A lo largo de los años, varios personajes polémicos de la política mexicana y el crimen organizado han sido traídos a México a bordo del jet Bombardier Challenger 605, el cual se volvió el instrumento predilecto de la FGR en sus extradiciones. César Duarte Jáquez, exgobernador de Chihuahua, acusado de asociación delictuosa y peculado por 96 millones de pesos, fue el último pasajero de este avión, que lo recogió ayer en la ciudad de Miami, Florida, tras ser entregado en extradición por el gobierno de los Estados Unidos.En esta aeronave se extraditó a Nueva York, al capo sinaloense Joaquín "El Chapo" Guzmán Loera, en enero de 2017, dos años antes de que Enrique Peña Nieto concluyera su sexenio. Un año después, en enero de 2018, la entonces Procuraduría General de la República (PGR) envió el Bombardier Challenger 605 a Panamá por el exgobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, detenido en ese país centroamericano por acusaciones de lavado de dinero, aprovechamiento ilícito del poder, peculado y desempeño irregular de la función pública.En julio de 2020, la aeronave de la FGR trajo a México al exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, detenido en España por su presunta implicación en los casos de los sobornos de Odebrecht y la compra a sobreprecio de la planta chatarra Agronitrogenados.El año pasado trajo de vuelta al país al empresario Alonso Ancira Elizondo, propietario de Altos Hornos de México (AHMSA), para enfrentar un proceso penal por lavado de dinero; también fue detenido en España.El Bombardier Challenger 605 formaba parte de la flotilla de aeronaves que la Fiscalía General de la República puso en venta en 2019.FS
