Las redadas en Estados Unidos (EU) continúan generando un gran revuelo. Desde el viernes pasado, 330 migrantes han sido detenidos en Los Ángeles, California, tras las redadas llevadas a cabo con la presencia de la Guardia Nacional. Según la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, 113 de los arrestados tenían antecedentes penales y 157 fueron detenidos por cargos de asalto y obstrucción, entre otros.Sin embargo, organizaciones civiles y sindicatos estiman que son más de 800 los migrantes encarcelados en todo el país, debido al incremento de los operativos y las protestas en 35 ciudades de 19 Estados.El conflicto se intensificó después de que una treintena de alcaldes de California se unieran ayer para exigir al Gobierno de Donald Trump que detenga las redadas. Las autoridades locales señalan que estas acciones están sembrando el miedo en las comunidades y provocando disturbios. Brenda Olmos, vicealcaldesa de Paramount, denunció haber sido alcanzada por balas de goma durante las protestas y pidió el cese inmediato de las redadas.La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, también se unió a las críticas, señalando que las redadas sólo están generando más temor y división. Ante la violencia creciente, decretó un toque de queda en el centro de Los Ángeles, que permanecerá en vigor el tiempo que sea necesario. Advirtió: “Si las redadas siguen, si los soldados siguen en nuestras calles, el toque de queda continuará”.El gobernador de California, Gavin Newsom, solicitó que un tribunal detenga la ayuda militar a los agentes de inmigración en la segunda ciudad más poblada de Estados Unidos (está programada una audiencia para hoy), pero el Gobierno federal mantiene un despliegue de cuatro mil 100 agentes de la Guardia Nacional y 700 marines en Los Ángeles.Jacob Vásquez, un trabajador que llegó desde México hace tres años, fue detenido en una de las redadas en el distrito de la moda de Los Ángeles. Su familia asegura que es el único sustento de su hogar y que su paradero es desconocido. Al igual que él, decenas de migrantes han sido arrestados en sus lugares de trabajo.Las hermanas Jaslyn y Kimberly Hernández también reportaron la desaparición de su padre, Joel, detenido el sábado en Culver City. “No sabemos dónde está”, dijo Jaslyn, de 17 años, visiblemente angustiada por la situación.Claudia Sheinbaum, Presidenta de México, reconoció que hay 61 mexicanos detenidos en las redadas. Todos se encuentran en contacto con los Consulados, especialmente con el de Los Ángeles, y reciben el apoyo necesario. Remarcó que trabajan para garantizar que sus derechos sean respetados.Por lo pronto, las organizaciones de inmigrantes y los sindicatos ya han convocado una megamarcha para el 14 de junio, bajo el lema “No kings day” o “Día contra los reyes”, en respuesta al desfile militar programado por Donald Trump para esa misma fecha, coincidiendo con su cumpleaños. Los organizadores esperan una masiva participación, con miles de personas que se unirán desde el centro de Los Ángeles para denunciar la militarización del espacio público.En San Francisco se anunció un acto simultáneo este sábado en Civic Center Plaza, replicando las voces de rechazo y solidaridad con los inmigrantes y defendiendo el estatus de santuario y la unidad familiar migrante. La intención es que se sumen más ciudades en estos días.Ante las redadas y protestas registradas en Los Ángeles y otras ciudades de Estados Unidos, el cónsul de México en Atlanta, Javier Díaz de León, llamó a los connacionales en Alabama, Georgia y Tennessee a “no caer en provocaciones” y a ser respetuosos con las autoridades.En un mensaje en sus redes sociales, el cónsul Díaz de León dijo que es de suma importancia que los mexicanos en Estados Unidos estén informados y conozcan cuáles son sus derechos, independientemente de su situación migratoria.“Llamamos a la comunidad mexicana a que mantenga la calma y que sea respetuosa con las autoridades, es muy importante que en todo momento actuemos de manera pacífica y no caigamos en provocaciones”, dijo.Mencionó que en caso de detención, no se debe oponer resistencia ni agredir a los oficiales; tampoco mentir ni proporcionar documentación falsa; no firmar documentos que no se entiendan; permanecer en silencio y solicitar que se notifique inmediatamente al consulado.Recordó que para casos de emergencia, el Centro de Información y Asistencia a Personas Mexicanas (CIAM) opera todo el día todos los días.