GUADALAJARA, JALISCO (04/AGO/2017).- Al ingresar a Mazamitla, los paseantes encuentran a grupos de personas que se acercan a los vehículos para ofrecer a sus ocupantes cabañas en renta a precios módicos. Esa es una práctica informal que afecta a los hoteles-cabaña establecidos, pues son trabajadores por comisión de los dueños de cabañas particulares, quienes evaden impuestos.El director de Turismo de la localidad, Marco Antonio Rivera, reconoce que es una práctica que se ha detectado y desatendido durante los últimos cinco años, porque el municipio no tiene facultad para sancionarlos.Además, tampoco hay respuesta de los dueños de estas cabañas a los programas de regularización que se han habilitado. Por eso, la Dirección de Turismo buscará apoyo de la Secretaría estatal para resolver el tema “antes que se nos salga de las manos”.Reconoce que ese comercio informal afecta las finanzas del municipio, porque el Ayuntamiento no obtiene ingresos por esa labor.
