México

El Gobierno está relacionado con el narco: Ferriz de Con

Los virtuales precandidatos independientes al Gobierno de la República debaten los problemas del país en Emprendiendo Jóvenes

ZAPOPAN, JALISCO (19/MAYO/2016).- "Pienso que el narcotráfico está ligado con los gobiernos, de hecho, hemos tenido narco gobiernos y no podemos entender cómo el narco puede permanecer con la complacencia y aparentemente lucha en contra del Gobierno. No nos hagamos tontos, el Gobierno en México está involucrado, y para romper con esa cadena, lo que tendríamos que hacer es orillar al gobierno a que rompa de tajo la relación".
 
Estas son las palabras con las que Pedro Ferriz de Con, comunicador y virtual precandidato presidencial por la vía independiente, lanzó en el foro político de Emprendiendo jóvenes, evento que se desarrolla en el Palacio de la Cultura y la Comunicación.
 
A sabiendas de que "mis declaraciones son fuertes", pidió hacer una propuesta seria y completa en torno a la legalización de la mariguana en toda su cadena, que incluya la producción, distribución y tratamiento de los adictos.
 
En el evento, otro de los virtuales precandidatos independientes al primer puesto del Estado, Jorge Castañeda, secundó el llamado y dijo que la política prohibicionista y de guerra contra las drogas ha ocasionado muerte y destrucción de civiles.

 
Ser político profesional, lo peor que pueden hacer
 
Tanto Pedro Ferriz de Con como Jorge Castañeda coincidieron en no recomendarle a los jóvenes que se involucren en la política de manera profesional. Y con lo que desistieron de los alcaldes de Zapopan y Morelia, Pablo Lemus y Alfonso Martínez, respectivamente.
 
"He sido político activo cinco de 63 años, lo peor es que le puede pasar alguien es que llegues a ser político profesional. ¿Que son indispensables? Bueno, los  dentistas también lo son. Mi recomendación es que no sean dentistas ni sean políticos profesionales", dijo el ex canciller.
 
Mientras que el comunicador sentenció con una recomendación: "vean lo que sale en la tele, y si les da asco, dedíquense a otra cosa".
 
Por su parte, Lemus Navarro señaló que su paso de la iniciativa privada a la comunicación y ahora al servicio público ha sido una etapa que lo hace feliz, porque con sus decisiones puede ayudar a las persona que más lo necesitan.
 

Tengan un objetivo y vayan por él: Arroyo
 
Minutos antes de iniciar el panel de contenido político, el empresario premiado como el mejor del sector de las telecomunicaciones en 2013, Manuel Arroyo, ofreció una charla para hablar de su experiencia y de cómo, sin tener un peso, pudo llegar a acumular un millón de dólares a los 18 años.
 
La historia es la siguiente: el joven de 15 años se quedó sin casa porque su madre lo corrió del departamento por haberse ido de parranda a Acapulco. Cuando llegó tuvo que pagar una motocicleta que le habían roto y tenía pocas opciones. Fue entonces que entró a una agencia para repartir síntesis informativas en oficinas de gobierno.
 
Con el tiempo, se hizo socio de las secretarias de las oficinas para que ellas vendieran bisutería, mientras él trataba de emprender un negocio de comida. Al poco tiempo, se dio cuenta que una antena parabólica de la que se quiso deshacer, le generaría el negocio de su vida.
 
Se dedicó a conectar. Conectó con los expertos y con los clientes, y siendo él el intermediario, logró vender hardware para equipar canales de televisión. A principios de la década, ya era socio de los principales canales de televisión en México y Centroamérica. Y se asoció con Slim y compañías brasileñas para entrar en el sector de la televisión de paga.
 
Hoy tiene un periódico, el Financiero, y le renta espacios de producción a televisoras transnacionales mientras trata de meterse un poco más en el contenido de los medios de comunicación.
 
"Si ustedes se proponen un sueño, es una realidad, me encanta que pueda yo ayudar a que se inspiren que vean que se puede hacer de la nada algo muy importante. Innovar es el mayor reto para un joven que quiere emprender, hay que estar pensando un paso adelante".
 
EL INFORMADOR/ OMAR GARCÍA

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