Miércoles, 18 de Junio 2025

LO ÚLTIMO DE Ideas

Ideas |

Sheinbaum: temporada de patos

Por: Diego Petersen

Sheinbaum: temporada de patos

Sheinbaum: temporada de patos

No es lo duro, sino lo tupido. Hace rato que la Presidenta Claudia Sheinbaum no puede hablar de sus proyectos y su visión de país. Todos los días la agenda la pone otro: cuando no es el gobierno de Donald Trump es la maldita realidad. Como un boxeador vapuleado, si se protege el hígado le pegan en la cara; si se cubre el rostro viene el gancho a las partes blandas.

La seguridad y serenidad con la que manejaba la relación con el magnate bulero se perdió hace 15 días, después de la visita de la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, y de la llamada en la que el presidente Trump insinuó la posibilidad de que el Ejército estadounidense hiciera operaciones contra los cárteles en México. De entonces para acá ha sido una tormenta de eventos que la Presidenta no controla y, peor aún, de los que no tiene información.

Cuando se trata de persecución al crimen organizado, el discurso de defensa de la soberanía nacional suena más a complicidad que a patriotismo, y empeora cada vez que el gobierno vecino señala a uno de los grandes capos a los que resulta que en México ni se le investiga ni le persigue. Si bien es cierto que hay un cambio importante en la política de persecución del delito desde la llegada de García Harfuch a la Secretaría de Seguridad, también lo es que la Fiscalía General de la República no está investigando a los grandes capos ni mucho menos a los políticos que los protegen.

Para que una nueva política de seguridad sea visible y creíble, la Presidenta tiene que cambiar el discurso. El escueto punto nueve de su carta a los morenos en el que señalaba, cito textual: “No puede haber colusión con la delincuencia, ni organizada ni de cuello blanco”, resulta insuficiente si no se procesa a alguno de los miembros de Morena que están vinculados con el crimen organizado, esos que graznan como patos, caminan como patos y se juntan con patos, antes que el golpe llegue desde el Norte. Y seguramente tendría que procesar a algún otro pato de la oposición para que su partido no lo tome personal. No hay problema, le van a sobrar candidatos; es temporada de patos.

No se puede pacificar al país si no se limpia la imagen de la clase política. Nunca como ahora habíamos tenido tantos gobernadores bajo sospecha de colusión con el crimen organizado. Sentarse a esperar con qué sorpresa le sale el gobierno de Trump o los medios estadounidenses para luego reaccionar en la Mañanera ha sido el gran error del Gobierno de Sheinbaum en las últimas semanas. Necesita encontrar una nueva estrategia y también una nueva narrativa. Para ello tiene que salirse del mar, donde la seguidilla de olas apenas la dejan respirar, y darse tiempo para pensar, aunque se enojen en Palenque.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones