Economía
Sin título universitario triunfan en los negocios
Alejandro, Salvador y Manuel no estudiaron una carrera, pero eso no fue un obstáculo para construir empresas exitosas
GUADALAJARA, JALISCO (21/DIC/2015).- Estudiar una licenciatura en una universidad ya no es garantía de que se tendrá un empleo bien remunerado. Por eso se vuelven cada vez más atractivos oficios y carreras técnicas cuyo aprendizaje no implica una inversión considerable de tiempo, dinero y esfuerzo: organización de eventos, estilistas, maquillistas, vendedores de seguros, especialistas en bienes raíces, alimentos y bebidas, agencias de viajes, entre otros.
Historias como la de Salvador Hermosillo Montes revelan que se puede emprender un negocio exitoso sin haber pasado por las aulas universitarias. “El Negro”, como lo conocen sus amigos, empezó a trabajar desde joven vendiendo elotes en las calles del popular barrio Santa Tere, en Guadalajara.
De un día para otro decidió que quería vender camarones y ceviche. Y fue así como se hizo de un carrito para emprender su negocio. Diez años después instaló un restaurante establecido que da empleo a 84 trabajadores y que atiende hasta 700 comensales un domingo cualquiera.
Manuel Torres, por su parte, es dueño de cuatro estéticas en la metrópoli y este mes fue reconocido como el estilista del año a nivel nacional: “Inicié sin recursos, sin tener un posgrado. Desde abajo. Nadie me ayudó, pero yo nunca me rendí, siempre tuve bien claro que tendría un negocio grande y en forma”.
Para dimensionar el alcance de su trabajo, un buen sábado llega a atender hasta 100 clientes (en una de las sucursales de Providencia). La innovación y el compromiso de estar siempre a la vanguardia han sido la receta del éxito: “Siempre innovamos, nos reinventamos y actualizamos para dar la mejor calidad”.
Otros como Alejandro Córdova, fundador de Grupo Acme, urgen a una reforma al sistema educativo superior: “Desgraciadamente en las escuelas enseñan a los jóvenes a ser empleados, en lugar de empresarios generadores de empleo”. Por ello lanza un llamado a los jóvenes a que piensen dos veces antes de decidir qué estudiar: “Tómense un tiempo, un año, para darse cuenta qué quieren, qué les gusta, qué les apasiona, qué harían sin que realmente les pagaran, y de ahí parten…”, recomienda Alejandro, quien luego de ser mesero y vendedor de seguros durante casi dos décadas, se convirtió en organizador de giras y conciertos de artistas de la talla de Luciano Pavarotti, Tonny Bennett, Julio Iglesias, Juan Gabriel, Café Tacvba, Caifanes, Jaguares y Alejandro Fernández.
Después de una inimaginable trayectoria ascendente, Alejandro está convencido de que se puede alcanzar el éxito con o sin una carrera.
Historias como la de Salvador Hermosillo Montes revelan que se puede emprender un negocio exitoso sin haber pasado por las aulas universitarias. “El Negro”, como lo conocen sus amigos, empezó a trabajar desde joven vendiendo elotes en las calles del popular barrio Santa Tere, en Guadalajara.
De un día para otro decidió que quería vender camarones y ceviche. Y fue así como se hizo de un carrito para emprender su negocio. Diez años después instaló un restaurante establecido que da empleo a 84 trabajadores y que atiende hasta 700 comensales un domingo cualquiera.
Manuel Torres, por su parte, es dueño de cuatro estéticas en la metrópoli y este mes fue reconocido como el estilista del año a nivel nacional: “Inicié sin recursos, sin tener un posgrado. Desde abajo. Nadie me ayudó, pero yo nunca me rendí, siempre tuve bien claro que tendría un negocio grande y en forma”.
Para dimensionar el alcance de su trabajo, un buen sábado llega a atender hasta 100 clientes (en una de las sucursales de Providencia). La innovación y el compromiso de estar siempre a la vanguardia han sido la receta del éxito: “Siempre innovamos, nos reinventamos y actualizamos para dar la mejor calidad”.
Otros como Alejandro Córdova, fundador de Grupo Acme, urgen a una reforma al sistema educativo superior: “Desgraciadamente en las escuelas enseñan a los jóvenes a ser empleados, en lugar de empresarios generadores de empleo”. Por ello lanza un llamado a los jóvenes a que piensen dos veces antes de decidir qué estudiar: “Tómense un tiempo, un año, para darse cuenta qué quieren, qué les gusta, qué les apasiona, qué harían sin que realmente les pagaran, y de ahí parten…”, recomienda Alejandro, quien luego de ser mesero y vendedor de seguros durante casi dos décadas, se convirtió en organizador de giras y conciertos de artistas de la talla de Luciano Pavarotti, Tonny Bennett, Julio Iglesias, Juan Gabriel, Café Tacvba, Caifanes, Jaguares y Alejandro Fernández.
Después de una inimaginable trayectoria ascendente, Alejandro está convencido de que se puede alcanzar el éxito con o sin una carrera.