Internacional

Victoria de los conservadores da respiro a Europa

Mientras los griegos optan por su permanencia en el euro, el mundo les exige formar un Gobierno rápidamente

ATENAS, GRECIA (18/JUN/2012).- Oxígeno puro. La victoria del partido conservador Nueva Democracia en las elecciones legislativas significa que los griegos han optado por permanecer en el euro, al mismo tiempo que tranquiliza tanto al Eurogrupo como a la Unión Europea, que han expresado su deseo de que el país heleno forme “rápidamente” un Gobierno.

El partido conservador Nueva Democracia (ND), de Antonis Samarás, se alzó con la victoria. Y aunque no logró la mayoría absoluta, podrá formar Gobierno con el socialista Pasok ya que entre ambos suman más de los 151 escaños requeridos para dicho propósito, en un parlamento compuesto por 300 diputados.

Con alrededor de 95% del escrutinio ND obtendría cerca de 30% de los votos.

El partido de izquierda radical, Syriza, quedó en segundo lugar con cerca de 27% de los sufragios  y su carismático líder, Alexis Tsipras, ha prometido mantener desde la oposición su lucha contra las medidas de austeridad impuestas por Bruselas a cambio del rescate financiero del país.  

En cambio, los griegos han votado en esta ocasión inmersos en el miedo a una posible salida del euro, por lo que finalmente han dado el voto al partido que más garantías les ofrecía de permanecer en la moneda común europea.

“El pueblo heleno ha votado  por la permanencia del país en la Eurozona y a favor de las fuerzas políticas que traerán empleo desarrollo y empleo”, declaró ante los medios el  conservador Antonis Samarás.

“Para eso invitamos a todas las fuerzas políticas que creen a eso a participar a un Gobierno de salvación nacional”.

Sin embargo, el izquierdista Tsipras rechazó participar en un Gobierno de estas características, menos aún cuando ND y Pasok ya disponen de mayoría absoluta.

ND y Pasok precisamente votaron a favor del segundo plan de rescate a Grecia, entre los meses de febrero y marzo, que incluía duras medidas de ahorro y grandes recortes sociales a cambio de un nuevo préstamo de 130 mil millones de euros para evitar la bancarrota griega.

El enfado de los griegos, que tras casi dos años de medidas de austeridad habían visto su capacidad adquisitiva casi reducida a la mitad y el paro crecer de forma desbocada, fue muy grande, como demostraron los violentos disturbios del 12 de febrero.

Ese día, Atenas terminó literalmente en llamas mientras en el Parlamento, fuertemente protegido por la policía, ND y Pasok votaban a favor de reducir el salario mínimo y eliminar los convenios colectivos.

Con estos resultados, ND obtendría 129 escaños; Syriza, 71; el socialdemócrata Pasok, 33; el nacionalista Griegos Independientes, 20; el neonazi Amanecer Dorado, 18; la centroizquierdista Dimar, 16 y el Partido Comunista, doce.


CLAVES

Matrimonio por conveniencia

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La victoria de los conservadores de Nueva Democracia (ND) se produce tras el fracaso de las elecciones del 6 de mayo, cuyo resultado dejó un Parlamento tan fragmentado que imposibilitó la formación de un Gobierno.

Así, ND y Pasok, socios en el anterior Gobierno que pactó las medidas de austeridad con la Unión Europea, obtendrían juntos 162 escaños, por encima de la mayoría absoluta de 151, lo que les permitiría formar un Gobierno de coalición.  

3 El matrimonio de conveniencia entre ND y el Pasok, que se han acostumbrado a convivir desde noviembre bajo el liderazgo del tecnócrata Lukás Papadimos, es conocido en Bruselas y puede calificarse del más europeísta en el espectro político heleno.


TELÓN DE FONDO

Las turbulencias internas


La previsible formación de un Gobierno de coalición en Grecia entre los conservadores de Nueva Democracia (ND) y los socialistas del Pasok, es la opción preferida por los líderes europeos, pero no cierra la posibilidad de más turbulencias internas ante la división entre los partidos y la sociedad.

