Cultura

Tortas ahogadas y 'del Santuario', patrimonio inmaterial de Jalisco

Fiestas patronales, gastronomía, indumentaria, carnavales, música y técnicas artísticas conforman este listado

GUADALAJARA, JALISCO (02/JUL/2015).- “Qué bonito que sigamos con la tradición de la torta ahogada que nació en Guadalajara”, presume una autoridad en esta comida típica: don José, “el de la bicicleta”. Tiene 55 años vendiendo tortas ahogadas, pero en los últimos 25 se estableció en la calle Mexicaltzingo, al cruce con Calzada Independencia.

El dato es que ha vendido 30 tortas en sólo 15 minutos. No para de cortar las carnitas, el buche y los birotes encima del asiento de su bicicleta. Los limones, la cebolla y la salsa penden de las bolsas abiertas, amarradas al manubrio. Esta preparación está incluida dentro del patrimonio inmaterial de Jalisco, cuyo inventario está integrado por 430 diversas manifestaciones.

“Yo siento que las tortas se quedarán y ojalá lo conservemos muchos años”, confía José. Y de ello se encargará la Secretaría a través de la difusión y mantenimiento de su integralidad, de acuerdo con la Ley de Patrimonio.

Tomás Orendain Verduzco, director de Patrimonio Cultural, asegura que el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes señala que este inventario es único en el país. Fiestas patronales, gastronomía, indumentaria, carnavales, música y técnicas artísticas conforman este listado”.

Para recopilar el patrimonio existente en el Estado, detalla, lo realizaron con el mismo personal que tienen dentro de la dependencia, apoyado por universidades, el INAH y otras organizaciones. La Ley de Patrimonio, aprobada el 14 de agosto del año pasado, establecía la conformación de este inventario.

Las tortas ahogadas son únicas en el país ya que es el único lugar donde se da el bolillo salado, cuenta don José. Además, él trata de conservar ingredientes característicos de la ciudad como el chile Yahualica, que también es parte del inventario inmaterial: “La preparación no es original mía, pero trato de conservar los mismos ingredientes”.

Lo mismo ocurre con las tortas al estilo “del Santuario”, cuyo proceso de elaboración y receta ya es parte de los conocimientos tradicionales sobre gastronomía. Felipe Guerrero, uno de los encargados del negocio, “se siente orgullo de que nos tomen más en cuenta, esperemos que así siga”. El negocio comenzó hace 40 años.

Temas

Sigue navegando