México
Mamá de Paulette, la principal sospechosa del crimen
El cuerpo de la menor fue encontrado la madrugada de ayer debajo del colchón de su cama
TOLUCA, MÉXICO- Lisette Farah, madre de la menor de cuatro años Paulette Gebara Farah, quien desapareció de su hogar el pasado 22 de marzo y en la madrugada de este miércoles fue encontrada sin vida debajo del colchón de su cama, seguirá arraigada pero en calidad de sospechosa-indiciada por homicidio, precisó Alberto Bazbaz, procurador de Justicia mexiquense.
En rueda de prensa, el funcionario dijo que la dependencia a su cargo no ha podido determinar la hora ni el día en que murió la niña, pero dijo tener elementos suficientes para poder determinar que Farah es indiciada —sospechosa— por el homicidio de su hija. “En este momento podemos darle, sin duda, el carácter de indiciada en la investigación a Lisette”, precisó Bazbaz Sacal, en lo que califico como un caso “atípico”.
El funcionario mostró videos y grabaciones en los cuales se escucha a la mujer sosteniendo un diálogo con su hija mayor, del mismo nombre Lisette, a quien le precisa que no debe seguir preguntando porque “a como están las cosas, se puede interpretar a que tú la echaste fuera”, y concluye diciendo “si no hay evidencia, no hay nada”.
Al respecto, la especialista en sicología Sandra Yadeum Angulo, quien colabora en las investigaciones de la Procuraduría estatal para dar con el o los responsables del homicidio, precisó que probablemente Lisette tiene un trastorno de personalidad, que para el caso se convierte en una fuerte línea de investigación.
“Sí tiene características de personalidad que sorprenden, y por eso es una línea de investigación que estamos fortaleciendo. Estamos frente a una abogada, inteligente, audaz, astuta, fría, siempre se ha mantenido muy distante de la parte afectiva, sin apego (familiar), que ha mentido. Son características que hablan de un trastorno”, comentó la experta.
Aunque dicha conducta y personalidad de la abogada y madre de la menor no implica que necesariamente una persona como ella pudiera haber incurrido “en una violación a la ley” como es un asesinato, subrayó Yadeum Angulo.
Respecto al padre, Mauricio Gebara, y sus niñeras, las hermanas Éricka y Martha Casimiro, también arraigadas en un hotel de Toluca, Bazbaz precisó que hasta el momento su estatus jurídico no ha cambiado: siguen con el arraigo.
No revisaron bajo la cama
El procurador reconoció que al inició de las investigaciones —es decir, durante los primeros cinco días posteriores a la desaparición de la menor—, los 100 agentes judiciales y 40 peritos de la Procuraduría, quienes recabaron 30 declaraciones y participaron en tres inspecciones realizadas en el hogar de la familia Gebara Farah, no tuvieron indicios que apuntaran a que la menor probablemente siempre estuvo en la casa.
El pasado martes 30 de marzo en la habitación se pudo percibir un olor a putrefacción, y fue así como horas más tarde, en la madrugada del miércoles 31, se localizó el cuerpo de Paulette.
El procurador detalló que el cadáver de la niña, quien tenía discapacidad motriz y verbal, fue hallado entre el tambor y colchón “con poca posibilidad de respiración, al estar de alguna forma muy cercana a la parte lateral del mismo colchón. Por otro lado, tenía oclusión, me comentan los peritos, en las áreas por donde ingresa el oxígeno y eso con el paso del tiempo, de alguna forma la fue cansando y le fue generando la menor posibilidad de recibir oxigeno”, dijo.
Reconoció que aunque él estuvo en la habitación, no pudo percatarse de su presencia pues nunca levantó el colchón.
Cabos sueltos
Lo que sigue
La procuraduría General de Justicia del Estado de México aún tiene varias cosas por aclarar en torno a la muerte de Paulette:
El cuerpo. No hubo una explicación clara sobre cómo fue que durante más de una semana de investigaciones nadie haya encontrado el cuerpo en la cama de la niña. No se descarta que haya sido movido durante este periodo, aunque las autoridades siguen investigando este tema.
La hora de la muerte. La necropsia practicada a Paulette dará una idea de cuándo exactamente fue que murió, lo que ayudará a las autoridades a determinar si se trató de un homicidio, y entonces así determinar a el o los responsables.
La situación jurídica. Según el procurador Alberto Bazbaz, tanto los papás de Paulette como las dos niñeras siguen en calidad de arraigados, y la mamá como indiciada, aunque aún se recaban pruebas para determinar si solicitan alguna orden de aprehensión.
La grabación. El procurador de Justicia mexiquense, Alberto Bazbaz, dio a conocer ayer la conversación de Lisette Farah con su otra hija, de siete años. En conferencia de prensa el funcionario aseguró que fue un micrófono que portaba una tercera persona, pero no aclaró quién fue.
Un caso atípico
Domingo 21
Según el papá de Paulette, Mauricio Gebara, entregó a la menor en el “lobby” del edificio en Huixquilucan a Lisette Farah, su madre, luego de un viaje a Valle de Bravo. En diversas entrevistas, Lisette asegura que esa noche acostó a la niña en su cama.
Lunes 22
La mamá de Paulette asegura que es en la mañana cuando se dio cuenta de la desaparición de la menor; se da aviso a las autoridades e inician la búsqueda de la niña.
Jueves 25
El caso de la desaparición de Paulette se da a conocer públicamente. En las redes sociales de internet se organizan grupos para su búsqueda, y comienzan a instalarse carteles y anuncios espectaculares con la imagen de la pequeña.
Domingo 28
El procurador mexiquense Alberto Bazbaz descarta que se trate de un secuestro debido a que no hay petición de rescate ni signos de allanamiento en el departamento de loa familia Gebara Farra.
