Entretenimiento
Los Emmys llenan de glamour su alfombra
En la alfombra roja se apostó por simpleza en el vestir
GUADALAJARA, JALISCO (22/SEP/2013).- Mucha belleza femenina y formalidad masculina. Una explosiva combinación de colores para ella, y una sepulcral monotonía para ellos. El destierro de los accesorios y la apuesta por peinados sencillos. Esos son los saldos que dejó la alfombra de los Emmy, una de las "pasarelas de moda" más esperadas en la Meca del Entretenimiento, y que sirvió como acto de apertura para una de las ceremonias más esperadas en Hollywood durante el año.
En esta ocasión, en la alfombra roja se apostó por simpleza en el vestir. Además, la tendencia de que estrellas de cine y televisión vayan de la mano se acentuó aún más, dejando en claro que los proyectos en la pantalla chica resultan cada vez más irresistibles para los astros de la pantalla de plata.
Tina Fey por su parte sorprendió con un entallado vestido en color azul, demostrando que el final de 30 Rock le llega en un buen momento laboral y físico. Allison Williams, de la serie Girls, también apostó por el mismo tono, y que también presumió presencia y rostro en los prolegómenos de la ceremonia.
Otra que presumió cuerpazo a su paso por la alfombra fue Heidi Klum, la super modelo que demostró que los años, los hijos, y su problemático divorcio con Seal, lejos de hacer mella en su escultural figura, la acentuaron. Su vestido en color rojo brillante y vibrante logró magnetizar la atención de los camarógrafos, que ya la tienen como una de las grandes consentidas de la farándula.
Klum no fue la única que decidió que el rojo era el mejor color para llamar la atención. Kaley Cuoco, la musa de los nerds en The Big Bang Theory, también utilizó un vestido en tono escarlata.
Dicen que la que "de amarillo de viste, en su belleza confía". Y a eso apostó Anna Faris, que utilizó ese color en su vestido, donde la única variante fue un prendedor en forma de lagartija verde que colocó en su espalda baja.
Elisabeth Moss, de Mad Men, se decantó por una combinación en blanco y negro, y ella definió su vestido como el de una "princesa", por la amplia falda que utilizaba.
EL INFORMADOR / JUAN FRANCISCO GONZÁLEZ RODRÍGUEZ
En esta ocasión, en la alfombra roja se apostó por simpleza en el vestir. Además, la tendencia de que estrellas de cine y televisión vayan de la mano se acentuó aún más, dejando en claro que los proyectos en la pantalla chica resultan cada vez más irresistibles para los astros de la pantalla de plata.
Tina Fey por su parte sorprendió con un entallado vestido en color azul, demostrando que el final de 30 Rock le llega en un buen momento laboral y físico. Allison Williams, de la serie Girls, también apostó por el mismo tono, y que también presumió presencia y rostro en los prolegómenos de la ceremonia.
Otra que presumió cuerpazo a su paso por la alfombra fue Heidi Klum, la super modelo que demostró que los años, los hijos, y su problemático divorcio con Seal, lejos de hacer mella en su escultural figura, la acentuaron. Su vestido en color rojo brillante y vibrante logró magnetizar la atención de los camarógrafos, que ya la tienen como una de las grandes consentidas de la farándula.
Klum no fue la única que decidió que el rojo era el mejor color para llamar la atención. Kaley Cuoco, la musa de los nerds en The Big Bang Theory, también utilizó un vestido en tono escarlata.
Dicen que la que "de amarillo de viste, en su belleza confía". Y a eso apostó Anna Faris, que utilizó ese color en su vestido, donde la única variante fue un prendedor en forma de lagartija verde que colocó en su espalda baja.
Elisabeth Moss, de Mad Men, se decantó por una combinación en blanco y negro, y ella definió su vestido como el de una "princesa", por la amplia falda que utilizaba.
EL INFORMADOR / JUAN FRANCISCO GONZÁLEZ RODRÍGUEZ