Jueves, 13 de Febrero 2025
Suplementos | Ek Balam, encuentro con la ciudad de las leyendas

Magia y esplendor del “jaguar oscuro”

El sitio arqueológico, ubicado en el centro oriente de Yucatán, ofrece al turista un paseo por la riqueza arquitectónica e histórica

Por: EL INFORMADOR

GUADALAJARA, JALISCO(30/MAY/2010).- Si algo sabemos de los mayas, es que fueron poseedores de una rica cultura. Sus conocimientos en ciencias y matemáticas han llegado hasta nuestros días a través del esplendor de su arquitectura y sus monumentales ciudades, en tanto que en la actualidad se habla en demasía de aquello a lo que llamaron sus siete profecías, las cuales en muchos casos han sido mal interpretadas, asumiendo que se trata del inminente anuncio del fin del mundo, el cual supuestamente podría ocurrir a finales del año 2012.

Sin embargo, ese asunto es harina de otro costal, pues habrá que analizar a profundidad qué es lo que quisieron decir en sus mensajes, y si hay algún interés por echarse un chapuzón en éstos, internet ofrece un mar de información al respecto.

Lo importante ahora es hablar de uno de los sitios más relevantes de la cultura Maya: Ek Balam, una antigua ciudad en medio de la selva yucateca que hace poco tiempo comenzó a ser estudiada a profundidad por arqueólogos estadounidenses, en coordinación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Un poco de historia

En la “relación de Ek Balam” (1579), el encomendero Juan Gutiérrez narra que el capitán Francisco de Montejo le otorgó la cabecera de Tiquibalan o Ek Balam, con cinco pueblos, por haber sido uno de los conquistadores de la región.

En dicha relación se asienta también que Tiquibalan fue fundado y poblado por un gran señor llamado Ek Balam, quien edificó la mayor de las cinco estructuras.

En lengua maya yucateca, el nombre de la antigua ciudad -tomado de ese gobernante-, se traduce literalmente al español como “jaguar oscuro o negro”, aunque hay algunos nativos que también lo interpretan como “lucero jaguar”.

El período cultural más importante en Ek' Balam fue el clásico tardío de año (700 - 100 después de Cristo); sin embargo, los primeros pobladores llegaron en años anteriores y siguieron viviendo ahí después de 900; algunas construcciones pequeñas posteriores a esa fecha así lo demuestran. Sus características son muy diferentes a los edificios más antiguos por lo que es claro que la sociedad sufrió algunos cambios y se dedicaban menos recursos y trabajo a la construcción.

La riqueza del jaguar


Si hay algo que en verdad llama la atención de Ek Balam, es la majestuosidad de sus edificios, enormes estructuras, como es el caso de La Acrópolis que alcanza los 160 metros de largo, por 70 de ancho y más de 31 metros de altura; por ello, se trata de la más grande construcción y la más voluminosa de Mesoamérica.

Pero hay más qué mirar en Ek Balam, ciudad que durante siglos se ocultó en medio del bosque y cuyas edificaciones más importantes fueron protegidas además por enormes murallas.

La totalidad del sitio arqueológico abarca una extensión aproximada de 12 kilómetros cuadros de asentamiento continuo, con 45 estructuras. Está rodeada por dos murallas concéntricas de piedra que debieron tener empalizadas de madera para aumentar su altura; existe también una tercera muralla que une algunos edificios principales haciendo aun más restringido el acceso para una mejor defensa del área, las murallas interior y exterior tienen cinco entradas en las que desembocan cinco sac bé oob, o caminos prehispánicos perfectamente bien orientados, un sac bé esta orientado hacia el norte que comunica con Chichen Itza y otro al este que comunica con Coba y uno mas al oeste, siendo el lado sur en el único en que se encuentran dos caminos.

Hasta el momento, se cree que Ek-Balam fue en la época prehispánica, el centro rector de un área considerable, en el que se concentró el dominio y la riqueza de un grupo que tuvo el poder y los recursos para edificar estructuras de gran magnitud, el juego de pelota y una importante red de caminos para erigir estelas y otros monumentos, así como para proteger y delimitar sus construcciones principales con las tres murallas.

