Jalisco
Accidentes de camiones son de mayor impacto; hay subregistro
Víctimas de Violencia Vial se basa en la cantidad de pasajeros que transportan
GUADALAJARA, JALISCO (14/ABR/2015).- En los accidentes del transporte público existe un subregistro, por lo cual las estadísticas no muestran en realidad los percances en los que intervienen camiones urbanos, señaló la presidenta de Víctimas de Violencia Vial, Alma Chávez Guth.
“Se da mucho. Las mutualidades trabajan de una forma impresionantemente rápida para que no impacte la estadística negra en su contra. Viene la mutualidad rápidamente, asume los gastos del auto que chocó y vámonos, vámonos. Como con mucha prisa para que ni siquiera llegue la autoridad de Movilidad y reporte el accidente”.
Chávez Guth reconoció que los transportistas tienen razón al defender que no todos los accidentes son su responsabilidad, aunque pidió a los camioneros no escudarse en el argumento de que del total de percances que registrados en la metrópoli, los del transporte público no son los más significativos, sino que la mayoría corresponde a autos particulares.
Manifestó que el impacto de un siniestro en el que participa una unidad del servicio urbano, es ampliamente mayor que el de un auto particular, por la gran cantidad de pasajeros que transportan. Se calcula que un camión mueve por jornada alrededor de 600 viajeros.
“Los transportistas dicen que participan en un porcentaje mínimo en los accidentes totales de la ciudad. Yo les digo: Si están transportando un 60% de la población y cada camión mueve 600 o más pasajeros, no pueden decir que están participando en pocos percances porque el impacto es impresionante”.
Secuelas de un percance
En un incidente vial en el transporte público, que no forma parte de las estadísticas de la autoridad, María Jiménez resultó con una lesión en el dedo índice de la mano izquierda; ella es zurda.
La mujer iba en una unidad de la ruta 629, por la calle Morelos, el conductor del camión competía con otro. Avanzaba y frenaba hasta que el minibús de adelante se detuvo intempestivamente y frenó de manera abrupta.
María fue la única viajera que resultó con una lesión que requirió de atención médica. Exigió al chofer que la mutualidad o el seguro del camión cubriera su tratamiento. El conductor accedió por la presión del resto de los pasajeros, con la condición de que firmara un desistimiento y accedió. La mujer recomendó no dejarse presionar para signar el documento. “Es un error firmarlo porque no sabes qué secuelas puedes tener con la lesión”.
Las secuelas del daño en tendones de su dedo prevalecen, relata María, afectan el desempeño de su trabajo que implica utilizar el teclado de una computadora.
El percance se registró a finales de 2013 y aunque la unidad en la que viajaba pegó levemente contra el otro, cada vehículo siguió su camino y el incidente no quedó registrado.
20 TIENEN CERTIFICACIÓN
La ruta 25 cobrará siete pesos
La certificación de rutas del transporte público que cumplen con las exigencias del decreto del Gobierno del Estado para recuperar la tarifa de siete pesos, continúa. Se preveía que entre ayer y hoy la obtenga el derrotero de la 25.
La directora de Transporte Público de la Secretaría de Movilidad, Edith Rivera Gil, manifestó que es inminente la certificación de unidades de la ruta 25, con lo que sumarán 20 derroteros los que obtienen luz verde para aumentar un peso la tarifa del boleto.
En la metrópoli son 270 los derroteros que prestan el servicio de transporte público, de manera que a la fecha menos de 10% de las rutas han cubierto los requisitos que les permitan obtener la certificación.
Entre los requisitos que requieren cumplir los transportistas que aspiran a recuperar el peso del aumento al precio del pasaje están: la instalación de cámaras de videovigilancia, letrero electrónico, la operación del regulador de velocidad, choferes capacitados, establecimiento de un sueldo fijo de los conductores, entre otros.
Entre las rutas que ya pueden cobrar siete pesos están la 380, 622, 13, 19, 51A, 51B, 51C, 51D, 371, la Línea 1 y 2 del SiTren, 631, 634, 641, 368, 368 CUTonalá, 163, las rutas 400 y 500 del Trolebús. Las 500 y 400, el SiTren, la ruta 13, la 604, la 371 y la 604.
