Y Cuba se abrió al mundo: llegó la inversión extranjera

LA HABANA.-  El ahora extinto Papa Juan Pablo II llamó en 1998 a que 'Cuba se abra al mundo y el mundo se abra a Cuba', en un momento en que la inversión extranjera empezaba a llegar de forma pausada pero constante a la isla, en especial al turismo.  
En la última década, Cuba se abrió a la inversión extranjera -algo impensable en los primeros años de la revolución y de economía centralizada-, lo que le ha permitido un crecimiento económico que se prevé de 8.0 por ciento para 2008.  
Aunque se trata de un sistema mixto de inversiones, en el cual el gobierno cubano mantiene el control sobre las empresas, ahora podría existir la posibilidad de una apertura total tras la renuncia de Fidel Castro a la presidencia, cargo que ostentó durante casi 49 años.  
Si bien es cierto que la cubana ha sido por años una economía centralizada, invertir en esta nación caribeña comenzó a ser posible desde la década de los 90, cuando el gobierno autorizó la entrada al país del capital extranjero.  
La apertura de Cuba, que comenzó luego del colapso del bloque soviético entre 1989 y 1991, ha logrado reducir los efectos de la pérdida del principal socio comercial de la isla y del embargo que Estados Unidos le impuso en 1962.  
Las inversiones crecieron el año pasado 16.8 por ciento, principalmente en el sector turismo, uno de los pocos abiertos inversionistas extranjeros y dominado por empresas españolas, mientras otros campos como construcción están cerrados. 
De hecho, España ocupa el primer lugar de los países con inversiones en Cuba, seguida por Canadá e Italia, con una inversión total que rondó los 1.25 mil millones de dólares entre 1996 y 2006.  
Según datos recientes, el flujo comercial entre ambas naciones superó los 1.13 mil millones de dólares en 2006, cifra que coloca a España como el tercer socio comercial de Cuba, después de China y Venezuela.  
En 2004, las cifras fueron negativas, pero tanto en 2005 como en 2006 volvió a repuntar la inversión, en particular en el sector turismo, en el cual de las 12 empresas turísticas extranjeras presentes en la isla, nueve son españolas.  
Pero, la inversión española en Cuba crecería si se dieran las condiciones financieras necesarias y se abrieran, por parte de Cuba, nuevas posibilidades en otros sectores, dijo Javier Gómez-Navarro, presidente del Consejo Superior de Cámaras de España, el año pasado.  
Aún cuando las autoridades de la isla han permitido la inversión extranjera, falta ver si en la nueva etapa que comienza en Cuba tras la renuncia de Fidel Castro, el presidente en funciones Raúl Castro hará anuncios para avanzar en el sector económico.  
Según analistas, podría iniciarse una serie de reformas económicas en Cuba, con muy pocas variaciones políticas y muy lentamente.  
La nación caribeña inició la apertura al desaparecer en 1991 el Consejo de Ayuda Mutua Económica (Comecon), organización de cooperación económica formada por los países socialistas para fomentar sus relaciones comerciales y contrarrestar el capitalismo.  
Para superar la crisis, el gobierno cubano promovió la inversión de capital extranjero y firmó acuerdos con países como China, Italia y Venezuela.  
Como padre de la Revolución Cubana, Fidel Castro tenía el peso histórico y político para conducir el camino de la reforma económica, sin embargo la enfermedad lo salvó de 'enterrar el modelo económico centralizado que él mismo construyó', dijeron analistas.  

NOTIMEX 19:39 19/02/08 CCMS