Jalisco | Proliferan en el primer cuadro de la ciudad Cuestionan valor nutricional de comida en restaurantes chinos Muchos de estos establecimientos no cuentan con aviso de funcionamiento ante la Secretaría de Salud Jalisco, sólo tienen licencia municipal Por: EL INFORMADOR 29 de diciembre de 2011 - 02:50 hs En promedio, el costo por el bufete ronda los 50 pesos en este tipo de establecimientos. / GUADALAJARA, JALISCO (29/DIC/2011).- Aunque puede parecer muy atractivo al bolsillo, comer en un lugar donde se ofrece mucho por poco dinero no siempre será una buena opción, pues no se sabe si detrás de la oferta está la buena higiene en la preparación de los alimentos, o si estos son de calidad. Un ejemplo de ello son los restaurantes de comida china que poco a poco han invadido las calles del Centro de Guadalajara. Se trata de bufetes con comida preparada a destajo, en donde se ofrecen gran cantidad de alimentos fritos ricos en grasa, y que lejos de tener un buen valor nutricional, pueden afectar la salud y el peso corporal. La doctora adscrita al programa de Activación Física y Promoción de la Salud de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ), Edna Jáuregui Ulloa, destaca que, en cuestión de higiene, una de las inconsistencias de estos restaurantes es que utilizan los mismos sartenes para la preparación de muchos guisos, además de que reutilizan los aceites para no gastar de más. “Esto altera la estructura molecular de las grasas, hace que sea menos digerible y se desbarata más lento, más en nuestro organismo; la digestión es más lenta y menos efectiva, la grasa la desdoblamos menos y se nos deposita en el cuerpo”. Explica que la comida frita o con mucha grasa tiene altos contenidos de sal, lo que provoca mayores estímulos de placer a los sentidos y la hace más adictiva y atractiva, comparada con algún alimento cocinado al vapor. El contenido calórico de cada alimento preparado en este tipo de lugares, como los rollitos primavera, costillitas, camarones fritos o pollo agridulce, es alto, por lo que “si los sumamos, nos da alrededor de mil calorías en una sentada, con alta cantidad de sales y de grasas, en lugar de distribuirlas en todo el día”, refiere la doctora. La cultura oriental siempre se ha caracterizado por tener una alimentación sana, basada en arroz, verduras y pescados cocinados, en 70% de los casos, al vapor. Sin embargo, por cuestiones de mercadotecnia de este tipo de giros, la mayoría de la comida que se oferta es frita, capeada o guisada, que resulta más atractiva para la población en general. Jáuregui Ulloa advierte que todos los alimentos aportan nutricionalmente, el problema es lo que se le adiciona, como la salsa de soya, que tiene un estimulante adictivo, cátsup y otros aderezos. “No nos quedemos con la idea de que las comidas orientales son malas, sino que las adaptaciones que se les ha dado, es lo que es negativo”. Menos quejas de las esperadas Todos los días surgen de la nada, y muchas veces en algunos lugares improvisados. Los restaurantes de comida china son una invasión no sólo en la Zona Metropolitana de Guadalajara, sino de todo el Estado, advierte la dirección de Regulación Sanitaria de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ). Aunque menos de las esperadas, sí se han recibido quejas respecto a estos negocios, sobre todo por cuestiones higiénico-sanitarias, según informa el director del área, Juan Carlos Olivares Gálvez. Menciona que, debido al alto número de restaurantes de esta índole, es difícil verificar lo que ocurre en cada establecimiento, por lo que considera importante que el ciudadano emita una denuncia en caso de encontrar malas condiciones en sus instalaciones. “Por lo que normalmente les llamamos la atención es porque no cuidan los hábitos de los consumidores; es muy común que llega la gente, y en el mismo plato que desocupó, lo acercan a la charola donde van a tomar la siguiente comida y eso hace que muchas veces escurra a la charola donde se va a servir”. En general, las principales irregularidades que se han encontrado en la visita a estos bufetes de comida china tienen que ver con la falta de cuidado en las prácticas de los comensales, pero también en las condiciones que se encuentran algunos espacios, como los baños, que están sucios y sin papel higiénico. Hasta el momento no se han registrado casos de intoxicación por el consumo de algún alimento de estos lugares, y “no porque no los haya habido, sino porque simplemente no se ha documentado”, advierte Olivares Gálvez. No obstante, reconoce que muchos de los restaurantes no cuentan con aviso de funcionamiento ante la Secretaría, y sólo cuentan con la licencia municipal para poder operar en el lugar. Este aviso de funcionamiento es decisión particular de la empresa, como un compromiso moral ante la dependencia estatal, en donde se “presentan” y se hacen