Ojo a la 380
Por otra parte, ante el anuncio del coordinador del Observatorio Ciudadano de Movilidad y Transporte, Alberto Galarza Villaseñor, de que fiscalizarán a la ruta 380, derrotero que recientemente obtuvo la certificación, Rivera Gil consideró como positiva esta acción, dijo que es mejor que haya más ojos vigilando el servicio.
“Se da mucho. Las mutualidades trabajan de una forma impresionantemente rápida para que no impacte la estadística negra en su contra. Viene la mutualidad rápidamente, asume los gastos del auto que chocó y vámonos, vámonos. Como con mucha prisa para que ni siquiera llegue la autoridad de Movilidad y reporte el accidente”.
Chávez Guth reconoció que los transportistas tienen razón al defender que no todos los accidentes son su responsabilidad, aunque pidió a los camioneros no escudarse en el argumento de que del total de percances que registrados en la metrópoli, los del transporte público no son los más significativos, sino que la mayoría corresponde a autos particulares.
Manifestó que el impacto de un siniestro en el que participa una unidad del servicio urbano, es ampliamente mayor que el de un auto particular, por la gran cantidad de pasajeros que transportan. Se calcula que un camión mueve por jornada alrededor de 600 viajeros.
“Los transportistas dicen que participan en un porcentaje mínimo en los accidentes totales de la ciudad. Yo les digo: Si están transportando un 60% de la población y cada camión mueve 600 o más pasajeros, no pueden decir que están participando en pocos percances porque el impacto es impresionante”.
Secuelas de un percance
En un incidente vial en el transporte público, que no forma parte de las estadísticas de la autoridad, María Jiménez resultó con una lesión en el dedo índice de la mano izquierda; ella es zurda.
La mujer iba en una unidad de la ruta 629, por la calle Morelos, el conductor del camión competía con otro. Avanzaba y frenaba hasta que el minibús de adelante se detuvo intempestivamente y frenó de manera abrupta.
María fue la única viajera que resultó con una lesión que requirió de atención médica. Exigió al chofer que la mutualidad o el seguro del camión cubriera su tratamiento. El conductor accedió por la presión del resto de los pasajeros, con la condición de que firmara un desistimiento y accedió. La mujer recomendó no dejarse presionar para signar el documento. “Es un error firmarlo porque no sabes qué secuelas puedes tener con la lesión”.
Las secuelas del daño en tendones de su dedo prevalecen, relata María, afectan el desempeño de su trabajo que implica utilizar el teclado de una computadora.
El percance se registró a finales de 2013 y aunque la unidad en la que viajaba pegó levemente contra el otro, cada vehículo siguió su camino y el incidente no quedó registrado.
20 TIENEN CERTIFICACIÓN
La ruta 25 cobrará siete pesos
La certificación de rutas del transporte público que cumplen con las exigencias del decreto del Gobierno del Estado para recuperar la tarifa de siete pesos, continúa. Se preveía que entre ayer y hoy la obtenga el derrotero de la 25.
La directora de Transporte Público de la Secretaría de Movilidad, Edith Rivera Gil, manifestó que es inminente la certificación de unidades de la ruta 25, con lo que sumarán 20 derroteros los que obtienen luz verde para aumentar un peso la tarifa del boleto.
En la metrópoli son 270 los derroteros que prestan el servicio de transporte público, de manera que a la fecha menos de 10% de las rutas han cubierto los requisitos que les permitan obtener la certificación.
Entre los requisitos que requieren cumplir los transportistas que aspiran a recuperar el peso del aumento al precio del pasaje están: la instalación de cámaras de videovigilancia, letrero electrónico, la operación del regulador de velocidad, choferes capacitados, establecimiento de un sueldo fijo de los conductores, entre otros.
Entre las rutas que ya pueden cobrar siete pesos están la 380, 622, 13, 19, 51A, 51B, 51C, 51D, 371, la Línea 1 y 2 del SiTren, 631, 634, 641, 368, 368 CUTonalá, 163, las rutas 400 y 500 del Trolebús. Las 500 y 400, el SiTren, la ruta 13, la 604, la 371 y la 604.
Ojo a la 380
Por otra parte, ante el anuncio del coordinador del Observatorio Ciudadano de Movilidad y Transporte, Alberto Galarza Villaseñor, de que fiscalizarán a la ruta 380, derrotero que recientemente obtuvo la certificación, Rivera Gil consideró como positiva esta acción, dijo que es mejor que haya más ojos vigilando el servicio.