Economía
México ya está en recesión, reconoce Agustín Carstens
Gobierno estudia posibles cambios legales para que pueda ajustar el presupuesto anual
CIUDAD DE MÉXICO.-
El secretario de Hacienda,
Agustín Carstens, dijo que México ya se encuentra en una recesión económica, y anunció que el Gobierno estudia posibles cambios legales para que pueda ajustar el presupuesto anual a partir del comportamiento de los ciclos económicos.
“Es un hecho que estamos en una recesión”, expresó en una reunión con corresponsales extranjeros una semana después de que su dependencia informó que para el primer trimestre de 2009 calcula una contracción de 7% del Producto Interno Bruto (PIB). La cifra definitiva será informada el próximo 20 de mayo.
La economía mexicana se contrajo en el cuatro trimestre de 2008 en 1.6 por ciento.
La teoría económica señala que cuando dos trimestres consecutivos tienen crecimiento negativo, el país entra en recesión. Carstens es el primer funcionario del gabinete del Presidente Felipe Calderón en reconocer que esa condición se configuró.
El secretario dijo que el pronóstico de contracción para el cierre de 2009 será de 4.1%, por efecto de la crisis financiera internacional y la reciente epidemia de influenza A H1N1, en lugar del margen de 2.5% a 2.8% que había determinado anteriormente.
La nueva estimación es ligeramente más conservadora que la del Banco de México, que prevé una caída de hasta 4.8% durante el año. Cada punto porcentual de contracción económica equivale a una pérdida de 100 mil a 120 mil empleos formales.
Carstens señaló que su pronóstico de contracción para todo el año considera un impacto de 0.3% del PIB por la influenza, que ha dejado 44 muertos y mil 160 contagiados.
El funcionario anticipó que 2010 representará varios retos para México en materia económica, debido a que entonces no se contará con los ingresos por concepto de coberturas petroleras que se contrataron para 2009 ante la caída del precio del crudo de exportación.
Para el presupuesto del próximo año, dijo, se tendrá que incrementar los impuestos, recortar el gasto o ampliar el déficit, o incluso una combinación de los tres elementos.
Señaló que Hacienda estudia la posibilidad de que el presupuesto anual pueda ajustarse conforme a los ciclos económicos, lo cual implicaría que si la economía va mal habría un mayor déficit fiscal, y si va bien, un superávit.
Carstens dijo que en los próximos meses se tomará una decisión, lo cual significaría enviar la iniciativa de ley.
“Es un hecho que estamos en una recesión”, expresó en una reunión con corresponsales extranjeros una semana después de que su dependencia informó que para el primer trimestre de 2009 calcula una contracción de 7% del Producto Interno Bruto (PIB). La cifra definitiva será informada el próximo 20 de mayo.
La economía mexicana se contrajo en el cuatro trimestre de 2008 en 1.6 por ciento.
La teoría económica señala que cuando dos trimestres consecutivos tienen crecimiento negativo, el país entra en recesión. Carstens es el primer funcionario del gabinete del Presidente Felipe Calderón en reconocer que esa condición se configuró.
El secretario dijo que el pronóstico de contracción para el cierre de 2009 será de 4.1%, por efecto de la crisis financiera internacional y la reciente epidemia de influenza A H1N1, en lugar del margen de 2.5% a 2.8% que había determinado anteriormente.
La nueva estimación es ligeramente más conservadora que la del Banco de México, que prevé una caída de hasta 4.8% durante el año. Cada punto porcentual de contracción económica equivale a una pérdida de 100 mil a 120 mil empleos formales.
Carstens señaló que su pronóstico de contracción para todo el año considera un impacto de 0.3% del PIB por la influenza, que ha dejado 44 muertos y mil 160 contagiados.
El funcionario anticipó que 2010 representará varios retos para México en materia económica, debido a que entonces no se contará con los ingresos por concepto de coberturas petroleras que se contrataron para 2009 ante la caída del precio del crudo de exportación.
Para el presupuesto del próximo año, dijo, se tendrá que incrementar los impuestos, recortar el gasto o ampliar el déficit, o incluso una combinación de los tres elementos.
Señaló que Hacienda estudia la posibilidad de que el presupuesto anual pueda ajustarse conforme a los ciclos económicos, lo cual implicaría que si la economía va mal habría un mayor déficit fiscal, y si va bien, un superávit.
Carstens dijo que en los próximos meses se tomará una decisión, lo cual significaría enviar la iniciativa de ley.