responsables de lo que ocurra en sus establecimientos. Pero, de denunciarse alguna irregularidad por parte de algún ciudadano, si el restaurante en cuestión no cuenta con este aviso, puede hacerse acreedor a una sanción. PARA SABERAporte calórico En relación a las porciones de los alimentos que más comúnmente se ofrecen en estos lugares, se destaca que: Un rollito primavera ofrece 200 calorías. Una porción de cerdo agridulce, que es de alrededor de 150 gramos, contiene alrededor de 400 calorías. Una costillita de cerdo otorga 100 calorías. Contrario a ello, una verdadera comida oriental, como un plato de camarón al vapor, ofrece sólo 180 calorías. CRÓNICA Un trabajo de ocho pesos la hora Dicen que los orientales son los creadores del concepto de calidad total. Disciplina y esfuerzo es lo que los ha sacado adelante. Poco a poco, entre China y Japón, le van quitando su lugar a Estados Unidos en la lista de los países que dominan el planeta. En Guadalajara existe actualmente un boom de orientales que han decidido poner sus negocios, principalmente restaurantes, en el Centro Histórico. Pero al final, veremos que la calidad total también tiene sus daños colaterales. El choque de culturas produce más de lo imaginado. Raúl llegó al negocio donde trabajaba y decidió mal: mató a su jefa. La noche del domingo previo a las fiestas patrias de 2010, en la calle Independencia casi a su cruce con la Avenida Alcalde, se escuchaban gritos. Bueno, no eran gritos sino alaridos inentendibles, como si alguien quisiera gritar y no lo dejarán. Los ciclopolicías que iban pasando se acercaron, entraron al local y vieron a la mujer tirada y sin remedio. Muerta. Delante del cadáver estaba Raúl, el joven de 25 años que traía puesta una playera que le hace juego con el color de su coraje. Raúl llegó a Guadalajara procedente del Distrito Federal, consiguió lo que pocos han podido hacer en estos años, dos empleos: los fines de semana era mesero en un bar de uno de sus amigos, y de lunes a viernes trabajaba en el mismo sitio donde lo encontraron, una tienda de artículos orientales. En un video que está a resguardo de las autoridades se ve que Raúl ha dejado de llorar, cuando va soltando datos su cara se relaja mientras su piel sigue brillosa. “La quería matar porque le tenía odio”, dice. El hecho que se registró en los diarios de nota roja dice que los policías encontraron a una mujer identificada como Chen Li Hua, de 48 años, de origen chino, amarrada de pies y manos, además de tener cinta en la boca. Raúl, un asesino confeso, le quito la vida asfixiándola, la estranguló. Las personas que están grabando la declaración de Raúl insisten ¿por qué la mataste? “Es que le agarre odio…”. Raúl parece que se dejó llevar por el instinto de defensa. Dos semanas antes fue despedido por quien fuera su jefa, quien lo maltrataba por 600 pesos. “Primero me decía estúpido, y luego groserías en su idioma, siempre me humillaba, le fui agarrando odio y la mate con mis manos” por eso, esa noche llegó con ese plan, el de matarla. “Y aproveche para llevarme el dinero y un teléfono”, 10 mil 200 pesos y un teléfono celular fue el pretexto. * “No, aquí yo no puedo ayudar, patrón no está, vete”. La mujer que atiende la caja del restaurante Chong Wah está asustada. Todas las noches los empleados de este restaurant tiran los caldos que les quedaron como residuos en las coladeras de la calle Enrique González Martínez. Es miércoles y son las tres de la tarde. Los caldos siguen ahí. La calle apesta a comida echada a perder, pero dentro del local los comensales pagan 70 pesos por un bufete que seduce miradas. El negocio es redondo, ellos cocinan limpio en un Centro Histórico que huele mal hasta en sus ductos. La limpieza es un valor agregado que pocos consiguen en la zona. Y por eso, en los últimos años el boom de los restaurantes de comida china consiste en una frase: “El mexicano malinchista que quiere mucho por muy poco”. O por lo menos eso piensa Carmen, la encargada de traducir el español al chino a su jefa en el restaurante China Koung. “Son bien especialitos, no les gusta platicar de nada, siempre tienen miedo de que los mexicanos se los quieran tranzar”. Y quizá tenga razón, su jefa está viendo que Carmen platica con el reportero y un minuto después le ordena que limpie una zona que ya está limpia. Carmen dice que ella está contenta con el empleo, “pero si es cierto que son bien codos”. * Patricia es una barredora humana. En sus piernas lleva destreza, en sus manos un montón de trastes. De sus mejillas resbalan dos gotas de sudor y sus cabellos se ven húmedos. A sus jefes les hemos pedido que nos platiquen sobre el éxito de los restaurantes de comida china y el proceso de calidad que tienen. Ambos, cuyos nombres no se pueden escribir en español, afirman que sí con la cabeza, pero sólo sonríen. Hablan entre ellos. Después vamos