En México, después de la pandemia, la esperanza de vida -según The World Factbook- es de 74.6 años estimados para 2024. En Japón, de acuerdo con Worldtrends, asciende a 85.27 años. Son casi 11 años adicionales para el japonés promedio. ¿Qué explica esta diferencia? ¿La alimentación? ¿El ejercicio? ¿El estilo de vida urbano? Probablemente una combinación de todos estos factores. Según datos del INEGI publicados en agosto de 2024, las cinco principales causas de muerte en México son: enfermedades del corazón, diabetes mellitus, tumores malignos, enfermedades del hígado y accidentes. ¿Son distintas estas causas en el resto del mundo? No demasiado. Las estadísticas internacionales señalan patrones similares, aunque con menor peso de enfermedades asociadas a la diabetes y a la obesidad extrema.En muchos países más desarrollados, aún sin seguir un régimen estricto de entrenamiento, la gente camina más: para usar el metro, tomar el autobús o simplemente resolver la rutina diaria. Esto se traduce en poblaciones que, aunque no están exentas de cáncer o infartos, llegan a la vejez con menos obesidad y menos diabetes. En consecuencia, acumulan más años de vida funcional.En México, muchas familias cambian sus hábitos alimenticios y adoptan rutinas de ejercicio solo después de enfrentar un problema serio de salud. Otras, por herencia cultural, integran el deporte como parte natural de sus rituales familiares.Y tú, ¿cuál es tu rutina de ejercicio? Si solo pudieras elegir uno de estos hábitos, ¿qué escogerías: moverte más o comer mejor? Lo cierto es que, a pesar de nuestros retos, México tiene comunidades deportivas vibrantes. En pádel, por ejemplo, existen más de 600 clubes y casi 2,500 canchas, un promedio ligeramente superior a cuatro por club. En el mundo del running, tan solo en 2019 se organizaron más de 2,000 carreras en el país.También está el cambio en los patrones de alimentación: según Statista, alrededor del 9% de los mexicanos se identifica como vegano, 19% como vegetariano y 30% como flexitariano, es decir, personas que reducen su consumo de productos de origen animal. En lo personal, hoy como distinto a como comía en mi adolescencia o durante mis años universitarios. Presto más atención a qué y cuánto consumo. Varias experiencias familiares me han recordado que el bienestar depende de nosotros, no de los demás. En un contexto donde nunca habíamos tenido tanta información disponible -pero también tanta desinformación circulando-, cultivar el discernimiento es esencial para tomar decisiones que favorezcan nuestra salud.En estas fiestas decembrinas deseo que disfruten, con plena conciencia, la alegría de estar bien y de compartir ese bienestar con quienes aman.La salud es resultado de decisiones cotidianas. Elegir correctamente es una pequeña evidencia de amor propio.Te invito a escuchar mi conversación con Hari Fafutis, a quien le diagnosticaron una hernia discal y que, años después, se convirtió en el coach fundador de un sistema de fuerza que ha rehabilitado a cientos de personas. Su historia inspira, reta creencias erróneas sobre el ejercicio y demuestra que nunca es tarde para construir un cuerpo fuerte.La entrevista ya está disponible en Spotify, Apple Podcasts y YouTube en LAMARCALAB Podcast.Y recuerda: si no escuchas, no vendes.emiliano@lamarcalab.com