Ha resultado realmente extraño que si, como se dice formalmente, Omar Canizales Soto, planteó se aceptara su renuncia como Presidente de la Liga Mexicana del Pacífico LMP desde octubre pasado al iniciar la campaña 2021-2022, es decir, casi seis meses después que se la aceptaron de manera formal, se convocara a medios de comunicación sin tener definido aún a quien será su sucesor. Además, se informa que él mismo se mantendrá al frente en tanto se da el ajuste. Es decir, no se entiende que haya tenido que transcurrir tanto tiempo para hacer un anuncio en el que a final de cuentas no cambia nada. En la asamblea de jerarcas de los 10 equipos que conforman la LMP, (también llamada Liga Arco para efectos comerciales), efectuada este martes en un conocido hotel de la Ciudad de Guadalajara, sede de la Liga desde hace algunos años, se confirmó -para efectos de la opinión pública- que se acepta la renuncia del presidente ejecutivo del circuito beisbolero profesional más importante que se juega en México en otoño-invierno, aunque seguirá operando como dirigente provisional en tanto se nombre a su sucesor y se realice la entrega-recepción. Lo que se ha manejado es que desde hace algunos meses el propio sonorense había venido manifestando a los propietarios de los equipos su deseo de culminar su etapa al considerar que se cumplió un ciclo, recordando que Canizales Soto llegó al cargo de presidente de la Liga en la temporada 2008-2009, sucediendo al hoy finado Renato Vega Alvarado quien, hay que decirlo, le dejó la vara muy alta dada la personalidad, la capacidad y el dinamismo que le imprimió a la presidencia ejecutiva de la Liga.Si bien la gestión de Canizales puede calificarse como cumplidora; también hay que decir que para nadie es un secreto que el aún Presidente de la Liga Arco sufrió un desgaste propio del largo tiempo que se mantuvo al frente del circuito invernal beisbolero mexicano teniendo fricciones con algunos directivos y/o jerarcas de equipos, quienes consideran no fue una buena negociación la que se tuvo con Sky México en relación a la exclusividad de las transmisiones, pues generó monopolio de todas las imágenes dificultando la labor de promoción mediática ordinaria de los juegos, problemas de cobertura en medios diversos con sede en las distintas ciudades o regiones de cada plaza beisbolera o en redes sociales. Otro tema que también podría haber sido detonante es el que, habiéndose definido que como integrante de la Conferencia de Beisbol del Caribe, México (la Liga Arco) aprobó por mayoría no respaldar la reelección del comisionado Puello, siendo que pudieron más las presiones de algunos y no se operó el tema adecuadamente.Hay voces que hablan de que ya está tomada una decisión en cuanto a quién será la figura que llegue al relevo en la presidencia de la LMP y que solamente será cuestión de tiempo para que se lleve el ejercicio de la toma de posesión, pero igualmente hay trascendidos en el entendido de que aún se analizan entre tres y cuatro perfiles para revisar quién pudiera encabezar esto que es una presidencia ejecutiva, dado que existe un Presidente del Consejo de Administración que lo conforman los 10 dueños de los equipos correspondientes y que lo preside en este momento uno de ellos, que es Joaquín Vega, propietario de los Cañeros de Los Mochis.El perfil de quien será el sucesor se divide en dos sentidos; uno, que se procure un personaje con funciones de intermediario como el de Canizales, que es un presidente ejecutivo de nivel mediano, con cierta operatividad pero siempre bajo la égida del Consejo; o que se regrese al esquema anterior donde la presidencia recaía en una figura muy importante de mucho peso social y hasta político, que todos respetaran, como una especie del esquema que se maneja en Grandes Ligas con el Comisionado Rob Manfred.bambinazos61@gmail.com@salvadorcosio1