a concluir que lo único que saben decir es “¿para aquí o para llevar?”, mientras aprietan con toda presteza los botones de la calculadora y cobran. Patricia es la encomendada para hablar con el reportero, “pero nomás rapidito, porque tengo que seguir limpiando”, advierte. Como el tiempo es poco, y aprovechando que sus jefes no entienden español, ella habla: “La verdad es que son bien codos y bien negreros, pero son los que nos pueden dar trabajo”, dice Patricia Moreno, la principal ayudante del restaurante Went Tao, ubicado en la Avenida Juárez casi esquina con Donato Guerra. A ella le pagan ocho pesos la hora, trabaja ocho horas los siete días de la semana. “A veces me dan los 70 pesos al día y con las propinas se compensa”. Tiene poco más de un año con el puesto, es la segunda al mando, pero en realidad parece capataz, aunque tampoco se confía. Sabe que no puede aspirar a más en un negocio como ese. “Estos son los chinos más buena onda que me he encontrado, yo he trabajado con otros y te piden más esfuerzo y te pagan menos”. Sobre la comida, dice que “aquí sí desinfectamos las verduras, en otros lados ni siquiera las lavan”. De sus jefes afirma que “son bien raros”. Y de nuevo tiene razón. Al momento de despedirnos descubrimos que los hemos ofendido: les ofrecemos la mano y para los orientales eso es demasiado. La sonrisa se les desdibuja, sus dientes cariados se han escondido y el gesto cordial se ha esfumado. Patricia sigue en su labor. PIDEN DAR PREFERENCIA A PRODUCTOS NACIONALES Los comercios no sólo son giros gastronómicos Las tiendas dedicadas exclusivamente a la venta de productos chinos, ésas inconfundibles por su decoración, no representan amenaza al sector comercial, pues se trata de negocios establecidos; sin embargo, al comprar un producto de éstos en lugar de uno hecho en México, afecta a la economía nacional, por lo que lo mejor, “por nuestro propio bien”, es comprar lo hecho en México, consideró el presidente de la Cámara de Comercio de Guadalajara, Miguel Alfaro Aranguren. ''Hay productos chinos que entran por contrabando y que se venden sumamente baratos en comercios no legalmente establecidos, en el ambulantaje, en la ilegalidad o en la clandestinidad, y hay otros tipos de productos chinos que pagan sus aranceles y que llegan a los comercios establecidos, eso está bien, es parte de la competencia mundial y de la apertura comercial, eso no nos genera incomodidad. Creemos que lo que es importante es que tengamos la cultura como consumidores de favorecer lo nuestro, y los comercios que están en igualdad de circunstancias, o sea que vendan el mismo tipo de productos, pues que mejor opten por comprar a proveedores nacionales''. Al igual que en el sector restaurantero, no existe una cifra oficial de negocios que se dediquen a la venta de productos chinos, pues los permisos y licencias se otorgan por giro y no por tipo de mercancía, ni siquiera hay estimaciones reconoció el dirigente del máximo órgano de representación comercial. Aunque no existe un cálculo de la presencia de éstos, podrían disminuir a corto plazo, pues las ventajas competitivas que tiene China y que le permitieron por décadas fabricar productos con costos ínfimos y por consecuencia a precios muy bajos de comercialización, poco a poco se terminan. La mano de obra china ya no es tan barata como lo era años atrás y por lo que empresas de todo el mundo optaron por maquilar en China, actualmente la mano de obra de los chinos va cobrando el valor real. Además, la lejanía de China con Estados Unidos, el mercado más grande del mundo, ha “disparado” los costos por los traslados, incremento que se impacta en el precio final y ya no se venden tan baratos. ''No está mal la competencia, lo que nos incomoda es la competencia desleal que afecta más a los industriales que a los comerciantes, pero por solidaridad los apoyamos, los respaldamos y sabemos que afecta a la planta productiva nacional, a los mexicanos en general''. Para el comercio representa competencia desleal cualquier mercancía ilegal. Si se trata de productos que ingresaron a territorio nacional por la vía ''ortodoxa'', es decir, cumpliendo con todos los requisitos para su importación, no hay problema. Los comerciantes buscan productos que sean económicamente accesibles al consumidor, y si además son de buena calidad, pues no debe perjudicar; ''sin embargo, la afectación a la industria manufacturera acaba perjudicando a la larga a todos''. Temas Secretaría de Salud Jalisco Alimentos Municipios Canirac Lee También Mantendrán maiceros protesta en caseta de Ocotlán Autoridades estatales intervienen Comisaría de La Huerta Hay buena disposición para avalar la reforma al Poder Judicial en Jalisco: Zamora Protesta de trabajadores del SAT podría traer estas consecuencias para los contribuyentes Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones