Internacional
Una manifestación pide el fin de la huelga general promovida por maoístas
Si la policía no hubiera controlado la situación habría habido violencia y heridos: Bigyan Raj Sharma, portavoz policial
KATMANDÚ, NEPAL (07/MAY/2010).- La policía nepalí utilizó hoy gases lacrimógenos para evitar choques durante una protesta de miles de personas que tomaron el centro de Katmandú para pedir el fin de la huelga general convocada por el Partido Maoísta.
"Si la policía no hubiera controlado la situación habría habido violencia y heridos", dijo el portavoz policial Bigyan Raj Sharma, en referencia a algunos enfrentamientos entre los manifestantes y los simpatizantes del Partido Maoísta.
La manifestación, de carácter pacífico, fue convocada por la Federación Nepalí de Cámaras de Comercio de Industria (FNCCI) para pedir el final de la huelga, que dura ya seis días, así como el fin de la parálisis política que sufre Nepal.
Durante la marcha, varios portavoces destacaron que la población general ha comenzado a sufrir los efectos de la huelga, y gritaron eslóganes en favor de un "establecimiento de la paz".
"No podemos soportar esto por más tiempo. Queremos paz y consenso", dijo en el transcurso de la manifestación el presidente del FNCCI, Kush Kumar Joshi, que dio a los partidos políticos un plazo de 48 horas para llegar a un acuerdo.
El Gobierno ha pedido a los maoístas que pospongan sus protestas y en su lugar utilicen medios constitucionales para derribarlo.
"No puede haber un cambio desde las calles", dijo a los medios el ministro de Información y portavoz del Gobierno, Shankar Pokharel, tras una reunión del gabinete.
Hoy mismo, la embajada de Estados Unidos en Nepal difundió un comunicado en el que alertó del riesgo de una "confrontación peligrosa" y calificó como "graves" las consecuencias que la huelga está teniendo sobre los nepalíes.
"Pedimos a los maoístas que pongan fin o suspendan su huelga. Pedimos a los maoístas y el Gobierno que tengan buen juicio y compostura para prevenir un estallido de violencia", dijo en la nota el subsecretario de EEUU para Asia Central y del Sur, Robert Blake.
Los maoístas mantienen que la huelga continuará hasta lograr su objetivo, la dimisión del primer ministro, Madhav Kumar Nepal, quien por su parte ha reiterado ante la prensa que las protestas callejeras no le harán tirar la toalla.
Hasta ahora se ha producido el fallecimiento de un joven militante del Partido Marxista Leninista, víctima de un choque entre sus correligionarios y simpatizantes maoístas, mientras que decenas de personas han resultado heridas.
Los maoístas quieren que el primer ministro dimita antes de discutir cualquier otro contencioso, pero los otros partidos buscan primero llegar a un acuerdo para la integración de más 19 mil ex guerrilleros maoístas en el Ejército de Nepal.
Además, el día 28 de este mes concluye el plazo que las fuerzas nepalíes se habían dado para redactar una nueva Carta Magna, uno de los pasos claves en el proceso de paz nepalí.
Blake dijo que Estados Unidos está dispuesto a ayudar a Nepal de "cualquier forma posible", y aseguró que la solución pasa por que los partidos actúen con una "máxima flexibilidad" para resolver sus diferencias.
El Partido Maoísta, el más votado del Parlamento, dejó el Gobierno en mayo de 2009, tras mantener un pulso fallido para lograr la destitución del entonces jefe del Ejército, quien había reclutado a soldados violando, según los maoístas, los acuerdos de paz.
Entonces tomó las riendas el Partido Marxista-Leninista junto a una gran coalición de partidos, pero los maoístas llevan meses reclamando un nuevo Gabinete encabezado por ellos.
"Si la policía no hubiera controlado la situación habría habido violencia y heridos", dijo el portavoz policial Bigyan Raj Sharma, en referencia a algunos enfrentamientos entre los manifestantes y los simpatizantes del Partido Maoísta.
La manifestación, de carácter pacífico, fue convocada por la Federación Nepalí de Cámaras de Comercio de Industria (FNCCI) para pedir el final de la huelga, que dura ya seis días, así como el fin de la parálisis política que sufre Nepal.
Durante la marcha, varios portavoces destacaron que la población general ha comenzado a sufrir los efectos de la huelga, y gritaron eslóganes en favor de un "establecimiento de la paz".
"No podemos soportar esto por más tiempo. Queremos paz y consenso", dijo en el transcurso de la manifestación el presidente del FNCCI, Kush Kumar Joshi, que dio a los partidos políticos un plazo de 48 horas para llegar a un acuerdo.
El Gobierno ha pedido a los maoístas que pospongan sus protestas y en su lugar utilicen medios constitucionales para derribarlo.
"No puede haber un cambio desde las calles", dijo a los medios el ministro de Información y portavoz del Gobierno, Shankar Pokharel, tras una reunión del gabinete.
Hoy mismo, la embajada de Estados Unidos en Nepal difundió un comunicado en el que alertó del riesgo de una "confrontación peligrosa" y calificó como "graves" las consecuencias que la huelga está teniendo sobre los nepalíes.
"Pedimos a los maoístas que pongan fin o suspendan su huelga. Pedimos a los maoístas y el Gobierno que tengan buen juicio y compostura para prevenir un estallido de violencia", dijo en la nota el subsecretario de EEUU para Asia Central y del Sur, Robert Blake.
Los maoístas mantienen que la huelga continuará hasta lograr su objetivo, la dimisión del primer ministro, Madhav Kumar Nepal, quien por su parte ha reiterado ante la prensa que las protestas callejeras no le harán tirar la toalla.
Hasta ahora se ha producido el fallecimiento de un joven militante del Partido Marxista Leninista, víctima de un choque entre sus correligionarios y simpatizantes maoístas, mientras que decenas de personas han resultado heridas.
Los maoístas quieren que el primer ministro dimita antes de discutir cualquier otro contencioso, pero los otros partidos buscan primero llegar a un acuerdo para la integración de más 19 mil ex guerrilleros maoístas en el Ejército de Nepal.
Además, el día 28 de este mes concluye el plazo que las fuerzas nepalíes se habían dado para redactar una nueva Carta Magna, uno de los pasos claves en el proceso de paz nepalí.
Blake dijo que Estados Unidos está dispuesto a ayudar a Nepal de "cualquier forma posible", y aseguró que la solución pasa por que los partidos actúen con una "máxima flexibilidad" para resolver sus diferencias.
El Partido Maoísta, el más votado del Parlamento, dejó el Gobierno en mayo de 2009, tras mantener un pulso fallido para lograr la destitución del entonces jefe del Ejército, quien había reclutado a soldados violando, según los maoístas, los acuerdos de paz.
Entonces tomó las riendas el Partido Marxista-Leninista junto a una gran coalición de partidos, pero los maoístas llevan meses reclamando un nuevo Gabinete encabezado por ellos.