Deportes
La Roma gana Copa de Italia
El cuadro de capitalino se adjudicó el título por segunda vez consecutiva
La Roma se impuso por 2-1 en la final al Inter de Milán y ha conquistado por novena vez en su historial, la segunda de forma consecutiva, una Copa de Italia que ha vuelto a disputarse a partido único tras veintiocho años de haberse determinado a doble encuentro.
Desde 1980 la final de la Copa de Italia no se disputaba a partido único y, precisamente, ese año el triunfo final también se lo llevó la Roma. Ahora, se volvió a repetir la victoria capitalina en la que era la cuarta final consecutiva disputada por romanistas e interistas.
El partido de anoche vio a un Inter con las ausencias de su “salvador” liguero Zlatan Ibrahimovic, lesionado al igual que Esteban Cambiasso, y sin los sancionados Julio Cruz y Marco Materazzi, evidenciando al igual que en el último tramo liguero cansancio mental y una discreta frescura física.
Lo contrario que un Roma que ya estuvo cerca de amargar el título liguero a los interistas, decidido en la última jornada, y que anoche se “vengó” de su rival a base de una mayor determinación e idea creativa. Y es que el Inter volvió a carecer de criterio y de un jugador capaz de imponer ritmo.
El dominio del Roma se manifestó desde el pitido inicial, cuando su empuje y presión encerró al Inter en propio campo y estuvo cerca de traer el primer gol del partido por medio de Vucinic y Giuly.
El mejor trabajo del Roma trajo sus frutos en el minuto 36, cuando el defensa Philippe Mexes, a la media vuelta y en el borde del área pequeña, enganchó un espléndido disparo cruzado a saque de esquina del chileno David Pizarro, con el que batió a Francesco Toldo y puso el 1-0 en el marcador.
Un resultado merecido, que premiaba el dominio del Roma y con el que se iba al descanso. Apenas iniciada la segunda mitad, el conjunto romanista volvió a golpear al Inter, al anotar Simone Perrotta el 2-0, al 54’, en una acción protestada por los interistas al estimar que existió falta previa en el nacer del contragolpe romano, así como un posible posterior fuera de juego.
La final parecía sentenciada en favor romanista, pero un impresionante disparo desde unos 30 metros del joven francés Pelé, que saltó al campo tras el descanso, puso el 2-1, al 60’, y dio vida a un Inter que despertó ya de su letargo. Y cinco minutos después, pudo llegar el empate, en remate del argentino Burdisso que estrelló el balón en un poste.
El partido recuperó emoción, pero también elevó su nivel de roces y entradas a destiempo. De ahí al final, el Inter intentó el empate, pero su despertar fue tardío.
Alineaciones:
Roma: Doni; Cassetti, Juan, Mexes, Tonetto; De Rossi, Pizarro; Giuly (Cicinho, 66’), Aquilani (Panucci, 89’), Perrotta (Brighi, 74’); Vucinic.
Inter de Milán: Toldo; Maicon, Burdisso, Chivu, Maxwell; Javier Zanetti (Hernán Crespo, 89’), Vieira, Stankovic (Pelé, 46’), César (Jiménez, 61’); Balotelli, David Suazo.
Desde 1980 la final de la Copa de Italia no se disputaba a partido único y, precisamente, ese año el triunfo final también se lo llevó la Roma. Ahora, se volvió a repetir la victoria capitalina en la que era la cuarta final consecutiva disputada por romanistas e interistas.
El partido de anoche vio a un Inter con las ausencias de su “salvador” liguero Zlatan Ibrahimovic, lesionado al igual que Esteban Cambiasso, y sin los sancionados Julio Cruz y Marco Materazzi, evidenciando al igual que en el último tramo liguero cansancio mental y una discreta frescura física.
Lo contrario que un Roma que ya estuvo cerca de amargar el título liguero a los interistas, decidido en la última jornada, y que anoche se “vengó” de su rival a base de una mayor determinación e idea creativa. Y es que el Inter volvió a carecer de criterio y de un jugador capaz de imponer ritmo.
El dominio del Roma se manifestó desde el pitido inicial, cuando su empuje y presión encerró al Inter en propio campo y estuvo cerca de traer el primer gol del partido por medio de Vucinic y Giuly.
El mejor trabajo del Roma trajo sus frutos en el minuto 36, cuando el defensa Philippe Mexes, a la media vuelta y en el borde del área pequeña, enganchó un espléndido disparo cruzado a saque de esquina del chileno David Pizarro, con el que batió a Francesco Toldo y puso el 1-0 en el marcador.
Un resultado merecido, que premiaba el dominio del Roma y con el que se iba al descanso. Apenas iniciada la segunda mitad, el conjunto romanista volvió a golpear al Inter, al anotar Simone Perrotta el 2-0, al 54’, en una acción protestada por los interistas al estimar que existió falta previa en el nacer del contragolpe romano, así como un posible posterior fuera de juego.
La final parecía sentenciada en favor romanista, pero un impresionante disparo desde unos 30 metros del joven francés Pelé, que saltó al campo tras el descanso, puso el 2-1, al 60’, y dio vida a un Inter que despertó ya de su letargo. Y cinco minutos después, pudo llegar el empate, en remate del argentino Burdisso que estrelló el balón en un poste.
El partido recuperó emoción, pero también elevó su nivel de roces y entradas a destiempo. De ahí al final, el Inter intentó el empate, pero su despertar fue tardío.
Alineaciones:
Roma: Doni; Cassetti, Juan, Mexes, Tonetto; De Rossi, Pizarro; Giuly (Cicinho, 66’), Aquilani (Panucci, 89’), Perrotta (Brighi, 74’); Vucinic.
Inter de Milán: Toldo; Maicon, Burdisso, Chivu, Maxwell; Javier Zanetti (Hernán Crespo, 89’), Vieira, Stankovic (Pelé, 46’), César (Jiménez, 61’); Balotelli, David Suazo.