Con los resultados de las elecciones generales en Grecia se espera que los mercados se sentirán aliviados este lunes, tras semanas de incertidumbre política por una posible victoria de la coalición izquierdista radical Syriza y el consiguiente bloqueo de la ayuda financiera a Grecia.

Las dos grandes formaciones que han controlado la política griega en las últimas décadas han sumado en las elecciones de ayer 48% del apoyo electoral y, si forman Ejecutivo, disfrutarán de mayoría absoluta en el Parlamento.

Frente a estas dos formaciones, que pactaron con la Unión Europea unos duros compromisos de austeridad, se alinean cinco formaciones parlamentarias, desde comunistas a neonazis, que, con mayor o menor radicalidad rechazan esas políticas de ahorro.

Como principal fuerza opositora se presenta Syriza, una coalición de izquierdas a la que los líderes europeos y el “establishment” griego habían señalado como una eventual puerta de salida de Grecia de la eurozona si llegaba a ganar las elecciones.

No ha sido así, ya que ha quedado segunda a menos de cuatro puntos de Nueva Democracia, tras una campaña electoral plagada de lo que su líder, Alexis Tsipras, ha calificado de “mensajes del miedo”.

A esa derrota pudo haber contribuido el hecho de que Berlín y Bruselas hicieran serias advertencias a Atenas para que no se cambiaran los acuerdos sobre los créditos de ayuda firmados con el anterior gobierno heleno.

Tsipras ha insistido en que quiere una Grecia europea y en el euro, pero sin someterse a las duras medidas de ahorro en las que muchos analistas ven la causa de la depresión económica que sufre el país.

El carismático líder anunció que mantendrá esa postura como una oposición fuerte, lo que, con un amplio apoyo social en la calle y 71 escaños en un Parlamento de 300, puede poner trabas a la coalición de dos partidos enfrentados tradicionalmente.

La ND de Antonis Samarás tendrá que aliarse con los socialistas liderados por Evangelos Venizelos, que sucedió a Yorgos Papandréu, quien fracasó en llevar a buen puerto a un país altamente endeudado y empobrecido.

Queda por ver la estabilidad de esta coalición en un país que ha entrado en el quinto año de recesión y cuya población se ha empobrecido visiblemente.

Quienes habían visto estos comicios como un referéndum sobre la permanencia de Grecia en la Eurozona habrán observado que el electorado se ha decantado por la moneda única y contra la vuelta al dracma, la antigua moneda nacional.

EFE


URGEN A REDUCIR EL DÉFICIT

BRUSELAS, BÉLGICA
.- La Unión Europea y la zona euro pidieron a Grecia que forme Gobierno rápidamente tras la victoria de los partidarios del rescate financiero, entre algunas sugerencias de que podría haber algo de flexibilidad, al menos en el calendario, de los ajustes que debe acometer el país.

Tras la victoria del partido conservador Nueva Democracia (ND) Aún es pronto para saber si los resultados de ayer zanjarán las dudas sobre la permanencia de Grecia en el euro, ya que el Pasok ha dicho que prefiere formar una gran coalición con otros dos partidos izquierdistas (Syriza y Dimar), una idea que ya se intentó infructuosamente en mayo.

En ese tenor el Eurogrupo dijo que la “troika” —la Comunidad Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional— volverá a Atenas en cuanto haya un Ejecutivo en funciones “para intercambiar puntos de vista (...) sobre el camino a seguir y preparar la primera revisión bajo el secundo rescate”, en un lenguaje un poco diferente que también puede aportar un poco más de flexibilidad y cuanto menos la disposición a dialogar.

Alemania abrió la puerta a esta flexibilidad, al sugerir que Grecia pueda obtener más tiempo para cumplir sus objetivos de reformas y reducción del déficit.

El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle, señaló en unas declaraciones a la cadena de televisión ZDF que si bien no se puede anular o renegociar la “sustancia” de los acuerdos de rescate financiero, se podría hablar de cambios en el cronograma.

“Me puedo imaginar que hagamos algo con el calendario”, porque se ha generado un atraso en la aplicación del programa por la campaña electoral y los griegos no deben sufrir las consecuencias de una clase política incapaz de ponerse de acuerdo, dijo, aunque recalcó que no hay camino distinto a las reformas.

EFE

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