Aglomeración por bares es apta para accidentes, afirman

GUADALAJARA, JALISCO (11/NOV/2013).- Hay accidentes cada semana, afirmó uno de los vecinos de la zona de bares detrás del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas de la UdeG, con relación al incidente del viernes pasado cuando un grupo de criminales provocaron que a la fecha cuatro personas hayan fallecido al atropellarlas intencionalmente con una camioneta. En medio del caos por los cientos de asistentes de auto y de a pie no es raro que la gente se juegue la vida al estar en el lugar o al partir de ahí.
 
Peleas todos los fines de semana, sillas voladoras, accidentes de choques y desorden vial es lo que se presenta sobre todo el día viernes después de las 16:00 horas, cuando alumnos del centro universitario dejan las aulas y acuden al cruce de Parres Arias y avenida de Los Enebros, donde oportunamente se instalaron desde hace varios años algunos bares. Actualmente hay cuatro de estos establecimientos: el River; un bar más acondicionado en un terreno junto a un corral de vacas; el más pequeño, el Zona Wings; y el clausurado tras el homicidio de los jóvenes, el Aloha, que era el más concurrido de todos.
 
La calle donde se encuentran, sobre Los Enebros, se estrecha en este punto a causa de que los dueños de los predios no cedieron el terreno que se supone que correspondía al arroyo de la avenida de seis carriles: frente al Aloha sólo hay espacio para dos autos que se reduce cuando los viernes se estacionan los clientes de los bares; además, no hay banquetas a esta altura. Tal es una de las razones por las que la concurrencia de los viernes hace más peligroso el sitio, aseveraron habitantes.
 
El tráfico local se vuelve caótico las tardes y noches de los viernes: los autos se estacionan a la derecha de calle en ambos sentidos, toman el carril junto al camellón y hasta se suben a este espacio por un punto donde las autoridades municipales no construyeron machuelo. Los habitantes explicaron que los coches estacionados se extienden hasta por 300 metros al oriente y hasta llegar a Parres Arias. La asistencia a estos sitios es en su gran mayoría de estudiantes.
 
La solicitud de los vecinos es que, si permanecen abiertos estos lugares, que cuando menos haya vigilancia policial para que se inhiban los excesos y se resguarde la integridad de las personas y el orden para quienes viven o transitan por ahí.
 
Piden revocar licencias de giros
 
Es lamentable que tengan que ocurrir desgracias para que las autoridades y sociedad atiendan los problemas, opinó el rector del CUCEA, José Alberto Castellanos Gutiérrez, quien solicitó a las autoridades municipales que dejen de permitir la operación de estos cuatro establecimientos: "Nosotros sí haríamos un llamado enérgico a que ojalá y se tomen cartas en el asunto, ojalá que una vez clausurados se revoque de manera definitiva no solamente este negocio sino los que hay ahí alrededor".
 
El rector expuso que el problema no es sólo del CUCEA, sino que hay casos similares de giros de venta de bebidas alcohólicas instalados alrededor de los otros centros universitarios de la UdeG que buscan captar clientela en los estudiantes, pese a que en ocasiones violan reglamentos municipales:
 
"Los reglamentos contemplan 200 o 300 metros (de distancia de escuelas), no recuerdo bien lo que tiene que estar de retirado el establecimiento. En este caso si bien el establecimiento está alrededor de unos 700 metros de retirado del ingreso del CUCEA por Parres Arias, realmente si nos fuéramos a los límites de los terrenos que tiene la universidad aquí, el bar está establecido a menos de 200 metros de terrenos de la Universidad de Guadalajara".
 
Los estudiantes además se arriesgan para llegar, en el caso del CUCEA, pues Castellanos advirtió que gran parte de los jóvenes acuden a pie sobre Parres Arias en varios cientos de metros sin banquetas. Y el riesgo de ser atropellados es más cuando regresan a sus autos (que a veces dejan en el estacionamiento de la universidad) o cuando toman el camión en el Periférico.
 
El académico recordó que desde hace un par de meses trabajan con la Secretaría de Movilidad para llevar a cabo acciones contra el consumo irresponsable de alcohol y su mezcla con el volante: "No es un asunto que se esté realizando a partir de este lamentable acontecimiento, es un asunto que veníamos trabajando pero que finalmente va a caer en un buen momento para nuestra comunidad".