"El castillo de Cristal" es una película que actualmente se exhibe en las principales pantallas de nuestro país. Creo que es una buena película que todos los padres de familia deberían ver porque invita a reflexionar ya que nos muestra un ejemplo a no seguir.Esta es sin duda una película que invita a ver la realidad en forma muy seria y nos da la oportunidad de reflexionar en qué tipo de familia estamos cultivando.Todos los seres humanos nacemos a la vida y es precisamente el seno familiar el primer vivero donde se reciben los elementos más importantes para el desarrollo y desempeño futuro.No es suficiente tener hijos: los niños tienen derecho a un crecimiento integral en un contexto sano, normal... tienen derecho al cuidado, alimentación, y es obligación primigenia velar por su bienestar y su salud...Es ilógico dar a las nuevas generaciones un ambiente hostil para vivir y desarrollarse sanamente y luego pretender que se comporten y que se desenvuelvan en la vida como personas de calidad.Al ver en la película Castillo de Cristal la situación terrible de desamparo, abuso, maltratos y violencia que viven estos niños por una madre irresponsable centrada en sus intereses y vanidades y sueños veleidosos de artista frustrada, y un padre alcohólico, violento, fantasioso y dominador, ciertamente nos alarmamos, pero no basta, hay que recapacitar:Es innegable. La familia es el primer vivero donde va a germinar el futuro y no sólo de la persona sino el futuro de la humanidad, y si luego queremos personas excelentes, hay que cultivarlas con esmero y dedicación.Si bien en algunos momentos aunque el pasado se vuelve un lastre difícil de llevar, el dolor, las heridas causadas por el maltrato, traumas incubados desde la infancia, es posible salir del bache y pretender un nivel de vida más elevado, como lo muestra Jennifer Walls, en la película que mencionamos, porque nada justifica seguir modelos o patrones que nos legaron.Hoy por hoy, en ocasiones nos asustan ciertas noticias y/o predicciones sensacionalistas y/o fatalista respecto al futuro de nuestro planeta, pero no nos preocupa a ni mucho ni poco la degradación de los seres humanos en los cuales se juegan todos los logros de los ya milenios transcurridos a lo largo de la historia a tal grado que tal parece que vamos en retroceso hasta la edad de piedra.Pero hay otras circunstancias en que vemos padres y madres más enfocados en sus intereses personales que en favorecer lo mejor para los hijos no hay ni la más mínima preocupación por otro tipo de descuidos que se dan en las familias donde los niños están expuestos a abandonos, descuidos y atrocidades que vienen de fuera y entran por el aire revestidos de música y color; donde la realidad del amor se les presenta en forma absurda y distorsionada, donde antes de comprender el valor y grandeza de la vida, ya han llenado su mente y su corazón con escenas de violencia y de muerte.Hoy tenemos que pedir a Dios que nos haga ver con claridad qué debemos hacer y qué hay que evitar para hacer de nuestro mundo el lugar hermoso, amable y vivible que Él soñó en los albores de la Creación. .
