Mejores carreteras

La red carretera de Jalisco ha sido, históricamente, una de las menos funcionales del país, por el abandono de que ha sido objeto. Transitar por esos caminos es exponerse a correr una aventura nada agradable: carriles angostos, baches al por mayor, carencia de señalamientos, puentes que sólo permiten el paso de un vehículo, e incluso la cinta asfáltica invadida en algunos tramos por el zacate que crece a la orilla. La bien ganada mala fama de las carreteras del Estado ha trascendido los límites con otras entidades y, por años, el mal estado en que se encuentran ha sido el martirio de los conductores.

A pesar del riesgo que representa una carretera en pésimas condiciones... riesgo en todos sentidos: el de sufrir una descompostura en el vehículo, que sería el menor, hasta el estar expuestos a los accidentes; a pesar de ello, la red estatal de carreteras ha sido el talón de Aquiles de las autoridades, que sólo se han limitado a hacer reparaciones menores, como es el taponamiento de baches y, en el mejor de los casos, ampliaciones en puntos conflictivos, como curvas peligrosas o puentes angostos; trabajos paliativos solamente, cuando lo que en realidad se necesita es una reestructuración a fondo.

Ante esta situación, el Gobierno del Estado, a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano, dio a conocer ayer el Programa de Modernización y Conservación de la Red Carretera Estatal, que arrancará con una serie de obras a realizarse durante los próximos seis meses y con una inversión de 591 millones de pesos, para dar atención a más de tres mil kilómetros de caminos a lo largo y ancho de la geografía jalisciense. Se harán trabajos de conservación en dos mil 934 kilómetros; de reconstrucción en 48.80 kilómetros, y de modernización en 86.82 kilómetros. Serán en total 424 acciones las que se llevarán a cabo.

Sin embargo, el anuncio de este programa parece tardío, ya que es inminente el inicio del temporal de lluvias, que además de que detendrá los trabajos que se inicien de inmediato, volverá a causar destrozos en las cintas asfálticas, y sólo hasta que concluyan las lluvias se podrá volver a las obras y los costos pueden elevarse.

Aún así, es un programa que traerá grandes beneficios a los usuarios de la red carretera, y habrá que esperar que a finales del presente año Jalisco pueda presumir de contar con caminos seguros que permitan a quienes por ellos transitan, hacerlo con confianza, sin temor a tener descomposturas en sus vehículos y, sobre todo, con menos riesgo de sufrir accidentes. Tal vez ahora sí nuestro Estado está en vías de cambiar la deteriorada imagen que tiene respecto a las condiciones de sus carreteras.