La cabeza deportiva de Ford, Mark Rushbrook, aseguró a un medio norteamericano que la empresa podría considerar regresar al máximo circuito sólo si se concreta un reglamento que limite los costos y presupuestos de los equipos. Aunque Ford no ha tenido presencia en el serial más importante del orbe desde 2004 bajo la imagen de Jaguar, que en esos momentos era parte del portafolio de marcas propiedad de la armadora, nunca ha dejado de invertir en el deporte y ahora concentra sus inversiones en su esfuerzo en el campeonato mundial de resistencia y en el Mundial de Rallies.Mark admite que le entusiasma más el poder regresar al circo que buscar ganar mercado en la relativamente joven Fórmula E, pues las tecnologías que se usan en la actualidad en la Fórmula Uno pueden ser útiles para el desarrollo de los autos comerciales de la marca y agrega el directivo que la apuesta de la armadora es en el largo plazo evolucionar a motores híbridos.Ford se suma a varias marcas dispuestas a incursionar en el serial, sin embargo condiciona su participación a razones económicas que necesita la nueva administración solucionar antes de que expire el reglamento actual en 2020. La discusión pareciera en papel simple, pero la realidad es que las fuerzas políticas y económicas que deciden el futuro del serial y que han invertido cantidades millonarias en el desarrollo, tienen argumentos válidos con los cuales rechazar reformas radicales.No es justo que Ford o Aston Martin lleguen al serial sin haber pagado un precio similar al de los equipos que forman la parrilla contemporánea, Ferrari ha gastado en su monoplaza cerca de mil millones de dólares y si los cambios al reglamento se aprueban las marcas vírgenes asumirán un costo de sólo 100 millones de dólares, significando sólo 10% de los recursos devengados por los demás.No existe receta milagrosa que termine la disparidad entre escuderías, siempre existirán aquellas que cuenten con un poco de más dinero, ya sea propio o resultado de buenas negociaciones con patrocinios, sin embargo en lo personal creo que nuevas marcas con distintos enfoques puede ser la combinación que necesita Liberty Media para crecer el circo a los niveles que pretenden.La presión aumenta para la administración con cada anuncio de que una nueva marca considera arriesgarse y espero que bajo el escrutinio diario del público Chase Carey y Ross Brawn tomen las medidas necesarias, pero hasta que eso no suceda, la Fórmula Uno no contará con una de las armadoras más grandes del mundo en su parrilla.Preguntas y comentarios @desdepista
