Entretenimiento
The Strokes cierra el Corona Capital
La segunda edición del festival reporta saldo blanco y una exitosa afluencia de público
CIUDAD DE MÉXICO (17/OCT/2011).- La segunda edición del Festival Corona Capital, también conocido como Corona Fest, logró su objetivo: ofrecer diversión y esparcimiento a 85 mil espectadores en el Autódromo Hermanos Rodríguez, con la actuación de 30 bandas de rock y música alternativa.
El escenario principal estuvo liderado por la banda neoyorquina The Strokes, que tomó su tiempo para salir al escenario en el que Julian Casablancas, Albert Hammond Jr., Nikolai Fraiture, Fabrizio Moretti y Nick Valensi, éste último, quien sufrió un accidente que le ocasionó una fractura en la pierna, por lo que se mantuvo casi todo el concierto sentado, lograron avivar la adrenalina de los presentes.
Los primeros gritos del público comenzaron con New York city cops y sin dejar que el ánimo desapareciera, la banda siguió con Heart in a cage, seguido por Machu Picchu, éste último incluido en el más reciente álbum del grupo.
“Tengan cuidado, no se vayan a lastimar, ¿hay algún problema aquí?, ¿puede alguien revisar qué pasó?”, expresó Casablancas al tiempo de observar a la multitud que no dejaba de moverse y acercarse aún más al entarimado principal. Ya más calmado, la agrupación continuó con The modern age, que causó la exaltación del público, pues de inmediato se puso a bailar y brincar, pero cuando sonó You only live once, los asistentes se unieron en un gran coro.
“Son un público muy loco, amo a los mexicanos, ustedes gritan muy fuerte”, expresó el vocalista y sin dejar pasar el tiempo continuó con Undercover of darkness y This is it, tema que da nombre a su primer álbum y con el cual se ganó un lugar importante en la escena roquera.
La velada continuó con Whatever happened, Sunday, 12:51 y una de las más esperadas de la noche, Reptilia, que fue entonada de principio a fin por las más de 80 mil gargantas. “Mi español no es muy bueno, mi nombre es Julian Casablancas”, expresó el vocalista, mientras sonreía y dio paso a otra de las consentidas del público, Last night, para despedirse de los mexicanos.
Buen sabor de boca.
Portishead, en su primera visita a México, también logró ser un magnífico preámbulo para cerrar la noche en el escenario Capital el sábado.
Ésta es la primera vez que la banda se presenta en México y no decepcionó, al ofrecer un espectáculo que combinó la música con imágenes envolventes y que hizo de ese concierto algo irrepetible.
La voz de Beth Gibbons dejó sin palabras a la audiencia con temas como Wandering star, The rip, Glory box, Machine gun y Over, pero la más aclamada fue Roads.
Entre los grupos y artistas más esperados del encuentro, estuvo el neoyorquino, Richard Melville Hall, mejor conocido como Moby, quien en el escenario Corona Laigth Stage, puso a bailar a más de 50 mil personas que se congregaron al frente del entarimado, para disfrutar de lo mejor de su repertorio musical, así como del adelanto de Destroyed.
La otra parte del público, más de 30 mil personas, estuvieron dispersos y en el escenario contiguo del Bizco Club Stage, donde tocaron su propuesta pop-electro-punk, los integrantes de la también banda neoyorquina The Rapture, quien también causó sensación entre los asistentes, que no dejaban de bailar. Antes de la culminación del festival, los brasileños Cansei de Ser Sex interpretaron los temas más representativos de sus tres álbumes.
El encuentro sonoro se despidió tras recibir en el escenario las propuestas de Cohhnen and Cambria, Mogwai, Austin TV, Ximena Sariñana y Torreblanca, entre muchos más.
El escenario principal estuvo liderado por la banda neoyorquina The Strokes, que tomó su tiempo para salir al escenario en el que Julian Casablancas, Albert Hammond Jr., Nikolai Fraiture, Fabrizio Moretti y Nick Valensi, éste último, quien sufrió un accidente que le ocasionó una fractura en la pierna, por lo que se mantuvo casi todo el concierto sentado, lograron avivar la adrenalina de los presentes.
Los primeros gritos del público comenzaron con New York city cops y sin dejar que el ánimo desapareciera, la banda siguió con Heart in a cage, seguido por Machu Picchu, éste último incluido en el más reciente álbum del grupo.
“Tengan cuidado, no se vayan a lastimar, ¿hay algún problema aquí?, ¿puede alguien revisar qué pasó?”, expresó Casablancas al tiempo de observar a la multitud que no dejaba de moverse y acercarse aún más al entarimado principal. Ya más calmado, la agrupación continuó con The modern age, que causó la exaltación del público, pues de inmediato se puso a bailar y brincar, pero cuando sonó You only live once, los asistentes se unieron en un gran coro.
“Son un público muy loco, amo a los mexicanos, ustedes gritan muy fuerte”, expresó el vocalista y sin dejar pasar el tiempo continuó con Undercover of darkness y This is it, tema que da nombre a su primer álbum y con el cual se ganó un lugar importante en la escena roquera.
La velada continuó con Whatever happened, Sunday, 12:51 y una de las más esperadas de la noche, Reptilia, que fue entonada de principio a fin por las más de 80 mil gargantas. “Mi español no es muy bueno, mi nombre es Julian Casablancas”, expresó el vocalista, mientras sonreía y dio paso a otra de las consentidas del público, Last night, para despedirse de los mexicanos.
Buen sabor de boca.
Portishead, en su primera visita a México, también logró ser un magnífico preámbulo para cerrar la noche en el escenario Capital el sábado.
Ésta es la primera vez que la banda se presenta en México y no decepcionó, al ofrecer un espectáculo que combinó la música con imágenes envolventes y que hizo de ese concierto algo irrepetible.
La voz de Beth Gibbons dejó sin palabras a la audiencia con temas como Wandering star, The rip, Glory box, Machine gun y Over, pero la más aclamada fue Roads.
Entre los grupos y artistas más esperados del encuentro, estuvo el neoyorquino, Richard Melville Hall, mejor conocido como Moby, quien en el escenario Corona Laigth Stage, puso a bailar a más de 50 mil personas que se congregaron al frente del entarimado, para disfrutar de lo mejor de su repertorio musical, así como del adelanto de Destroyed.
La otra parte del público, más de 30 mil personas, estuvieron dispersos y en el escenario contiguo del Bizco Club Stage, donde tocaron su propuesta pop-electro-punk, los integrantes de la también banda neoyorquina The Rapture, quien también causó sensación entre los asistentes, que no dejaban de bailar. Antes de la culminación del festival, los brasileños Cansei de Ser Sex interpretaron los temas más representativos de sus tres álbumes.
El encuentro sonoro se despidió tras recibir en el escenario las propuestas de Cohhnen and Cambria, Mogwai, Austin TV, Ximena Sariñana y Torreblanca, entre muchos más.