Jalisco
Faltan recursos para combatir invasiones en Chapala, opina experto
Es el principal problema de la Conagua para hacer frente a las edificaciones irregulares en los límites naturales del lago
GUADALAJARA, JALISCO (07/MAY/2013).- La problemática de los rellenos y construcciones ilegales en los límites naturales del Lago de Chapala deviene principalmente de la falta de recursos para implementar acciones en contra de estas acciones, opinó el abogado y vecino del municipio de Chapala, Juan Enrigue Zuloaga.
“El problema está dentro de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), pues aunque existen instrumentos para combatir estas situaciones irregulares, el organismo no cuenta con el personal ni los recursos necesarios para implementar las acciones necesarias”.
En los últimos seis años, la Conagua ha detectado casi 100 rellenos irregulares con tierra y escombro en los límites naturales del vaso lacustre. Aunque la dependencia aseguró que ha levantado actas durante las visitas de inspección, se reserva los datos acerca de las sanciones emprendidas en contra de estos actos.
Las ocupaciones que reporta el Organismo de Cuenca Lerma-Santiago-Pacífico de Conagua están en Jalisco. Información concedida por la Unidad de Transparencia de esa dependencia detalla que “en ejercicio de sus atribuciones (...) han realizado diversas visitas de inspección (145 en seis años) a usuarios que se encuentran ocupando terrenos del Lago de Chapala, a las que se ha instaurado el procedimiento administrativo correspondiente”. Hay pocos detalles con respecto a las consecuencias que genera ese “procedimiento administrativo correspondiente”, o cuántas construcciones han sido demolidas, de tal forma que se abone un poco a la restauración natural del lago.
“Es llamativo que las oficinas de la Conagua, en San Juan Cosalá, están en medio de los restaurantes que hay en Piedra Barrenada. No pueden controlar ni a sus vecinos y están junto con ellos”, señaló Enrigue Zuloaga, y agregó: “Eso deja al lago en una posición para defenderse solo. Si sube el nivel, es la forma perfecta para defenderse”.
El experto en leyes comentó que los comerciantes y empresarios que tienen restaurantes en Piedra Barrenada construyeron un segundo piso a sus negocios como prevención en caso de que el vaso lacustre reclame su espacio. “Sabían que cuando el agua comience a subir se iba a inundar. No necesariamente el lago debe estar rodeado de una playa”.
Por lo pronto no se avista solución legal para las invasiones en los límites naturales del Lago de Chapala. Enrigue Zuloaga mencionó que “se podría disponer de los recursos que provengan de las multas para implementar acciones en fomento del terreno que deja el lago. El problema es que las multas no le reditúan a la Conagua y no tienen recursos para utilizarlos en defensa del propio vaso”.
SEGUNDO
Municipios nocivos
El municipio de Chapala es el segundo con más irregularidades detectadas (27); le siguen Poncitlán (12), Ocotlán (siete), Jamay (seis) y Tuxcueca, con cinco. Tizapán el Alto es la única localidad que no registra invasiones (periodo 2008-2013).
“El problema está dentro de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), pues aunque existen instrumentos para combatir estas situaciones irregulares, el organismo no cuenta con el personal ni los recursos necesarios para implementar las acciones necesarias”.
En los últimos seis años, la Conagua ha detectado casi 100 rellenos irregulares con tierra y escombro en los límites naturales del vaso lacustre. Aunque la dependencia aseguró que ha levantado actas durante las visitas de inspección, se reserva los datos acerca de las sanciones emprendidas en contra de estos actos.
Las ocupaciones que reporta el Organismo de Cuenca Lerma-Santiago-Pacífico de Conagua están en Jalisco. Información concedida por la Unidad de Transparencia de esa dependencia detalla que “en ejercicio de sus atribuciones (...) han realizado diversas visitas de inspección (145 en seis años) a usuarios que se encuentran ocupando terrenos del Lago de Chapala, a las que se ha instaurado el procedimiento administrativo correspondiente”. Hay pocos detalles con respecto a las consecuencias que genera ese “procedimiento administrativo correspondiente”, o cuántas construcciones han sido demolidas, de tal forma que se abone un poco a la restauración natural del lago.
“Es llamativo que las oficinas de la Conagua, en San Juan Cosalá, están en medio de los restaurantes que hay en Piedra Barrenada. No pueden controlar ni a sus vecinos y están junto con ellos”, señaló Enrigue Zuloaga, y agregó: “Eso deja al lago en una posición para defenderse solo. Si sube el nivel, es la forma perfecta para defenderse”.
El experto en leyes comentó que los comerciantes y empresarios que tienen restaurantes en Piedra Barrenada construyeron un segundo piso a sus negocios como prevención en caso de que el vaso lacustre reclame su espacio. “Sabían que cuando el agua comience a subir se iba a inundar. No necesariamente el lago debe estar rodeado de una playa”.
Por lo pronto no se avista solución legal para las invasiones en los límites naturales del Lago de Chapala. Enrigue Zuloaga mencionó que “se podría disponer de los recursos que provengan de las multas para implementar acciones en fomento del terreno que deja el lago. El problema es que las multas no le reditúan a la Conagua y no tienen recursos para utilizarlos en defensa del propio vaso”.
SEGUNDO
Municipios nocivos
El municipio de Chapala es el segundo con más irregularidades detectadas (27); le siguen Poncitlán (12), Ocotlán (siete), Jamay (seis) y Tuxcueca, con cinco. Tizapán el Alto es la única localidad que no registra invasiones (periodo 2008-2013).