Ahí te dejo esos dos pesos

Era un genio ese Chava Flores. “Oye Bartola, ahí te dejo esos dos pesos… pagas la renta, el teléfono y la luz. Con lo que sobre, coges de ái para tu gasto. Guárdame el resto, para echarme mi a-li-puz”. ¿Acaso alguien ha puesto de manera más brillante, sucinta y lúcida la escasez de recursos en México? Ah, cómo hace falta hoy para cantarle a la lucha presupuestal.

La cosa no está fácil y la sangrienta guerra ya comenzó. Como no hubo modificaciones sustanciales a la Ley de Ingresos, gracias al cielo y a estos diputados, los ciudadanos que no fuman no harán nuevos corajes en 2011 con nuevos impuestos o un aumento al IVA, pero eso pone en serios aprietos a los gobiernos de las entidades federativas.

Jalisco cree que la tiene ganada y anda de plácemes, pues aunque tiene reducción en varias áreas, el proyecto parece darle un poco más para su gasto. Si no se atraviesan el Distrito Federal, Durango, Michoacán o Morelos, por mencionar sólo algunos, Jalisco recibirá poco más de 52 mil millones de pesos federales, frente a los 48 mil (en cifras redondas) que tuvo este año.

Pero faltan aún varias semanas para que el proyecto se apruebe, y mientras tanto los legisladores federales, los diputados locales y los gobernadores de las otras entidades han sacado bombas discursivas, volantes para evitar recortes, uñas, garras y dientes.

Los legisladores locales del Distrito Federal, por ejemplo, acusan al Gobierno federal panista de quitar tres mil millones de pesos con tal de que los perredistas (eso dicen, uno qué) no puedan gobernar. Llevan por lo menos 15 días de trabajo intenso en todos los espacios: volantean en la calle, impulsan iniciativas para ser tomados en cuenta en programas de asistencia social que hoy son sólo para los estados, grillan en el restaurante Los Cristales de la Cámara de Diputados y, al frente de esta campaña, Marcelo Ebrard insiste en que los estados ineficientes se llevan más pesos que los productivos, y eso no, señor, no es justo.

Pero no sólo los políticos capitalinos están con los pelos de punta. En Durango, el secretario de Finanzas trae campaña porque les quitarán 50%, según el actual proyecto, de inversión en infraestructura, lo que hará que ese Estado quede con carreteras agujeradas (ay, eso recuerda a Jalisco). En Michoacán, el Gobierno local está alarmado porque dejará de recibir dinero para educación; el gobernador de Sinaloa lleva semanas cabildeando con los legisladores federales porque, dice, “el que hambre tiene, le atiza a la olla”. Lo más inquietante de todo es la estrategia de comunicación: a cada Entidad que reclama, el Gobierno federal le contesta que si suma bien, tendrá más recursos. O sea que como decía Chava Flores, no hay que ser, qué despilfarro: “Tienen peso sobre peso… siempre hasta llegar a dos”.