Entretenimiento
Pide Monsiváis más exigencia en contenidos de medios públicos
Monsiváis cuestionó el nivel de exigencia de la televisión pública y criticó que en la televisión comercial impere el entretenimiento.
MÉXICO.- El laureado escritor mexicano
Carlos Monsiváis se pronunció la víspera a favor de una mayor apertura de contenidos en la televisión pública, en la que consideró, a diferencia de la comercial o privada, es un tema que no se ha discutido lo suficiente.
Durante una charla en la que estuvo acompañado por el politólogo José Woldenberg, la directora de Radio Educación Virginia Bello y el escritor boliviano Edmundo Paz, Monsiváis señaló que en este tema no se ha tomado en cuenta la posibilidad de exigir más.
"La televisión cultural va bien pero debería haber una mayor exigencia, se ha hablado sobre el aspecto tecnológico, pero debería también haber una mayor en contenidos; no veo que en la discusión de contenidos se haya avanzado, simplemente no se ha tomado en cuenta y debería existir la posibilidad de exigir más", agregó.
En el marco del Encuentro Internacional de Cultura y Medios con el que Canal 22 festeja sus 15 años de transmisiones, Monsiváis, uno de los escritores más importantes del México contemporáneo, cuestionó el nivel de exigencia de la televisión pública y criticó que en la televisión comercial impere el entretenimiento.
"En México se tiene la idea de que la cultura es aburrida y siempre hay la preponderancia hacia lo entretenido. Entonces, creo que la televisión cultural en primera instancia, debe enfrentarse a la noción prevaleciente o no tiene sentido. Creo que lo está haciendo en buena medida es bueno, pero debería exigirse más", reiteró.
Advirtió que de no exigirse esta medida, el "dios raiting" intervendrá en todas las consideraciones de la televisión privada y pública, y las posibilidades de hacer una crítica hacia la televisión cultural serán muy pocas.
"Mientras no se exija más a la televisión cultural tenderá a rendirse en alguna medida a normas de lo entretenido que deben ser rechazadas. La televisión comercial va bien. Lo que veo ahí, es que la noción de lo entretenido está firmemente enraizada y que no hay manera de creer es un ejercicio de alternativas", expresó.
En los últimos años, sostuvo, los canales culturales como el 11 y el 22, han venido funcionando muy bien. Ambos han presentado ciclos de cine y series de primer orden, y han conseguido un público, dijo el critico de la Portales, al tiempo que propuso que estos programas y series se distribuyan a las escuelas públicas.
Por su parte, la directora de Radio Educación Virginia Bello se refirió la crisis que padece la radio en la amplitud modulada (AM), así como a la problemática de que en un futuro la convergencia digital modificará los formatos tradicionales que se han usado en la industria radiofónica.
Dijo que los radioescuchas de hoy están al 75 por ciento en la banda de frecuencia modulada (FM), mientras que en la amplitud modulada (AM), existe un 25 por ciento.
"Es una tendencia que va a incrementar, es decir empeorará para las estaciones de AM", dijo.
Para la funcionaria, el reto para la radiodifusora a su cargo es ser una opción dentro del cuadrante y para los jóvenes, a pesar de que hoy éstos están volcados hacia las nuevas tecnologías.
"Nos preocupa la convergencia tecnológica, cómo hacer para que nos escuchen más y no nos dejen de escuchar las nuevas generaciones.
La convergencia tecnológica nos lleva a pensar, en que los formatos tradicionales que se han estado utilizando en la industria radiofónica van a tener que cambiar", indicó.
También aprovechó para recordar que en noviembre próximo, la primera radiodifusora pionera en materia educativa y cultural en México celebrará 84 años de haber sido creada, y 40 de transmitir de manera interrumpida en el 1060 de AM.
En su oportunidad, en politólogo y escritor José Woldenberg, aseguró que en materia de medios de comunicación, en México hay una buena noticia y signos preocupantes.
En el primer caso, dijo, en los últimos 30 años los márgenes de la libertad de expresión se han extendido de manera considerable.
Mientras que preocupan las especulaciones que se dan en los medios de comunicación; la socialización de `supercherías` de todo tipo y la erosión del espacio privado.
En cuanto a la libertad de expresión, recordó que hace tres décadas era difícil tanto en la televisión como en la radio escuchar o ver críticas a las instituciones.
"Hoy para fortuna del país, ésto es una página del pasado y creo que los medios han sido un acicate y beneficiarios del proceso de transformación del país", agregó.
En México, sin embargo, dijo, se cuenta con medios de comunicación deficitarios en el sentido de que muchas de las veces, transmiten noticias sin fuente, con especulaciones al infinito, con trascendidos, con notas sin firma y deducciones que no se compadecen de la lógica.
Sobre ese tema, opinó que la Ley de Acceso a la Información Pública puede ser un contrapeso. "Hace pocos años la información pública era de facto, se manejaba de manera discrecional".
Hoy, a partir de las modificaciones legales en esta materia y a partir de que los ciudadanos se apropian de este derecho de la información y los periodistas hagan lo propio, "eventualmente podremos ir desmontando este espiral de especulaciones sin fuente, el cual erosiona la confianza en los medios y en el debate público", indicó.
Sobre la reproducción de "supercherías", refirió que hace tiempo en la televisión se apreciaban personajes como videntes o psíquicos que vendían la idea de que con una llamada telefónica podían atender la carencias y necesidades del público.
