Oficialmente ya quedaron registrados los tres contendientes por la gubernatura de Jalisco que se pondrá en juego en las elecciones del próximo 2 de junio. Por el actual partido en el poder, MC, Pablo Lemus Navarro, alcalde con licencia de Guadalajara; por la coalición Sigamos Haciendo Historia en Jalisco conformada por Morena, PVEM, PT, Hagamos y Futuro con Claudia Delgadillo González, y por la alianza Fuerza y Corazón por Jalisco integrada por el PAN, PRI y PRD con Laura Haro Ramírez. La correlación de fuerzas entre los tres contendientes previo al arranque de la campaña electoral queda marcada por una encuesta de XtrategiaGdl publicada por el diario Mural el 6 de febrero. En esta encuesta Pablo Lemus aparece a la cabeza con 50 por ciento de intención de votos, seguido de Claudia Delgadillo con 42 por ciento y muy al fondo, Laura Haro con 8 por ciento de intención. Una de las sorpresas de este estudio de opinión son las estimaciones de intención del voto en la contienda presidencial en Jalisco. La abanderada de Morena, Claudia Sheinbaum aparece con 69 por ciento, por 23 por ciento de Xóchitl Gálvez y 9 por ciento del emecista Jorge Álvarez Máynez. Como cabría esperar, el resultado de la encuesta de XtrategiaGdl ha sido celebrado por quienes aparecen a la cabeza y algunos emecistas se anticipan a cantar victoria. Creo que los datos que ofrece esta encuesta más varios hechos del contexto local y federal pueden anticipar un escenario de desastre político para MC. En ningún sentido, los resultados de esta encuesta conceden una ventaja cómoda para MC. Ocho puntos de diferencia al arranque de la campaña no aseguran la victoria para Pablo Lemus, pues varios hechos juegan en su contra, más allá de lo que Claudia Delgadillo haga a favor de su campaña.A pesar del discurso de unidad que reitera una y otra vez el alcalde tapatío con licencia, todavía existe el riesgo de campaña de brazos caídos al interior de MC de alfaristas descontentos con Lemus. Además, persiste un desconocimiento de Lemus de la estructura y liderazgos de MC en los municipios e incluso se habla de falta de un coordinador de campaña que conozca a fondo a los personajes del partido. Un elemento que no juega a favor de Pablo Lemus es que Enrique Alfaro ha cumplido su palabra y ha dejado de operar acuerdos y decisiones importantes del partido que podrían dañar la campaña en curso. Emecistas enterados sostienen que Alfaro ya piensa más en su retiro a España al terminar su gubernatura que en operar exitosamente la campaña electoral a favor de sus herederos políticos. Por si fuera poco, el escenario nacional afecta a las campañas locales de MC, tanto a la gubernatura como a las principales alcaldías. Por un lado la virtual fractura del alfarismo con el dueño de la franquicia naranja, Dante Delgado; del otro, el agandalle de puestos para Dante, lo que restó espacios a cuadros cercanos a Alfaro.Un punto en extremo negativo es el entuerto de la candidatura presidencial de Álvarez Máynez que no convence a la mayoría de emecistas de Jalisco; se habla incluso de un voto diferenciado: Lemus para la gubernatura y Xóchitl Gálvez a la elección presidencial. Pero es una operación riesgosa, pues la enorme ventaja de la morenista Sheinbaum complica la operación de este voto diferenciado. Sheinbaum aventaja con 46 puntos a Xóchitl y con 61 puntos a Máynez. Poco se ha comentado, pero quizá en esta diferencia se podría jugar el resultado de la elección estatal en Jalisco el próximo junio. Si a esto se le añaden candidaturas potencialmente competitivas de Morena y aliados en municipios como Zapopan y Guadalajara, el escenario sería aún más difícil para MC, puesto que Morena como marca está muy por arriba del resto de los partidos, y los positivos de Claudia Delgadillo están relacionados con las ayudas y programas sociales del Gobierno de la 4T. Todo esto es un cóctel potencialmente explosivo para el actual partido gobernante que podría llevarlos a un escenario desastroso, es decir, de derrota.
