Internacional
Campesinos toman casa de ex vicepresidente opositor a Morales
La casa se encontraba vacía y pintada con el rótulo ''esta casa es propiedad del pueblo''
LA PAZ, BOLIVIA.- Casi 400 campesinos de una localidad rural de La Paz tomaron el sábado la casa del ex vicepresidente Victor Hugo Cárdenas, opositor al presidente Evo Morales, por una supuesta ''traición'' a los indígenas.
El propio Cárdenas dijo en una entrevista telefónica del sábado que sospechaba que se trataba de gente enviada por el gobierno de Morales.
''Han golpeado a mi hijo, le han reventado un ojo según lo que me han informado. Yo no puedo ir porque temo por mi vida, es gente enviada por el gobierno de Morales porque yo hice campaña en contra de la nueva Constitución, ése es mi único delito'', manifestó.
Cárdenas, de la etnia aymara, al igual que Morales, acompañó al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada de 1993 a 1997, se mostró crítico de la nueva Carta Magna e hizo campaña contra la aprobación del texto constitucional, lo cual fue sometido a un referendo el 25 de enero.
Marcos Farfán, viceministro de Régimen Interior, informó en conferencia de prensa que se abrirá un proceso ante la fiscalía pues se violó la propiedad privada, aunque aclaró que no fue obra del gobierno.
''Esta situación se produce a raíz de los resentimientos que se han creado. Cárdenas fue el vicepresidente de Gonzalo Sánchez de Lozada, quien es considerado enemigo número uno de la región'', explicó Farfán.
Por su parte, el ejecutivo de los campesinos, Alfredo Huañapaco, señaló que la decisión de allanar la casa de Cárdenas se tomó debido a la ``traición'' que sufrieron los indígenas de la comunidad de Sanckajawira, ubicada a 80 kilómetros de La Paz.
''Nosotros no perdonamos que se haya traicionado al hermano (Evo) Morales, al proceso de cambio'', dijo.
Hace un mes una resolución de la localidad de Huatajata decidió expropiar la casa del ex vicepresidente por acusaciones de traición a los indígenas de la localidad.
Lidia Katari, esposa de Cárdenas escapó con sus dos hijos y sobrinos del grupo de campesinos, quienes los apedrearon y los golpearon, según explicó Cárdenas.
''Ahora mi familia se encuentra en el hospital, pero vamos a tomar todas las medidas que sean necesarias. Esto no se veía ni en las dictaduras'', agregó.
Huañapaco negó la acusación y manifestó que la toma de la vivienda el sábado por la mañana se efectuó en forma ''pacifica''. La casa se encontraba vacía y pintada con el rótulo ''esta casa es propiedad del pueblo''.
El propio Cárdenas dijo en una entrevista telefónica del sábado que sospechaba que se trataba de gente enviada por el gobierno de Morales.
''Han golpeado a mi hijo, le han reventado un ojo según lo que me han informado. Yo no puedo ir porque temo por mi vida, es gente enviada por el gobierno de Morales porque yo hice campaña en contra de la nueva Constitución, ése es mi único delito'', manifestó.
Cárdenas, de la etnia aymara, al igual que Morales, acompañó al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada de 1993 a 1997, se mostró crítico de la nueva Carta Magna e hizo campaña contra la aprobación del texto constitucional, lo cual fue sometido a un referendo el 25 de enero.
Marcos Farfán, viceministro de Régimen Interior, informó en conferencia de prensa que se abrirá un proceso ante la fiscalía pues se violó la propiedad privada, aunque aclaró que no fue obra del gobierno.
''Esta situación se produce a raíz de los resentimientos que se han creado. Cárdenas fue el vicepresidente de Gonzalo Sánchez de Lozada, quien es considerado enemigo número uno de la región'', explicó Farfán.
Por su parte, el ejecutivo de los campesinos, Alfredo Huañapaco, señaló que la decisión de allanar la casa de Cárdenas se tomó debido a la ``traición'' que sufrieron los indígenas de la comunidad de Sanckajawira, ubicada a 80 kilómetros de La Paz.
''Nosotros no perdonamos que se haya traicionado al hermano (Evo) Morales, al proceso de cambio'', dijo.
Hace un mes una resolución de la localidad de Huatajata decidió expropiar la casa del ex vicepresidente por acusaciones de traición a los indígenas de la localidad.
Lidia Katari, esposa de Cárdenas escapó con sus dos hijos y sobrinos del grupo de campesinos, quienes los apedrearon y los golpearon, según explicó Cárdenas.
''Ahora mi familia se encuentra en el hospital, pero vamos a tomar todas las medidas que sean necesarias. Esto no se veía ni en las dictaduras'', agregó.
Huañapaco negó la acusación y manifestó que la toma de la vivienda el sábado por la mañana se efectuó en forma ''pacifica''. La casa se encontraba vacía y pintada con el rótulo ''esta casa es propiedad del pueblo''.