Jalisco
Dan más de 40 años de prisión a par de secuestradores
La PGJE informó sobre la sentencia condenatoria en contra de María Verónica Delgado Poveda, de 42 años de edad y Humberto Benavides Perales, de 19 años
GUADALAJARA, JALISCO (13/ABR/2011).- Un par de secuestradores fueron sentenciados a más de 40 años de prisión debido a que fueron encontrados culpables por el delito en mención, además dieron muerte a su víctima, quien se dedicaba al negocio de bienes raíces.
La Procuraduría General de Justicia del Estado ( PGJE) informó sobre la sentencia condenatoria en contra de María Verónica Delgado Poveda, de 42 años de edad, originaria de la ciudad de Monterrey, y Humberto Benavides Perales, de 19 años, vecino del municipio de San Fernando, en el fronterizo Estado de Tamaulipas, quienes fueron condenados a 40 años ocho meses de cárcel por los delitos de secuestro agravado y delincuencia organizada, pero también, ellos dieron muerte a la víctima de nombre Milagros Magdaleno Robles, en hechos ocurridos en el mes de mayo de 2009.
La víctima de 38 años de edad, quien residía en el fraccionamiento Monraz, fue hallada muerta la mañana del 13 de mayo de 2009, a un costado de la carretera a Morelia, a la altura del kilómetro 12.5, con huellas de asfixia por estrangulación indirecta.
De acuerdo con las actuaciones de la fiscalía estatal, la víctima salió de su vivienda el 11 de mayo de 2009, para mostrar una finca que tenía en venta y ya no regresó, por lo que sus familiares reportaron su desaparición; posteriormente recibieron una llamada en la que se pedía dinero a cambio de su libertad.
Los plagiarios le informaron a la familia de la mujer que se comunicarían el 13 de mayo para seguir con la negociación, pero ese día, ella fue encontrada amordazada y sin vida.
La PGJE iniciaba las indagatorias sobre el caso, las cuales continuaron y llevaron a la captura de las dos personas sentenciadas.
Su aprehensión se concretó en junio del 2009, en la localidad de San José Ixtapa, en el municipio de Zihuatanejo, en un operativo conjunto entre las procuradurías de Jalisco y del Estado de Guerrero.
El par de delincuentes reconocieron plenamente su participación y delataron a otro individuo de nombre Miguel Ángel Delgado Poveda quien también utiliza los nombres de Luis Carlos Benavides Garza, Luis Carlos Treviño González y Francisco López López como cómplice, por lo que éste aún se encuentra prófugo de la justicia jalisciense.
Dicho sujeto tiene antecedentes penales y ya era requerido por las autoridades del Estado de Nuevo León, por un fraude en agravio de una institución financiara.
La fiscalía estatal explicó que durante las indagatorias María Verónica y Humberto manifestaron que buscaban cometer un fraude inmobiliario en relación con la casa que la familia de la víctima anunciaba en venta en la calle Santo Tomás, en la colonia Jardines de Guadalupe, en Zapopan.
Agregaron los delincuentes que tuvieron algunas citas con la señora Magdaleno Robles para hacerle creer que comprarían la finca, pero lo que en realidad planeaban era obtener copias de las escrituras del inmueble y de la identificación de la propietaria para hacer una suplantación de persona y obtener un crédito hipotecario de un banco.
Señalaron que debido a que se dieron cuenta de que la casa en venta tenía un gravamen, entonces decidieron secuestrar a la dama para pedir un rescate a cambio de su libertad.
Narraron que se llevaron a la mujer a una finca que habían rentado en la calle Iturbide, de la colonia Agua Blanca, en Zapopan, la que habilitaron como oficina para los fraudes hipotecarios que planeaban cometer; posteriormente a un hotel de la carretera a Morelia.
Los asesinos dijeron en sus declaraciones que tras algunas llamadas a la familia exigiendo tres millones de pesos como rescate, decidieron dejar a la ofendida en libertad, pues Miguel Ángel se encontraba sumamente nervioso ya que él antes no había cometido secuestros y temía que posteriormente fueran reconocidos y capturados. Sin embargo, la mañana del 13 de mayo del 2009, llevaron a la señora a la carretera a Morelia para liberarla, pero luego optaron por privarla de la vida a bordo del vehículo en el que viajaban, ante el nerviosismo de Miguel Ángel y para no dejar evidencias.
