La inédita epidemia de dengue que crece en el Área Metropolitana y tiene atemorizados a las y los habitantes de muchas colonias y varios municipios de la entidad, se convirtió ayer en una crisis que pasó del ámbito de la salud, no sin justificación, a la arena política.Ese escenario ya se veía venir por el crecimiento exponencial de los casos que empezaron en junio con 91, en julio con 169, en agosto con 651 y en lo que va de septiembre más de mil. Eso ha colocado a Jalisco al borde de la necesidad de declarar una alerta epidemiológica por estar ya en segundo lugar de incidencia con 3 mil 405 que tienen saturadas las clínicas.El germen de la irritación política inició con los reclamos de vecinos que aseguraban que no habían visto como otros años, a las brigadas de fumigadores y orientadores de la Secretaría de Salud en sus comunidades, luego esos reproches se escucharon por la saturación de pacientes en los hospitales, pasó a algunos cabildos como el de Tlaquepaque donde la oposición pidió la renuncia del titular de la Secretaría de Salud, Fernando Petersen, hasta que esa misma demanda llegó ayer al Congreso del Estado, donde la diputada de Morena, María Esther López, exigió su destitución por considerarlo “omiso y negligente” en la atención a la proliferación de los casos de dengue.Podría decirse, como salieron ayer a defender los diputados naranjas al funcionario estatal, que la bancada de Morena quiera sacar raja política de la situación, pero lo cierto es que al secretario de salud se le cuestionó desde antes su ausencia en la sesión del comité sanitario cuando los casos de dengue empezaban a escalar preocupantemente. Esa falta de liderazgo, sin duda, fue factor decisivo para que el tema del dengue le haya abierto un frente más de desgaste al gobierno del emecista Enrique Alfaro.Pero más allá de las disputas y los dimes y diretes de las clase política y gubernamental desatados por esta inocultable emergencia de salud pública, lo que sí urge es que las autoridades sanitarias además de redoblar sus acciones expliquen qué nos pasó con el dengue este año. ¿Por qué se nos dispararon al quintuple los casos en relación con el año pasado? ¿Qué factores influyeron? ¿Se incumplió o no con algún protocolo o procedimiento? ¿Faltó una campaña de comunicación oportuna para que la población tomará en sus casas las medidas preventivas para evitar la reproducción del mosco transmisor? ¿Se descuidaron los encharcamientos que quedaron en la ciudad por las severas inundaciones que se han registrado en el actual temporal de lluvias?Además de deslindar responsabilidades, responder a estas y muchas otras interrogantes será indispensable para revisar y tener claro qué nos pasó y evitar que nos vuelva a pasar. jbarrera4r@gmail.com