Lunes 30
Se solicita el arraigo de los papás de Paulette, así como de las niñeras Éricka y Martha Casimiro, debido a las contradicciones en que cayeron en sus declaraciones en torno a la desaparición de Paulette.
En rueda de prensa, el funcionario dijo que la dependencia a su cargo no ha podido determinar la hora ni el día en que murió la niña, pero dijo tener elementos suficientes para poder determinar que Farah es indiciada —sospechosa— por el homicidio de su hija. “En este momento podemos darle, sin duda, el carácter de indiciada en la investigación a Lisette”, precisó Bazbaz Sacal, en lo que califico como un caso “atípico”.
El funcionario mostró videos y grabaciones en los cuales se escucha a la mujer sosteniendo un diálogo con su hija mayor, del mismo nombre Lisette, a quien le precisa que no debe seguir preguntando porque “a como están las cosas, se puede interpretar a que tú la echaste fuera”, y concluye diciendo “si no hay evidencia, no hay nada”.
Al respecto, la especialista en sicología Sandra Yadeum Angulo, quien colabora en las investigaciones de la Procuraduría estatal para dar con el o los responsables del homicidio, precisó que probablemente Lisette tiene un trastorno de personalidad, que para el caso se convierte en una fuerte línea de investigación.
“Sí tiene características de personalidad que sorprenden, y por eso es una línea de investigación que estamos fortaleciendo. Estamos frente a una abogada, inteligente, audaz, astuta, fría, siempre se ha mantenido muy distante de la parte afectiva, sin apego (familiar), que ha mentido. Son características que hablan de un trastorno”, comentó la experta.
Aunque dicha conducta y personalidad de la abogada y madre de la menor no implica que necesariamente una persona como ella pudiera haber incurrido “en una violación a la ley” como es un asesinato, subrayó Yadeum Angulo.
Respecto al padre, Mauricio Gebara, y sus niñeras, las hermanas Éricka y Martha Casimiro, también arraigadas en un hotel de Toluca, Bazbaz precisó que hasta el momento su estatus jurídico no ha cambiado: siguen con el arraigo.
No revisaron bajo la cama
El procurador reconoció que al inició de las investigaciones —es decir, durante los primeros cinco días posteriores a la desaparición de la menor—, los 100 agentes judiciales y 40 peritos de la Procuraduría, quienes recabaron 30 declaraciones y participaron en tres inspecciones realizadas en el hogar de la familia Gebara Farah, no tuvieron indicios que apuntaran a que la menor probablemente siempre estuvo en la casa.
El pasado martes 30 de marzo en la habitación se pudo percibir un olor a putrefacción, y fue así como horas más tarde, en la madrugada del miércoles 31, se localizó el cuerpo de Paulette.
El procurador detalló que el cadáver de la niña, quien tenía discapacidad motriz y verbal, fue hallado entre el tambor y colchón “con poca posibilidad de respiración, al estar de alguna forma muy cercana a la parte lateral del mismo colchón. Por otro lado, tenía oclusión, me comentan los peritos, en las áreas por donde ingresa el oxígeno y eso con el paso del tiempo, de alguna forma la fue cansando y le fue generando la menor posibilidad de recibir oxigeno”, dijo.
Reconoció que aunque él estuvo en la habitación, no pudo percatarse de su presencia pues nunca levantó el colchón.
Cabos sueltos
Lo que sigue
La procuraduría General de Justicia del Estado de México aún tiene varias cosas por aclarar en torno a la muerte de Paulette:
El cuerpo. No hubo una explicación clara sobre cómo fue que durante más de una semana de investigaciones nadie haya encontrado el cuerpo en la cama de la niña. No se descarta que haya sido movido durante este periodo, aunque las autoridades siguen investigando este tema.
La hora de la muerte. La necropsia practicada a Paulette dará una idea de cuándo exactamente fue que murió, lo que ayudará a las autoridades a determinar si se trató de un homicidio, y entonces así determinar a el o los responsables.
La situación jurídica. Según el procurador Alberto Bazbaz, tanto los papás de Paulette como las dos niñeras siguen en calidad de arraigados, y la mamá como indiciada, aunque aún se recaban pruebas para determinar si solicitan alguna orden de aprehensión.
La grabación. El procurador de Justicia mexiquense, Alberto Bazbaz, dio a conocer ayer la conversación de Lisette Farah con su otra hija, de siete años. En conferencia de prensa el funcionario aseguró que fue un micrófono que portaba una tercera persona, pero no aclaró quién fue.
Un caso atípico
Domingo 21
Según el papá de Paulette, Mauricio Gebara, entregó a la menor en el “lobby” del edificio en Huixquilucan a Lisette Farah, su madre, luego de un viaje a Valle de Bravo. En diversas entrevistas, Lisette asegura que esa noche acostó a la niña en su cama.
Lunes 22
La mamá de Paulette asegura que es en la mañana cuando se dio cuenta de la desaparición de la menor; se da aviso a las autoridades e inician la búsqueda de la niña.
Jueves 25
El caso de la desaparición de Paulette se da a conocer públicamente. En las redes sociales de internet se organizan grupos para su búsqueda, y comienzan a instalarse carteles y anuncios espectaculares con la imagen de la pequeña.
Domingo 28
El procurador mexiquense Alberto Bazbaz descarta que se trate de un secuestro debido a que no hay petición de rescate ni signos de allanamiento en el departamento de loa familia Gebara Farra.
Lunes 30
Se solicita el arraigo de los papás de Paulette, así como de las niñeras Éricka y Martha Casimiro, debido a las contradicciones en que cayeron en sus declaraciones en torno a la desaparición de Paulette.