La PGJE consignó el caso aportando las suficientes pruebas acusatorias contra los antes señalados, por lo que al revisarlas, el juez que conoció del proceso, los declaró culpables y les condenó a 40 años ocho meses de prisión, así como al pago de 387 mil 519 pesos, por concepto de multa y reparación del daño.
EL INFORMADOR / OMAR RUVALCABA
La Procuraduría General de Justicia del Estado ( PGJE) informó sobre la sentencia condenatoria en contra de María Verónica Delgado Poveda, de 42 años de edad, originaria de la ciudad de Monterrey, y Humberto Benavides Perales, de 19 años, vecino del municipio de San Fernando, en el fronterizo Estado de Tamaulipas, quienes fueron condenados a 40 años ocho meses de cárcel por los delitos de secuestro agravado y delincuencia organizada, pero también, ellos dieron muerte a la víctima de nombre Milagros Magdaleno Robles, en hechos ocurridos en el mes de mayo de 2009.
La víctima de 38 años de edad, quien residía en el fraccionamiento Monraz, fue hallada muerta la mañana del 13 de mayo de 2009, a un costado de la carretera a Morelia, a la altura del kilómetro 12.5, con huellas de asfixia por estrangulación indirecta.
De acuerdo con las actuaciones de la fiscalía estatal, la víctima salió de su vivienda el 11 de mayo de 2009, para mostrar una finca que tenía en venta y ya no regresó, por lo que sus familiares reportaron su desaparición; posteriormente recibieron una llamada en la que se pedía dinero a cambio de su libertad.
Los plagiarios le informaron a la familia de la mujer que se comunicarían el 13 de mayo para seguir con la negociación, pero ese día, ella fue encontrada amordazada y sin vida.
La PGJE iniciaba las indagatorias sobre el caso, las cuales continuaron y llevaron a la captura de las dos personas sentenciadas.
Su aprehensión se concretó en junio del 2009, en la localidad de San José Ixtapa, en el municipio de Zihuatanejo, en un operativo conjunto entre las procuradurías de Jalisco y del Estado de Guerrero.
El par de delincuentes reconocieron plenamente su participación y delataron a otro individuo de nombre Miguel Ángel Delgado Poveda quien también utiliza los nombres de Luis Carlos Benavides Garza, Luis Carlos Treviño González y Francisco López López como cómplice, por lo que éste aún se encuentra prófugo de la justicia jalisciense.
Dicho sujeto tiene antecedentes penales y ya era requerido por las autoridades del Estado de Nuevo León, por un fraude en agravio de una institución financiara.
La fiscalía estatal explicó que durante las indagatorias María Verónica y Humberto manifestaron que buscaban cometer un fraude inmobiliario en relación con la casa que la familia de la víctima anunciaba en venta en la calle Santo Tomás, en la colonia Jardines de Guadalupe, en Zapopan.
Agregaron los delincuentes que tuvieron algunas citas con la señora Magdaleno Robles para hacerle creer que comprarían la finca, pero lo que en realidad planeaban era obtener copias de las escrituras del inmueble y de la identificación de la propietaria para hacer una suplantación de persona y obtener un crédito hipotecario de un banco.
Señalaron que debido a que se dieron cuenta de que la casa en venta tenía un gravamen, entonces decidieron secuestrar a la dama para pedir un rescate a cambio de su libertad.
Narraron que se llevaron a la mujer a una finca que habían rentado en la calle Iturbide, de la colonia Agua Blanca, en Zapopan, la que habilitaron como oficina para los fraudes hipotecarios que planeaban cometer; posteriormente a un hotel de la carretera a Morelia.
Los asesinos dijeron en sus declaraciones que tras algunas llamadas a la familia exigiendo tres millones de pesos como rescate, decidieron dejar a la ofendida en libertad, pues Miguel Ángel se encontraba sumamente nervioso ya que él antes no había cometido secuestros y temía que posteriormente fueran reconocidos y capturados. Sin embargo, la mañana del 13 de mayo del 2009, llevaron a la señora a la carretera a Morelia para liberarla, pero luego optaron por privarla de la vida a bordo del vehículo en el que viajaban, ante el nerviosismo de Miguel Ángel y para no dejar evidencias.
La PGJE consignó el caso aportando las suficientes pruebas acusatorias contra los antes señalados, por lo que al revisarlas, el juez que conoció del proceso, los declaró culpables y les condenó a 40 años ocho meses de prisión, así como al pago de 387 mil 519 pesos, por concepto de multa y reparación del daño.
EL INFORMADOR / OMAR RUVALCABA