El coordinador general de Comunicación Social de la Presidencia, Eduardo Sánchez, aseguró que la firma del Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CP-TPP por sus siglas en inglés), y la renegociación del Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México (TLCUEM) "inauguran para nuestro país una nueva era en la creación de empleos productivos y de atracción de inversión". En conferencia conjunta con el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, el funcionario federal destacó que el CP-TPP abre nuevas oportunidades de proveeduría y mercado para el sector productivo mexicano en Asia-Pacífico, una de las regiones de mayor dinamismo económico del mundo. El también vocero del Gobierno de la República explicó que México ganó acceso a los mercados de Australia, Brunei Darussalam, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur y Vietnam. El país se consolida en espacios económicos en los que ya tenía presencia como el de Canadá, Chile y Perú y profundiza el acceso al mercado de Japón, añadió en un comunicado de la Presidencia de la República. También, 90 por ciento de los productos mexicanos tendrán acceso inmediato, es decir, sin pago de aranceles, a los mercados de los 10 países socios, "con lo que, por ejemplo, los productores de huevo de Jalisco o de naranja de Veracruz podrán comerciar sus mercancías en la que ha sido definida como una de las áreas de libre comercio más grandes del mundo". Con la aprobación del Senado de la República del CP-TPP, el 24 de abril pasado México se convirtió en el primero de los 11 países integrantes de ese acuerdo en ratificarlo. Sánchez Hernández indicó que una vez que dicho acuerdo entre en operación, el país contará con 13 tratados de libre comercio con 52 naciones del mundo. "Con el CP-TPP se crea el tercer bloque comercial más importante del orbe. Éste es un mercado de 500 millones de consumidores que representa más de 13 por ciento del Producto Interno Bruto del mundo", detalló. De acuerdo con información de la Presidencia de la República sobre la entrada en vigor del TLCUEM, en julio de 2000, el primero de libre comercio entre Europa y un país del continente americano, ha favorecido el crecimiento de los flujos de comercio e inversión entre México y la Unión Europea. Luego de un arduo proceso de negociación que inició en 2016, el 21 de abril pasado, el equipo de negociación mexicano concluyó un acuerdo en principio con sus homólogos de esa región para la modernización del referido acuerdo. La renovación de ese tratado potenciará las visibles ventajas que ha tenido este instrumento desde su puesta en marcha en el año 2000; incorpora nuevas disposiciones sobre sectores modernizados por las reformas estructurales, como el de las telecomunicaciones o el financiero, así como sobre mercados que no existían en el acuerdo original. Con el acuerdo en principio, se incrementará el número de productos que se pueden comerciar libremente, especialmente en materia agroalimentaria; se protegerán las marcas y las denominaciones de origen de gran variedad de productos. También se modernizan dos capítulos que dan cuenta de la realidad económica mundial actual: uno sobre pequeñas y medianas empresas, y el otro sobre desarrollo sostenible. JA
