Tal vez se ha hecho una fiesta más folclórica, con un ensamble propio del sincretismo. Pero que ha dado vuelta al mundo la catrina, las calaveras de azúcar, la fiesta, el mariachi y los altares de muerto.Cómo quiera que sea, es nuestro sentido de la vida y de la muerte, recordamos a nuestros seres queridos que han partido ya. Es un bello momento para desearles la paz eterna y recordar lo mucho que nos dieron.Hay gran belleza en agradecer a nuestros ancestros lo mucho que hicieron para que nosotros estemos por aquí, viviendo esta maravillosa experiencia de vida.Muchos no saben la historia de sus antepasados, muchas veces ni de lo que hicieron sus abuelos y mucho menos los bisabuelos. Ya no digamos más lejos aún. Pero en el Día de Muertos, podemos hacer un poco de remembranza de esos estupendos ancestros, que gracias a su trabajo, esfuerzo y afecto nos dieron la oportunidad de vivir. Y eso amerita reconocerlo, indagando un poco más sobre el árbol genealógico de tus antepasados. Seguramente alguien de tu familia tiene más datos sobre ellos, que es importante rescatarlos, para también contarle a tus hijos algo de su historia.El Día de Muertos no sólo es el momento de la nostalgia y mucho menos el de revivir la tristeza de su muerte, sino en enfocarlo en la alegría del saber lo valioso del esfuerzo que realizaron.Es voltear al pasado con el propósito de saber más sobre ellos. ¿En dónde nacieron? Sus costumbres, entorno y tal vez misteriosas aventuras que padecieron para llegar hasta donde procrearon y le dieron vida a tu familia. ¿Cómo se conocieron y en dónde se casaron tus abuelos? ¿Qué profesiones o labores realizaban? ¿Qué estudios y logros o fracasos tuvieron? Todos unos temas de enorme riqueza para la cultura de tu familia y no quedarse nomás en los sentimientos y emociones que nos ha dejado su partida.El Día de Muertos es una oportunidad de recordar sus vidas y aplaudir lo que hicieron.
