Hasta antes de ser derrotado por el ruso Dmitry Bivol, el tapatío y campeón mundial Súpermediano, Saúl “Canelo” Alvarez, aseguró en diversas ocasiones que una nueva pelea contra Gennady “GGG” Golovkin, ya no significaría un pleito interesante para él. Se mantenía como máquina productora de millones de dólares, con triunfos ante adversarios que él ha elegido, y que es lo que hay en las clasificaciones mundiales, boxeadores de pacotilla. El negocio hay que cuidarlo. “Canelo”, habló de una revancha inmediata con Bivol, debió medir el descenso de su popularidad con el segundo revés en su carrera. Con cálculo, estudió a los clasificados de la división Súpermediano para elegir al retador que lo regresara a la victoria y recuperar rating, solo encontró lo que ya conocía, monitos de transistores. El estadounidense David Benavidez, campeón mundial Súpermediano interino CMB, es el único que destaca, su palmarés, 26-0, con 23 nocauts favorables, y 1.85 de estatura. Como están las cosas, ni siquiera imaginarlo como elegible, para qué arriesgar a la gallina de los huevos de oro. Después de cuatro años, el boxeo encierra en una esquina al tapatío, necesita del viejo conocido, enfrentar al kazajo aunque duelan sus puños, necesita ganarle, para retomar el ascenso en popularidad. El 15 de septiembre de 2018 en Las Vegas, se celebró la segunda edición “Canelo”-“GGG”, la ganó por decisión el jalisciense. Antes, el 16 de septiembre de 2017, empataron, el combate se celebró también en Las Vegas. “GGG”, viene de noquear al japonés Ryota Murata en nueve episodios en abril en Saitama, Japón, donde unificaron los campeonatos mundiales de peso Medio FIB-AMB, actuación en la que se observó al oriundo de Karagandá, Kazajistán, lento como un paquidermo, con una defensa porosa y con la dificultad para mantener una constante en sus ataques. Esa noche creó combinaciones de nocaut, pero se frenaba, caminaba hacia atrás, jalaba aire para recuperarse, y regresaba a lanzar su repertorio. A Murata le hizo falta punch para terminar con la diestra en alto. Esta exhibición es termómetro para considerar que “GGG” podría ofrecer ventajas a “Canelo”, ya que además de la lona que tiene recorrida y su edad, 40 años, sube de categoría, perdería pegada y se presentaría más lento, así lo dice una de las máximas del boxeo. ¿Quién es el favorito?, siempre lo será el taquillero, “Canelo” debe ganar, se mantiene como el negocio de esta industria, esta es otra máxima del boxeo. En el cuadrilátero triunfará el menos lento, y en este renglón, el jalisciense supera al desafiante, por su edad, 32 años, y por sus combinaciones, aunque intermitentes, las envía con mayor velocidad. El tapatío para esta tercera edición, arriesgará sus campeonatos mundiales de peso Súpermediano CMB, AMB, FIB y OMB, mañana en la T-Mobile Arena en Las Vegas, dónde los jueces designados por la Comisión Atlética de Nevada, suelen emitir disparates, sólo un ejemplo, vieron perder a Manny Pacquiao ante Timothy Bradley Jr., por lo que los actores deberán buscar el nocaut, además les conviene. Este tercer encuentro de “Canelo” con “GGG”, no la consideramos pelea grande, por la veteranía del retador, compromiso que debió montarse en 2019, un año después de la segunda edición. Con estos números, el campeón Súpermediano, sólo tiene en su haber tres peleas grandes, con Floyd Mayweather Jr., y los dos encuentros con “GGG”. “Canelo” es quien está apostando su futuro en esta pelea, otra derrota será el inicio de su descenso. De las bolsas, informan que “Canelo” ganará 10 millones de dólares, a lo que se le debe sumar pago por ver, en total ganaría alrededor de 65 millones de dólares. Golovkin ganará una bolsa de 8 millones de dólares, más pago por ver, ascenderían sus ganancias a alrededor de 43 millones de dólares. Con estas cifras, “Canelo”, y “GGG”, deberían colgar los guantes y disfrutar de sus familias y respectivas fortunas. Los Reynoso, Chepo y Eddy, la mejor esquina del mundo de “Canelo”, verán abultada su fortuna a 64.7 millones de dólares, a partir de la pelea Alvarez-Mosley, sólo si continúan cobrando a “Canelo” el 30 por ciento de su bolsa. Y por ahí estaré atisbando.
