Molestias como inflamación abdominal, cambios en el tránsito intestinal (ya sea diarrea o estreñimiento), dolor persistente o presencia de sangre en las evacuaciones suelen considerarse señales menores. En muchos casos, se vinculan con el síndrome de intestino irritable, una condición funcional del aparato digestivo.Algunos trastornos gastrointestinales presentan signos parecidos, lo que puede dificultar su identificación temprana. Tal es el caso del cáncer de colon, una enfermedad potencialmente mortal que, en sus etapas iniciales, puede manifestarse con síntomas casi idénticos a los del síndrome de intestino irritable (SII). Esta similitud puede llevar a diagnósticos erróneos o retrasos en la detección, lo que representa un riesgo importante para la salud del paciente.Tanto el síndrome de intestino irritable como el cáncer colorrectal pueden causar:Estas señales, aunque comunes y a veces consideradas menores, no deben ser ignoradas, especialmente si se presentan de forma continua o empeoran con el tiempo.A pesar de las similitudes, existen ciertos síntomas que, cuando aparecen junto a los anteriores o de forma aislada, requieren una evaluación más profunda, ya que pueden ser indicio de cáncer de colon. Estos incluyen:El síndrome de intestino irritable es una condición funcional del aparato digestivo que no causa daño estructural, pero puede alterar significativamente la calidad de vida del paciente. Suele diagnosticarse mediante la exclusión de otras enfermedades, lo que puede llevar a que, en algunos casos, se omitan pruebas más profundas si los síntomas parecen “comunes”.El cáncer de colon, en cambio, es una enfermedad progresiva que muchas veces se desarrolla sin presentar molestias evidentes en sus primeras fases. Por ello, cuando los síntomas finalmente aparecen, ya puede encontrarse en una etapa más avanzada.Especialistas en salud digestiva recomiendan acudir a consulta médica si los síntomas se mantienen durante más de dos o tres semanas sin mejora, o si los tratamientos tradicionales para el colon irritable no surten efecto. La insistencia en estudios complementarios como la colonoscopía puede ser clave para un diagnóstico precoz.Este procedimiento permite visualizar directamente el interior del colon y detectar pólipos o lesiones sospechosas que podrían transformarse en cáncer si no se tratan a tiempo. La detección temprana aumenta significativamente las posibilidades de un tratamiento exitoso.El riesgo de desarrollar cáncer de colon puede incrementarse con factores como:Aunque el cáncer de colon y el síndrome de intestino irritable pueden parecer similares en sus manifestaciones, es crucial prestar atención a los síntomas persistentes o inusuales. Ante cualquier duda, buscar una segunda opinión médica y realizar estudios especializados puede marcar la diferencia entre un tratamiento temprano y un diagnóstico tardío. En temas de salud intestinal, la prevención y la atención oportuna son fundamentales.No normalices síntomas que no desaparecen con el tiempo. Si los malestares persisten y los tratamientos habituales no dan resultados, es fundamental solicitar estudios más específicos y no conformarse con un diagnóstico inicial.“Si llevas semanas o meses con síntomas digestivos, y los tratamientos no funcionan, pide estudios. No todo es colon irritable. El cáncer colorrectal puede parecer algo cotidiano, pero es silencioso y letal si no se detecta a tiempo”, concluyó el especialista.BB