Improductivos”, institutos para atacar problemas sociales: Sandoval Íñiguez

GUADALAJARA, JALISCO.- Tras la creación de instituciones gubernamentales encaminadas al desarrollo social, se oculta, para el cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, el engrosamiento de la nómina en la administración pública, ya que estas responden más, al pago de salarios, que a una eficiente tarea de política social.

Así lo señaló Juan Sandoval Íñiguez, durante su homilía de este lunes, en la misa con motivo de la trigésimo primer Semana Univa (Universidad del Valle de Atemajac), y que llevó por tema “El Valor de ser una gran familia”, señalando que el entramado burocrático para la procuración de mejores condiciones de vida, “como lo dijo Juan Pablo II”, nunca suplantará el papel de la familia.

Defendiendo férreamente a la familia de tipo tradicional, “como célula de la sociedad”; el prelado exhortó a los asistentes entre los que se encontraban alumnos, profesores y padres de familia, a reivindicar el papel de ésta institución, y lamentó, lo que llamó como “las amenazas que enfrenta por la legalización del aborto, la cultura de la muerte, el divorcio y el abandono de los padres por parte de los hijos”.

De este modo, para el cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, la creación de nuevas instituciones gubernamentales encaminadas al desarrollo social, entre los que nombro al Instituto de la Mujer, son “improductivos, y sirven como “un atajo de vividores que viven del presupuesto”.

Sandoval Iñiguez, afirmó que la burocracia no solucionará los problemas de la sociedad, si ésta no fortalece primero los lazos familiares, que calificó como debilitados al pasar de los años, propuestos por la Iglesia Católica.

Así mismo, ante la determinación que tomó la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en torno a la despenalización del aborto, en el Distrito Federal, para que pueda practicarse entes de las doce semanas de gestación, el cardenal lamentó lo que tachó como “un crimen”.
Denunciando “egoísmo” por parte de los jóvenes para la proliferación de ésta práctica, Sandoval Íñiguez dijo que “el mal ejemplo del Distrito Federal y la Suprema Corte puede cundir a los estados, no se puede negar, ojalá que no suceda”.