"En realidad, desde mi punto de vista, se trataba de una expresión extrema respecto a lo que los medios no deben reproducir, supercherías, consejos antiilustrados que van a contrapelo de lo que la propia Constitución señala en su artículo tercero.
"Creo que éste es otro de los grandes déficit de nuestros medios y que eventualmente debería ser atendido", apuntó.
Durante una charla en la que estuvo acompañado por el politólogo José Woldenberg, la directora de Radio Educación Virginia Bello y el escritor boliviano Edmundo Paz, Monsiváis señaló que en este tema no se ha tomado en cuenta la posibilidad de exigir más.
"La televisión cultural va bien pero debería haber una mayor exigencia, se ha hablado sobre el aspecto tecnológico, pero debería también haber una mayor en contenidos; no veo que en la discusión de contenidos se haya avanzado, simplemente no se ha tomado en cuenta y debería existir la posibilidad de exigir más", agregó.
En el marco del Encuentro Internacional de Cultura y Medios con el que Canal 22 festeja sus 15 años de transmisiones, Monsiváis, uno de los escritores más importantes del México contemporáneo, cuestionó el nivel de exigencia de la televisión pública y criticó que en la televisión comercial impere el entretenimiento.
"En México se tiene la idea de que la cultura es aburrida y siempre hay la preponderancia hacia lo entretenido. Entonces, creo que la televisión cultural en primera instancia, debe enfrentarse a la noción prevaleciente o no tiene sentido. Creo que lo está haciendo en buena medida es bueno, pero debería exigirse más", reiteró.
Advirtió que de no exigirse esta medida, el "dios raiting" intervendrá en todas las consideraciones de la televisión privada y pública, y las posibilidades de hacer una crítica hacia la televisión cultural serán muy pocas.
"Mientras no se exija más a la televisión cultural tenderá a rendirse en alguna medida a normas de lo entretenido que deben ser rechazadas. La televisión comercial va bien. Lo que veo ahí, es que la noción de lo entretenido está firmemente enraizada y que no hay manera de creer es un ejercicio de alternativas", expresó.
En los últimos años, sostuvo, los canales culturales como el 11 y el 22, han venido funcionando muy bien. Ambos han presentado ciclos de cine y series de primer orden, y han conseguido un público, dijo el critico de la Portales, al tiempo que propuso que estos programas y series se distribuyan a las escuelas públicas.
Por su parte, la directora de Radio Educación Virginia Bello se refirió la crisis que padece la radio en la amplitud modulada (AM), así como a la problemática de que en un futuro la convergencia digital modificará los formatos tradicionales que se han usado en la industria radiofónica.
Dijo que los radioescuchas de hoy están al 75 por ciento en la banda de frecuencia modulada (FM), mientras que en la amplitud modulada (AM), existe un 25 por ciento.
"Es una tendencia que va a incrementar, es decir empeorará para las estaciones de AM", dijo.
Para la funcionaria, el reto para la radiodifusora a su cargo es ser una opción dentro del cuadrante y para los jóvenes, a pesar de que hoy éstos están volcados hacia las nuevas tecnologías.
"Nos preocupa la convergencia tecnológica, cómo hacer para que nos escuchen más y no nos dejen de escuchar las nuevas generaciones.
La convergencia tecnológica nos lleva a pensar, en que los formatos tradicionales que se han estado utilizando en la industria radiofónica van a tener que cambiar", indicó.
También aprovechó para recordar que en noviembre próximo, la primera radiodifusora pionera en materia educativa y cultural en México celebrará 84 años de haber sido creada, y 40 de transmitir de manera interrumpida en el 1060 de AM.
En su oportunidad, en politólogo y escritor José Woldenberg, aseguró que en materia de medios de comunicación, en México hay una buena noticia y signos preocupantes.
En el primer caso, dijo, en los últimos 30 años los márgenes de la libertad de expresión se han extendido de manera considerable.
Mientras que preocupan las especulaciones que se dan en los medios de comunicación; la socialización de `supercherías` de todo tipo y la erosión del espacio privado.
En cuanto a la libertad de expresión, recordó que hace tres décadas era difícil tanto en la televisión como en la radio escuchar o ver críticas a las instituciones.
"Hoy para fortuna del país, ésto es una página del pasado y creo que los medios han sido un acicate y beneficiarios del proceso de transformación del país", agregó.
En México, sin embargo, dijo, se cuenta con medios de comunicación deficitarios en el sentido de que muchas de las veces, transmiten noticias sin fuente, con especulaciones al infinito, con trascendidos, con notas sin firma y deducciones que no se compadecen de la lógica.
Sobre ese tema, opinó que la Ley de Acceso a la Información Pública puede ser un contrapeso. "Hace pocos años la información pública era de facto, se manejaba de manera discrecional".
Hoy, a partir de las modificaciones legales en esta materia y a partir de que los ciudadanos se apropian de este derecho de la información y los periodistas hagan lo propio, "eventualmente podremos ir desmontando este espiral de especulaciones sin fuente, el cual erosiona la confianza en los medios y en el debate público", indicó.
Sobre la reproducción de "supercherías", refirió que hace tiempo en la televisión se apreciaban personajes como videntes o psíquicos que vendían la idea de que con una llamada telefónica podían atender la carencias y necesidades del público.
"En realidad, desde mi punto de vista, se trataba de una expresión extrema respecto a lo que los medios no deben reproducir, supercherías, consejos antiilustrados que van a contrapelo de lo que la propia Constitución señala en su artículo tercero.
"Creo que éste es otro de los grandes déficit de nuestros medios y que eventualmente debería ser atendido", apuntó.