Un sitio único

La arquitectura de Ek-Balam hasta lo que actualmente sabemos no tiene comparación. Así lo han constatado los investigadores del Centro INAH Yucatán, Leticia Vargas de la Peña y Víctor Castillo Borges, quienes han publicado un artículo en torno a la riqueza de este mágico lugar.

“La Acrópolis han dejado ver los rasgos construidos arquitectónicos, decorativos que evidencian que Ek-Balam no se asemeja a ningún otro asentamiento prehispánico conocido. La manera en que están distribuidos sus edificios y la forma que tienen y sus elementos con que fueron ricamente decorados son muy especiales y diferentes a los que conocemos. Ek-Balam no solamente resalta las diferencias con otras ciudades prehispánicas, sino las variaciones del sitio mismo”, dicen.

Destacan en algunos rincones del sitio arqueológicos, figuras de estuco y pinturas murales que revelan los secretos milenarios celosamente guardados en las paredes de La Acrópolis de Ek-Balam, asentamiento precolombino que alcanzó un alto grado de desarrollo en el manejo de estuco remodelado para darle a las edificaciones imponentes acabados llenos de simbolismo, aún desconcertantes para los investigadores.

“Es tal la belleza de esos estucos que los antiguos mayas se negaron a derribarlos para construir sobre esos vestigios: Prefirieron cubrirlos cuidadosamente con capas de tierra y roca, como presagiando que mil años después los herederos de la región se maravillarían con estas obras, mezcla de ofrendas religiosas, reafirmación de poder o tributos a reyes y gobernantes fallecidos”, dicen los especialistas del Centro INAH Yucatán.
Ek Balam es una muestra de la riqueza ornamental de la arquitectura maya aplicada en aposentos reales, adoratorios, habitaciones de control gubernamental y religioso.

Arte mural en la zona


Y si no es suficiente con ver las magnas estructuras que edificaron los pobladores de Ek Balam, en el interior hay otros grandes tesoros que no dejan de sorprender. Así es el caso de las pinturas murales que aparecieron en las habitaciones estucadas. Algunas de estas obras representan la fachada original del lugar donde se hallaron y describen un encuentro entre varios personajes con ofrendas para un invitado especial.

Llama también la atención un croquis dibujado en una banqueta, que representa la posición exacta de algunas habitaciones en el conjunto, en una planta y con trazos sencillos el pequeño plano permaneció casi mil años de bajo de toneladas de tierra y piedra.

Otro enigma son las columnatas de mampostería del nivel superior; raras si se tomo en cuenta que por la temporalidad del lugar y la forma del diseño, era difícil encontrar alguna de ellas sin embargo, los expertos ya registraron seis. Las columnas tradicionales de las zonas arqueológicas mayas son cilindros de roca maciza. Sin embargo, las columnatas de Ek-Balam tienen el centro duro y delgado con acabados de piedra apiladas y pegadas entre sí.

Las palabras no bastan para describir la majestuosidad de este sitio arqueológico, vale la pena darse una vuelta y encontrarse frente a frente con la sabiduría de los mayas, grandes constructores y seres pensantes.


Un día con los Mayas

• “Un día con los Mayas” ofrece una experiencia cautivadora que muestra a un pueblo vivo en una zona poco explorada y que también es maravilla de este territorio,

• El paseo da inicio en el Centro Arqueológico del Jaguar Negro (Ek Balam) en un recorrido de una hora y media, con el apoyo de un guía de esta tierra que podrá compartir con los visitantes la cosmovisión de su Nación.

• Después se hace un recorrido de kilómetro y medio en BiciTaxi hacia el Cenote X’canche.

• Ahí, los visitantes podrán lanzarse en una tirolesa con 60 metros de extensión; bajar a rapel 15 metros, o pasear en Cayac en los 60 metros de diámetro del Cenote.

• Además hay una opción para los menos audaces: descansar en alguna hamaca yucateca y saborear la tradicional comida del pueblo maya.

• Más informes sobre este recorrido se pueden obtener en: www.ekbalam.com.mx/diamaya/


Algunos detalles

• Ek Balam se localiza a 26 kilómetros al norte de Valladolid y a 186 kilómetros al oriente de Mérida, por la carretera a Cancún.

• Esta zona arqueológica puede ser visitada todos los días a partir de las 8:00 hasta las 17:00 horas.
• La entrada es gratuita los domingos y días festivos, para turistas nacionales.

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