La ciudad de Guadalajara tiene ese “algo” que enamora y que la vuelve entrañable para quienes la descubren por primera vez. Calles, plazas, avenidas y edificios que guardan su historia, tal como sucede en el barrio de las Nueve esquinas.Este céntrico rincón de la Perla Tapatía te cautivará gracias a su combinación de sabores, sonidos y colorido.Para llegar a este punto, puedes hacerlo usando el sistema MiBici, en la estación ubicada en la calle Pedro Rioseco. Al bajar, prepárate para una experiencia única: justo ahí se encuentra el Parque de las Pitayas, sede de la colorida Feria de la Pitaya, un evento que solo ocurre una vez al año y ¡está a punto de terminar! Además de disfrutar esta fruta, encontrarás mermeladas y nieves hasta productos artesanales elaborados con ella. Para enfrentar el calor, nada mejor que una nieve en la paletería “La Flor de Michoacán”. Si tienes ánimo de comer bien, nada como una buena birria de Las 9 Esquinas (Colón 384, esquina Galeana), cuya fachada y aromas atraen a los paseantes.El barrio de las Nueve esquinas es sabor, pero también bohemia. Un punto que se ha convertido en “básico” para aquellos que buscan la plática, la botana y la cerveza es la famosa cantina de La Occidental (Nueva Galicia 911). Lugar ideal para terminar con la sed y que es conocida por las ricas botanas gratuitas.Habiendo cumplido con el recorrido gastronómico, ahora puedes hacer uno cultural pues en esa zona podrás encontrar el “Puente de las Damas” una construcción de finales del siglo XIX y que quedó enterrado como testigo de la historia y evolución de la ciudad. La entrada es gratuita, ubicada en la calle Colón y podrás acceder de martes a domingo. CT