Cultura
De nuevo a escena
La obra 'Escenas de una mentirosa y su perro' ofrece temporada con nueva actriz
GUADALAJARA, JALISCO (09/MAY/2011).- La puesta en escena, que dirige Daniel Constantini, se presentará dos fines de semana, a partir del 13 de mayo, en el foro ubicado en el Núcleo del Agua Azul.
Una de las novedades es la entrada de la actriz Coralia Manterola, quien sustituye a Arcelia Maisterrena (fallecida en noviembre de 2010), y comparte el escenario con Karla Constantini que le da vida a Antonia.
Esta obra escrita por Daniel Constantini muestra cómo una pequeña niña de 11 años se siente rechazada por su familia, por sus compañeros de la escuela y por su mundo. A su manera, ella poco a poco va enfrentando su entorno y deja al descubierto sus miedos, sus pensamientos y anhelos.
Este montaje cuenta con dos becas, la de Creadores escénicos 2008-2009 y la del Programa del Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales 2010-2011 del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes.
El talento
Daniel Constantini, dramaturgia y dirección
Luis Manuel Aguilar “Mosco”, iluminación y espacio escénico
Andrés David Hernández, diseño de vestuario
Carlo Constantini, música original y escenografía
Fernando Sakanassi, asistente de dirección
Coralia Manterola, actriz
Karla Constantini, actriz y productora general
Coralia Manterola
Una actriz que luego de vivir cinco años en Puerto Vallarta, regresó a Guadalajara con la convicción de abrazar de nuevo a su gran pasión; el teatro. Ahora se sube al escenario al lado de Karla Constantini con Una Mentirosa y su Perro. Manterola no ha estado en el circuito en los últimos años, pero mientras estuvo en activo en los foros de la ciudad, trabajó muy de la mano con directores como Javier Serrano y Rafael Garzaniti, ambos punto de referencia en la formación y propuesta escénica en la ciudad.
En 1989 inició su carrera artística, estudió en el CEDART y en su primera incursión escénica fue dirigida por Claudia Cecilia Alatorre, quien impulsó el proyecto El Bodegón, “ahí me enamoré del teatro y encontré mi camino”.
Luego se encontró con el director Javier Serrano, en los tiempos en el que el Teatro El Venero apenas nacía “también me tocó toda esa parte de pintar paredes, maderas. Siempre he estado ahí en los primeros momentos de los proyectos, eso ha sido muy importante para amar más, para poner la energía y el corazón” señaló en entrevista. Poco después se topa con el argentino Rafael Garzaniti, quien dirigió la Escuela de Teatro de Xalisco, así Coralia formó parte de la primera generación de dicha instancia, que tuvo como maestros a Mary Paz Gómez Pruneda, Pepe Ruiz Mercado, Beto Ruiz, Rosa María Brito, Moisés Suárez. Ha hecho comerciales, cortometraje, videohome y teatro.
A sus 38 años destaca: “Hoy veo público en el teatro, cuando me fui era difícil que hubiera salas por lo menos a medias, yo lo recuerdo que había funciones que se tenían que cancelar, en ese sentido creo que sí hay un gran cambio en el hábito hacia el teatro. Ahora es muy común, ver una obra y si no está lleno ya ves una audiencia considerable. Creo que ha habido crecimiento en cuanto a propuestas escénicas, como que los grupos se arriesgan más, son más comprometidos, no tan complacientes, cosa que en Guadalajara es algo con lo que hemos luchado”.
Una de las novedades es la entrada de la actriz Coralia Manterola, quien sustituye a Arcelia Maisterrena (fallecida en noviembre de 2010), y comparte el escenario con Karla Constantini que le da vida a Antonia.
Esta obra escrita por Daniel Constantini muestra cómo una pequeña niña de 11 años se siente rechazada por su familia, por sus compañeros de la escuela y por su mundo. A su manera, ella poco a poco va enfrentando su entorno y deja al descubierto sus miedos, sus pensamientos y anhelos.
Este montaje cuenta con dos becas, la de Creadores escénicos 2008-2009 y la del Programa del Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales 2010-2011 del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes.
El talento
Daniel Constantini, dramaturgia y dirección
Luis Manuel Aguilar “Mosco”, iluminación y espacio escénico
Andrés David Hernández, diseño de vestuario
Carlo Constantini, música original y escenografía
Fernando Sakanassi, asistente de dirección
Coralia Manterola, actriz
Karla Constantini, actriz y productora general
Coralia Manterola
Una actriz que luego de vivir cinco años en Puerto Vallarta, regresó a Guadalajara con la convicción de abrazar de nuevo a su gran pasión; el teatro. Ahora se sube al escenario al lado de Karla Constantini con Una Mentirosa y su Perro. Manterola no ha estado en el circuito en los últimos años, pero mientras estuvo en activo en los foros de la ciudad, trabajó muy de la mano con directores como Javier Serrano y Rafael Garzaniti, ambos punto de referencia en la formación y propuesta escénica en la ciudad.
En 1989 inició su carrera artística, estudió en el CEDART y en su primera incursión escénica fue dirigida por Claudia Cecilia Alatorre, quien impulsó el proyecto El Bodegón, “ahí me enamoré del teatro y encontré mi camino”.
Luego se encontró con el director Javier Serrano, en los tiempos en el que el Teatro El Venero apenas nacía “también me tocó toda esa parte de pintar paredes, maderas. Siempre he estado ahí en los primeros momentos de los proyectos, eso ha sido muy importante para amar más, para poner la energía y el corazón” señaló en entrevista. Poco después se topa con el argentino Rafael Garzaniti, quien dirigió la Escuela de Teatro de Xalisco, así Coralia formó parte de la primera generación de dicha instancia, que tuvo como maestros a Mary Paz Gómez Pruneda, Pepe Ruiz Mercado, Beto Ruiz, Rosa María Brito, Moisés Suárez. Ha hecho comerciales, cortometraje, videohome y teatro.
A sus 38 años destaca: “Hoy veo público en el teatro, cuando me fui era difícil que hubiera salas por lo menos a medias, yo lo recuerdo que había funciones que se tenían que cancelar, en ese sentido creo que sí hay un gran cambio en el hábito hacia el teatro. Ahora es muy común, ver una obra y si no está lleno ya ves una audiencia considerable. Creo que ha habido crecimiento en cuanto a propuestas escénicas, como que los grupos se arriesgan más, son más comprometidos, no tan complacientes, cosa que en Guadalajara es algo con lo que hemos luchado”.