Deportes
Futbol sin balón
Por Ernesto López Mota
La clasificación o eliminación del Atlas a la Liguilla será el estandarte de batalla de una y otra planilla que pretenden la presidencia de la institución rojinegra.
En caso de que el conjunto atlista logre su calificación a la serie por el título, el grupo en el poder que encabeza el presidente, Carlos Martín del Campo, se fortalecerá de cara a una posible reelección.
En caso contrario, si los Zorros quedan eliminados de la Liguilla, el grupo opositor que encabeza Rubén Romero, utilizará este argumento para sumar adeptos a su causa.
Las elecciones para presidente del Club Atlas se realizarán en la asamblea del 30 de mayo, último lunes del mes, fecha que será confirmada por el Consejo Rojinegro.
Según sondeos extraoficiales hasta antes de conocer si el Atlas clasifica o no a la Liguilla, los momios favorecen al actual presidente Carlos Martín del Campo en razón de 20 votos más que su opositor, Rubén Romero; pero de acuerdo al planteamiento inicial las cosas pueden cambiar durante mayo cuando se intensifiquen las campañas proselitistas y se conozca el derrotero del equipo Atlas al finalizar el torneo.
La directiva del Atlas no ha logrado convencer a todos sus grupos de animación de cumplir con el requisito impuesto por la FMF de credencializar a los integrantes de las barras.
Todo indica que ya se rompieron las negociaciones entre los dirigentes atlistas y los líderes de las barras disidentes, que no aceptan inscribirse en el padrón de barras rojinegras.
Hasta la fecha, más de dos mil integrantes de los grupos de animación del Atlas ya cumplieron con el proceso de credencialización, sin embargo, los integrantes de dos grupos en específico, que suman aproximadamente 800 barristas, se muestran reacios a cumplir el procedimiento y son quienes se han ubicado en los dos últimos encuentros del Atlas en la zona alta del Estadio Jalisco, al margen de toda protección y bajo su riesgo.
Para el partido de este sábado en el Estadio Jalisco, los barristas sin credencial, negocian con la directiva atlista que les permitan sumarse al grupo ubicado en la zona exclusiva de los barristas atrás de la portería Norte en la zona “A”, para apoyar en mayor medida a su equipo en el juego decisivo contra Jaguares.
Los barristas rojinegros lamentan no tener apoyo de la directiva del Atlas para poder ingresar al Estadio Jalisco con los tambores que marcan el ritmo de sus cánticos.
La mente cerrada y la intransigencia de los policías de Guadalajara han impedido a los barristas introducir sus instrumentos a la tribuna durante este torneo.
La presencia del ex árbitro Armando Archundia, en la Comisión de Árbitros como instructor de los nazarenos, es el primer paso que dio la FMF, para que en la próxima Convención Nacional de Árbitros que se celebrará en Acapulco durante el verano, sea nombrado Archundia presidente del organismo en sustitución de Aarón Padilla, a quien se pretende colocar en otro puesto federativo, que bien podría ser su regreso a la Comisión Disciplinaria.
Comentarios: elopez@informador.com.mx
En caso de que el conjunto atlista logre su calificación a la serie por el título, el grupo en el poder que encabeza el presidente, Carlos Martín del Campo, se fortalecerá de cara a una posible reelección.
En caso contrario, si los Zorros quedan eliminados de la Liguilla, el grupo opositor que encabeza Rubén Romero, utilizará este argumento para sumar adeptos a su causa.
Las elecciones para presidente del Club Atlas se realizarán en la asamblea del 30 de mayo, último lunes del mes, fecha que será confirmada por el Consejo Rojinegro.
Según sondeos extraoficiales hasta antes de conocer si el Atlas clasifica o no a la Liguilla, los momios favorecen al actual presidente Carlos Martín del Campo en razón de 20 votos más que su opositor, Rubén Romero; pero de acuerdo al planteamiento inicial las cosas pueden cambiar durante mayo cuando se intensifiquen las campañas proselitistas y se conozca el derrotero del equipo Atlas al finalizar el torneo.
La directiva del Atlas no ha logrado convencer a todos sus grupos de animación de cumplir con el requisito impuesto por la FMF de credencializar a los integrantes de las barras.
Todo indica que ya se rompieron las negociaciones entre los dirigentes atlistas y los líderes de las barras disidentes, que no aceptan inscribirse en el padrón de barras rojinegras.
Hasta la fecha, más de dos mil integrantes de los grupos de animación del Atlas ya cumplieron con el proceso de credencialización, sin embargo, los integrantes de dos grupos en específico, que suman aproximadamente 800 barristas, se muestran reacios a cumplir el procedimiento y son quienes se han ubicado en los dos últimos encuentros del Atlas en la zona alta del Estadio Jalisco, al margen de toda protección y bajo su riesgo.
Para el partido de este sábado en el Estadio Jalisco, los barristas sin credencial, negocian con la directiva atlista que les permitan sumarse al grupo ubicado en la zona exclusiva de los barristas atrás de la portería Norte en la zona “A”, para apoyar en mayor medida a su equipo en el juego decisivo contra Jaguares.
Los barristas rojinegros lamentan no tener apoyo de la directiva del Atlas para poder ingresar al Estadio Jalisco con los tambores que marcan el ritmo de sus cánticos.
La mente cerrada y la intransigencia de los policías de Guadalajara han impedido a los barristas introducir sus instrumentos a la tribuna durante este torneo.
La presencia del ex árbitro Armando Archundia, en la Comisión de Árbitros como instructor de los nazarenos, es el primer paso que dio la FMF, para que en la próxima Convención Nacional de Árbitros que se celebrará en Acapulco durante el verano, sea nombrado Archundia presidente del organismo en sustitución de Aarón Padilla, a quien se pretende colocar en otro puesto federativo, que bien podría ser su regreso a la Comisión Disciplinaria.
Comentarios: elopez@informador.com.mx