóvenes activistas exigieron en la sesión del Congreso de Sinaloa que los funcionarios rindan cuentas sobre los 68 feminicidios cometidos este año en la entidad.Solicitaron que el gobernador, Quirino Ordaz Coppel; el fiscal general del Estado, Juan José Ríos Estavillo, y la titular del Instituto Sinaolense de las Mujeres, Reyna Araceli Tirado, comparezcan para explicar qué ha sucedido con la alerta de género vigente.Lucero Reyes, una de las activistas del organismo nombrado como #ConNuestrasHijasNoSeMetan, instó a Reyna Araceli a retractarse de sus palabras respecto a los feminicidios, pues estos son tomados como bandera política en búsqueda de votos.La activista hizo un recuento del número de mujeres asesinadas en ese año, cifra que alcanzó los 68 casos que involucran a varias muertes adolescentes. En una reunión privada con los miembros de la Comisión de Equidad, Género y Familia de la LXII legislatura, misma que preside la diputada local panista, Sylvia Treviño Salinas, volvieron a plantear que los funcionarios involucrados comparezcan ante el tema de los feminicidios.Una mujer miembro del Colectivo de Mujeres Sinaloenses, de nombre Teresa Guerra Ochoa, dijo que desde que fue decretada la alerta de género el 30 de marzo pasado el número de asesinatos violentos aumentó.
